Señorita Sexo

Capitulo 9

Poso mi trasero sobre el lavamanos, levanto mi falda hasta que esta queda más arriba de mis caderas, dejando a la vista mi vagina. Abro mis piernas mientras que paso mi dedo pobre ella y me muerdo el labio. Inuyasha me mira mientras baja su pantalón junto a los bóxer. Una erección hace acto de presencia.

Toco mi clítoris y un gemido sale de mis labios, miro a Inuyasha quien se masturba mirándome, sus manos trabajan en su pene de manera suave, cuando aumento la velocidad en mi clítoris el lo hace en su pene. Introduzco un dedo en mi húmedo interior y un chillido se escapa de mis labios.

—Basta de juegos—Inuyasha se acerca a paso rápido y saca un paquete plateado lo rasga con sensualidad y se lo pone para luego de un empeñon introducirse en mi interior. Mi boca forma una perfecta O, me agarro de sus hombros para poder coordinarme a sus golpes en mi interior.

—¡Oh Dios sigue!—gimo enloquecida, el besa mi cuello mientras manosea mis pechos causando más calor en mi cuerpo.

—Muévete precisoa—me muevo con más rapidez, busco su boca y meto mi lengua sin tregua.

—¡Inuyasha!—gimo enloquecida por todas las sesaciones que su enorme pene me hace sentir.

—Oh sigue así—de repente sale y me baja del lavamanos, tengo mis manos agarrandome del lugar donde antes estaba sentada  de piernas abiertas—estira más ese precioso culo hermosa—hago lo que me pide y siento sus dedos en mi interior.

—¡Ah!—gimo moviendo mis caderas mientras miro a Inuyasha por el espejo. Saca sus dedos y los chupa, es lo más excitante que he visto. Me penetra y suelto un grito.

—Siempre tan húmeda—gruñe, toma mi cabello y me hace estar más cerca de el. Muevo mis caderas mientras el sigue como salvaje entrando y saliendo. Adentro, afuera. Siento que me vengo en cualquier momento y el lo sabe porque aumenta el ritmo haciendo que ambos nos corramos juntos.

—¡Dios!—mi respiración es caótica.

—Me encantas—susurra—amo el sexo contigo—susurra en mi oído.

—Por algo me llaman señorita sexo—le guiño un ojo y lo veo subir su pantalón.

—Nos vemos en clase—sale y yo me limpio el desorden que tengo entre las piernas. Cuando me arreglo con una sonrisa voy hasta mi aula, toco y el profesor con una mala cara me deja entrar.

—Pero miren quien es... La señorita sexo, ¿ahora a quién te follaste?—pregunta con una sonrisa maliciosa Kikyo. Esa chica siempre me ha detestado.

—Al chico que quieres que te joda el agujero que tienes entre las piernas—todos ríen y ella borra la sonrisa que tenía. Gracias a mis fuentes se que Kikyo quiere algo con Inuyasha, al parecer le gusta o algo así.

—Silencio, ahora presten atención—sonrío porque gracias al bombón de Inuyasha mi día a mejorado.