Siempre tan calmada y tan libre, dudaba que fueras real, algunas veces aún lo hago, ¿Como alguien como tú podría ser real?, ¿Como lo nuestro podría ser real?, No lo entendía, no lo entiendo.
Miércoles. 5 de Marzo. 6:00 P.M.
Casi un mes después y como cada miércoles, ahí en esa cafetería, me esperabas sentada, siempre tan paciente, siempre tan calmada.
"¡Llegaste!" La emoción y sorpresa seguían en tu voz.
"¿Por qué siempre lo dices así?" No lo entendía.
"¿Así como?"
"Es como si no esperaras que viniera, llevamos un mes viéndonos aquí y cada vez que entro, te sorprendes." Explique.
"Nunca se sabe cuando alguien va a desaparecer, así, sin más." Sonreíste, pero había nostalgia en tu mirada.
No hablamos más sobre el tema, y a pesar del clima fresco, nuestra conversación, cálida, tanto como nuestras bebidas, parecieran nunca terminar.
Martes. 11 de Marzo. 3:14 P.M.
Aún estaba en la florería, no había gente, ¿Que tantas personas podrían necesitar flores en un martes?, durante todo el día, solo vino un par de ancianitas, comprando semillas y un hombre que probablemente hizo enojar a su esposa y trataría de conseguir su perdón con flores. Estaba realmente aburrida y cansada, solo quería irme, no me mal entiendas, amo las flores; Pero al día siguiente te volvería a ver, tienes que entender mi ansiedad por irme, por verte.
"¡Pocahontas, aquí estas!" Y ahí estabas.
"¿Que haces aquí?" No pude evitar reír.
"Yo se que me extrañabas, no trates de mentirme,ahora ¿Podrías darme agua? camine mucho y después de 5 florerías al fin te encontré" Reí aún más.
"Yo creo... que tú me extrañabas y no podías esperar hasta mañana para verme." Al menos yo me sentía así.
"Realmente vengo a comprar un ramo de flores." No voy a decir que esto no despertó mi curiosidad, mentiría.
"¿Alguna ocasión especial?" Pregunte.
"Alguien especial, y según wikipedia..." sacaste una pequeña nota de tu bolsillo trasero. "Margaritas blancas; se utilizan para seducir a la persona en cuestión, margaritas blancas con rosa; solo tengo ojos para ti, y... Rosas blancas; Soy digna de ti. Así que eso quiero." Sonreíste y ni la mas hermosa flor se te hubiera comparado, lo juro.
"No puedo creerlo, ¿Realmente recurriste a wikipedia para esto?" Tenias que estar bromeando.
Te encogiste de hombros.
"Wikipedia siempre tiene la respuesta, o eso dicen, espero que si"
"Eres increíblemente estúpida." y reí.
Prepare el ramo, tal y como me lo pediste, me pagaste lo debido y tras sonreírme, te fuiste.
"Nos vemos, Elsa." Fue lo último que dijiste, antes de volver a sonreír y cerrar la puerta.
Mi estomago se revolvió al pensarte regalando esas flores, con tal significado a alguien más.
4:00 P.M.
Mi turno al fin terminaba, me despedí de Sofia, quien era la quien se quedaba a cubrir el siguiente turno, y con un pésimo animo camine hacia la parada del autobús, aquella donde me atreví a hablarte por primera vez.
Estabas ahí, con el ramo de flores aún en las manos.
No quise acercarme, y trate de ignorarte, pero te diste cuenta de que había llegado.
"¡Hey!" casi corriste para llegar a mi.
"Hola." trate de sonreír.
Me mirabas y te miraba, nadie decía nada, y yo solo quería irme.
"Para ti." Me ofreciste el ramo sonriendo.
"Me debes estar Jodiendo, Naomi" Estaba realmente sorprendida.
"No es la reacción que esperaba, y mira yo se que apenas nos conocemos, pero como dije, nunca se sabe cuando alguien va a desaparecer, y yo no quiero que desaparezcas, no se el porqué cuando estoy contigo, es como si todo estuviera bien, y me gusta el sentimiento y me gustas tú, y di algo ¿quieres?" Estuviste a nada de perder la calma.
Te quiero.
"Eres una tonta." No podía hacer otra cosa que insultarte.
"De nuevo, no lo que esperaba"
Yo tampoco lo esperaba.
y entonces me lance a ti, te envolví en un abrazo y si por mi hubiera sido jamas te hubiera soltado, pero lo hice.
Un beso, interrumpido por nuestras sonrisas para después empezar otro.
Supongo que así fue como realmente todo comenzó.
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Ataraxia.
RomanceAtaraxia: 1- Imperturbable, serenidad. 2-Estado de animo que se caracteriza por la tranquilidad y la total ausencia de deseos o temores.