Los gritos de Dania se esparcían por todo el lugar, confundiendo a los jóvenes. Hasta que el teléfono de tomas, Luis, y Alejandra. Marcaban las doce de la noche.
Los teléfonos se apagaron, y se empezó a escuchar la alarma de incendios del pueblo. El pueblo empezó a pudrir su madera, las casas envejecían más de lo que ya estaban. Niebla empezó a aparecer, nublando la visión de los chicos.
- ¡Debemos salir ahora de aquí! Grita Luis intentando busca a Alejandra.
- ¡Amor, no te veo! Grita Alejandra
- ¡Dania!¡ Donde estas! Grita tomas
En esos segundos, aparecen del suelo personas esqueleto que median más de dos metros.
Los chicos empiezan a correr sin poder saber dónde corrían. Gritos y llantos se escuchaban por todos lados, como si el pueblo estuviera lleno de personas desesperadas.
Tomas ingresa al hospital del pueblo, y detrás del a parece Alejandra muy asustada y agitada.
Pero mientras Luis corría, es atrapado por uno de los esqueletos, el cual sin piedad lo levanta y lo corta pon la mitad.
Destrozándolo...
Alejandra grita de dolor, mientras tomas serraba la puerta.
- ¡Todo es tu maldita culpa, si me hubiese ido con Luis como él quería, el no estaría muerto! Le grita Alejandra
- ¿Tú crees que yo sabía que esto sucedería?
Los dos se quedaron mirando, mientras las criaturas empiezan a golpear la puerta.
- ¿Recuerdas lo que dijo la joven antes de suicidarse? Le pregunta tomas
- Eso de mantener el silencio. Le susurra Alejandra
- Exacto, es mejor que no hablemos hasta salir de aquí.
Al dejar de hablar, las criaturas se detuvieron y se movieron a otro lugar.
Los dos jóvenes caminaban por los pasillos del hospital, el cual goteaba de todas las paredes, sangre fresca.
Las luces se encendían y se apagaban...
De repente escucharon gritos de personas al final de los pasillos. Los jóvenes se acercaban lentamente. Y se encontraron con un grupo de criaturas esqueléticas, las cuales les sacaban la piel a otras personas, comiéndole la piel.
Alejandra se tapa la boca para no gritar, mientras tomas abre una puerta de una sala de archivos e ingresa silenciosamente.
Hay se topa con periódicos del pueblo, los cuales daban la fecha de 1787.
Hablaban de un virus que trajo un hombre extranjero, y para detenerlo, las autoridades quemaron el pueblo con los infectados dentro, mujeres, ancianos, hombres y niños. Murieron en un incendio que comenzó a las 12 de la noche...
Tomas, no podía creer lo que estaba sucediendo. Pero lo único que tenía claro en su mente, era que tenía que buscar a su novia. Al salir de la oficina le dijo a Alejandra
- Busquemos la puerta trasera. Susurrándole.
Pero al moverse, Alejandra patea por accidente una botella que se encontraba en el suelo. Llamando la atención de las criaturas esqueléticas.
Los dos jóvenes corrieron sin parar, mientras los monstruos los perseguían sin detenerse.
Tomas encuentra la salida trasera, escapando por ahí. Pero Alejandra es atrapada por una de las criaturas mordiéndole el hombro. Tomas aparece y con una roca que había en el lugar, se la lanza en la cabeza a la criatura. Soltando a su amiga, y logrando escapar.
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7:12 HISTORIAS SINIESTRAS
Horror7 historias cortas de terror, ficción, misterio, suspenso y muerte.