La Tercera es la Vencida... ¿O es la Cuarta?

Parte 5

Todo había comenzado tres días antes de que se viera con la Kiseki no Sedai y Kagami.
Akashi acababa de llegar a su "humilde" morada. Cuando bajó de la limosina se topó con un hombre de mirada calculadora, que a juzgar por su apariencia debía ser alguno de los socios de su padre, decidió no darle importancia y pasarlo de largo pero se detuvo cuando el hombre se puso en su camino.

-Tu debes ser el joven Akashi Seijuro no?

-Así es y usted es?- el hombre solo se limitó a sonreír ante aquello cosa que desesperó al emperador, así que decidió salir del lugar con toda la educación que se le había dado- Mi padre vendrá dentro de poco, así que si me disculpa- Estaba por retirarse pero nuevamente fue retenido por el desconocido

-Es a usted al que he venido a buscar para poder entregarle esto-le da una carpeta-Por favor, haga lo que dice allí

Sin mas que decir se despide educadamente dejando a Akashi. Este por su parte abre la carpeta pero al ver su contenido la cierra rápidamente, entra a su casa y se va directo a su habitación. Ya en esta, quita todo lo que tiene en su mesa, se acomoda en la silla y comienza a leer. Mientras más leía más se preocupaba; esa cosa contenía absolutamente todo lo que a él le había tocado hacer con respecto a algunos trabajos en la empresa de su padre, ¿Acaso no había tomado las medidas necesarias para que eso quedara solo en los archivos? Siguió leyendo solo para toparse con cosas más preocupantes, allí estaba no solo su vida muy bien investigada sino que también las vidas de sus amigos y los lugares en los que estarían esas vacaciones ¿Quién diablos era ese hombre y qué era lo que quería? No tardó en encontrar la respuesta. Al final de todo se encontraba el sobre de una carta, saco su contenido (que no era solo una hoja) y leyó lo que aquel hombre le pedía:

"Joven Akashi, como pudo notar se de algunos fraudes que pasaron en la Compañía Akashi. Pueda que piense que lo mejor será advertir a su padre pero, le recomiendo que haga esto solo, es por su propio bien pues no creo que quiera que se filtren algunas cosas a los medios; cosas que estoy muy seguro y ni siquiera su padre está enterado pero que si lo hace seguro y usted pagará por los platos rotos y la humillación que cause al nombre de los Akashi. Se que es listo y ya comprendió a lo que me refiero pero por si a caso le aclaro todo. Consiga que su padre firme los contratos que vienen adjuntos a esta carta y el secreto de sus preferencias sexuales no saldrán a luz. Tiene límite de tiempo, recogeré los contratos en un mes"
Atte:
Yamamoto Nao

No podía dejar que su padre se enterara de ciertas cosas pues sabia que las consecuencias serían muy malas y el único afectado sería él. Releyó el nombre de quien escribió la carta, conocía ese nombre, había escuchado de su padre que ese hombre le había causado problemas a su mejor y más grande socio pero, como era de esperarse de un hombre experimentado en los negocios logró hacer que todo se volviera en contra de Nao. Tal vez si encontraba a ese socio de su padre podría ayudarle, el único problema era que no tenia ni la menor idea de quien era o como se llamaba.

"Necesito encontrar a ese hombre"- fue el pensamiento de Akashi

Desde ese día hasta en el que huyó a la casa de Kagami, había notado que lo seguían y vigilaban de cerca. Por eso mismo aceptó la propuesta de los chicos de quedarse con Taiga... Bueeeno por eso y otros motivos que su otro yo ya le había dejado en claro. Kagami solo era un chico normal, así que nadie sospecharía que se escondía en su apartamento cierto? Había prometido no salir a menos que se cumplieran las siguientes opciones:
1. Que Nao se cansara de seguirlo
2. Que se le ocurriera algo para que lo dejaran en paz
3. Que se acabaran las vacaciones

La tercera opción era la que mas cerca estaba a cumplirse o eso había pensado, porque ahora iba en la calle al lado de cierto pelirrojo. ¿Cómo había cedido a aquello?