c u a t r o

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Cariño, estas cavando tu propia tumba.

Calum era una persona de pocas palabras, si no estaba seguro de decir algo el simplemente mantendría su boca cerrada.

A su izquierda, Camille lo miraba desde la cerca que separaba sus patios, la noche era silenciosa y sus ojos brillaban con misterio en la oscuridad. Lucía tranquila, con un cigarrillo quemando en sus dedos.

Calum no se sentía feliz al tener que ser vecinos.

En algún punto de la madrugada, Camille tomó un bolígrafo y un pequeño trozo de papel de su bolsillo, escribió algo rápidamente y lo acercó a la punta de su encendedor. Cuando las llamas cubrieron la punta lo lanzó al patio del moreno y entró a su casa.

No cruzó miradas con él de nuevo.

La curiosidad le ganó, Calum salió corriendo a apagar el trozo de papel y abrirlo a ver que había escrito.

Justo en el centro, con una perfecta caligrafía se leía “Calum".

Fire » c. hDonde viven las historias. Descúbrelo ahora