Estuviste largo rato abrazando a Liam en silencio. Él necesitaba a alguien que lo apoyara en esos momentos ya que eran duros. Acabar una relación tan larga y sólida como había sido la de Danielle y Liam era duro. Lo entendías bastante pues a ti también te había pasado hace un tiempo.
Cuando los chicos llegaron de vuelta con comida para ustedes, se quedaron algo sorprendidos al ver en qué estado estaban, ninguno entendía lo que realmente había pasado pero por algo de lógica, deducían algo.
—Hola, les traemos comida—habló Niall—son hamburguesas como os gusta a los dos, ¡seguro que os apetece! ¿Cierto?
—No tengo mucha hambre ...—susurró Liam.
—Vas a comer Liam—lo miraste—los dos vamos a comer tranquilamente y relajándonos, ¿vale? Olvida el tema por unos minutos.
"Hacerle reír ... me da igual lo que hagáis"—le escribiste un mensaje a Harry a escondidas.
Y de ahí empezó la diversión. Louis y Zayn empezaron a imitar cosas y Niall tenía que averiguarlas. Harry como siempre, se quedó casi desnudo y empezó a bailar y a golpear todo lo que se le ponía en frente, parecía un robot.
—¡Eso es ... un elefante!—exclamó Niall entusiasmado.
—No. What? No way. Get out—se movía como robot Louis mientras que Zayn le pegaba en el trasero con el palo de la escoba. Una escoba que no sabías de dónde había sacado.
—Puedes hacerlo mejor Niall—reía Liam tumbado en el suelo divertido. Adorabas verlo sonreír.
—¡Es un maldito robot Niall!—exclamó Zayn parando su juego—¿De dónde sacaste lo de elefante?
—Por los sonidos extraños que hacían—se hizo el indignado Niall—ya no juego más con ustedes, son unos tramposos. ¡Malditos!
El objetivo de hacer reír a Liam había salido muy bien, él estaba práticamente tirado en el suelo riéndose de las estupideces que sacaban los otros de la boca. Sí, podían ser muy payasos cuando querían.
Y bueno, tú también habías hecho alguna que otra payasada haciendo rimas y tocando la guitarra de mala manera. Si había que subirle el ánimo a alguno, en eso participaban todos sin rechistar.
—¿Ya estás mejor?—sonreíste.
—¿Qué ha pasado?—preguntó Zayn sentándose a su lado.
—Danielle decidió terminar nuestra relación—habló poniéndose serio de nuevo—no sé qué ha pasado pero me llamó hace tres días y me lo dijo. No quiere verme tampoco. No sé en qué me habré equivocado pero supongo que estas cosas suceden y no tienen explicación alguna, ¿cierto?
—Lo sentimos amigo—lo abrazó Niall sabiendo lo triste que tendría que estar—no sabíamos que algo así podría pasar. ¿Por qué no nos avisaste antes? Habríamos estado contigo Liam.
—Lo siento, supongo que quise encerrarme y machacarme a mí mismo por todo—se encogió de hombros—sabéis perfectamente que soy así, prefiero callar.
—A la próxima no lo hagas—habló Harry que todavía seguía en bóxers y sinceramente era traumático ya.
—¿Podrías ponerte la ropa?—lo miraste dando un bostezo.
—No, esto es libertad—abrió los brazos—la música sale mejor estando en libertad y mi libertad es estar con ropa ropa.
—Son imposibles—reíste negando con la cabeza lentamente.
—¿Salimos esta noche?—preguntó Liam de pronto.
—¿Qué?—lo miró Zayn sin entender.
—Sí, salir todos a algún club o algo para distraernos un poco—los miró a todos—no estoy bromeando. Y no pienso quedarme amargado sólo porque Danielle ha decidido terminar con esto, todo continúa en esta vida y nosotros tenemos que seguir con ella o nos quedamos atrás, no quiero vivir del pasado. El amor se ha acabado para Liam Payne.
—Tranquilo hermano—rió Niall—no digas eso, das un poco de miedo.
El resto del día estuvo bastante normal. Estuvieron escribiendo y riendo, siempre eran risas si se trataba de One Direction. Eso sí, estuviste bastante distraída pensando en todo lo que Liam había dicho, en parte tenía mucha razón, uno tenía que seguir con su vida si quería seguir adelante, vivir en el pasado no era lo mejor. Lo que te preocupaba era queLiam se convirtiera en un insensible y patán. Solía pasar esas cosas. Un chico sufría una desilusión amorosa y después se encargaba de ser un hijo de la gran puta con todas las chicas que se le acercaba.
Del estudio se fueron sobre las diez de la noche, se iban a preparar ya que iban a salir como bien había propuesto Liam. Lo bueno de todo era que ustedes vivían bastante cerca uno del otro así que no debían recorrer mucha distancia. A las once y media debían estar listos ya que tú tenías que recoger a Niall y Zayn ya que ellos dos no conducían y por tanto no tenían coche. Harry iba a ir con Louis y Liam ya que vivían más cerca.
—Hola chicos—los saludaste cuando entraron al coche—¿cómo andan?
—Bien—asintieron—¿y tú?
—Bien pero me sigue preocupando Liam—pusiste en marcha el coche—no me gusta esa actitud de "ya no quiero amor". Él y Danielle han pasado por mucho y dudo que ella haya acabado por una tontería. Seguramente se arreglarán pronto pero hasta entonces hay que vigilar bien a Liam.
—Sí, eso mismo pensamos nosotros—admitió Niall.
Al club llegaron después de unos veinte minutos, no estaba muy lejos. En el camino hablaron de todo un poco y escucharon música en la radio. Al llegar vieron el coche de Harry así que significaban que habían llegado. Se bajaron y entraron ante las miradas de los guardaespaldas que estaban vigilando a los chicos desde lejos.
—¿Dónde están estos?—preguntó Zayn mirando alrededor del local para divisar a los chicos—¡Ah mira a Hazza en la barra!
Al llegar a la barra Harry estaba pidiendo bebidas. Estaba pidiendo tres mojitos y eso significaba que Liam también bebería, cosa que no ibas a permitirlo.
—¿Vas a beber?—le preguntaste mirándolo expectante.
—¿Qué pasa? Probaré, sólo uno—prometió.
—SÓLO UNO LIAM, te estoy vigilando—te alejaste para ir a la barra.
Como siempre, cada uno pidió su bebida, no solían beber lo mismo. Niall era el de la cerveza, bebía mucha cerveza. Louis, Harry y Zayn eran los del whiskey. Y tú bueno ... tú no eras de mucha bebida, estabas en el equipo de Liam, coca-cola y con eso vivías feliz y contenta.
—¿Qué bebes?—preguntó Harry.
—Coca-cola—te encogiste de hombros—tengo que conducir y de todos modos no me gusta mucho el alcohol.
—La verdad es que eres nuestra única salvación para llegar a casa—rió divertido—los que conducimos hemos bebido y eres la única que nos puede llevar a casa.
—Son un desastre—reíste.
Como bien había dicho Harry, la única que no bebió en toda la noche fuiste tú. Ellos estaban bebiendo bastante y no iban a poder conducir, así que seguramente te tendría que tocar a ti llevarlos a sus casas..
