Al llegar a la habitación reíste divertida, Liam estaba algo más travieso de lo normal y eso lo podías confirmar por los dos besos que te había dado y por los roces. No sabías qué pleaneaba pero te encantaba verlo así.
—¿Te duchas primero?—te preguntó quitándose la camiseta y limpiándose el sudor de su frente con ella.
—Como quieras—asentiste—ves tú si quieres así después puedes pedir de cenar.
—Vale, voy—te dio un beso y entró a la ducha.
Aunque podía sonar algo sorprendente, Liam no era nada tímido en la intimidad. De hecho cuando entró a la ducha dejó la puerta un poco abierta, no la cerró ni puso el pestillo como lo hacías tú. Suponías que él estaba acostumbrado a estas cosas, tú solías ser un poco más tímida en eso aunque no lo parecía.
—Babe por favor dame unos bóxers que se ma han olvidado coger—escuchaste gritar aLiam.
Oh mierda, eso implicaba entrar al baño donde seguramente él estaba desnudo ... o duchándose ... y le ibas a ver desnudo y ... y ... te daba pánico. Una cosa era verlo sin camiseta y con unos pantalones ... y ahora lo ibas a ver ... ¿y si tenía una toalla? Seguramente. Armándote de valor sacaste unos bóxers negros y con valentía entraste al baño encontrándote con un Liam de espaldas y sí, completamente desnudo.
—Oh shit—balbuceaste tapándote los ojos con sus bóxers—yo pensaba que estabas con una toalla o algo parecido, ya sabes, yo no ... uh ... mejor te espero fuera.
—¿Te averguenza verme así?—preguntó quitándote los bóxers de la cara—Abre los ojos ______(TN), estoy tapado ahora.
—Claro que me da verguenza, estás ... desnudo, ya sabes—reíste sonrojándote.
—No debería de darte verguenza ya que es una cosa totalmente normal. Somos novios, tenemos que conocernos en profundidad, ¿no lo crees? Además, nos vamos a ver desnudos alguna vez, ¿cierto?
—Supongo—asentiste intentando relajarte.
—Bien, me alegra que podamos hablar de estas cosas—te besó profundamente—me encantan tus labios, te besaría día y noche sin parar. ¿Crees que aguantarían tus perfectos labios tanto?—te acercó a él dejando sus manos en tu cintura—______(TN) ...
—Bésame—susurraste enrollando tus manos a su cuello y te pegaste a él.
Liam salió contigo del baño sin despegarse de tus labios. Con suavidad te dejó caer en la gran cama y se posó encima de tí sin dejar todo el peso para no lastimarte. Sabías que dejándote llevar ibas a ir lejos, era imposible parar teniendo a todos esos sentimientos golpeando tu cuerpo. Una desesperación, necesitabas algo y sabías que sólo Liam podía calmarte.
Le acariciaste la espalda sintiendo como sus músculos se tensaban con cada movimiento que hacía, adorabas sentir esos duros músculos en la yema de tus dedos.
A la hora de desvestir Liam era bastante rápido, ni siquiera te habías dado cuenta cuando te había quitado la camiseta que llevabas.
—Eres tan perfecta para mí ...—te besó el cuello agitado—tan perfecta.
Que eso te lo dijera Liam te calentaba el corazón por completo. Sabías que nadie era perfecto y menos tú. Y sabías que Danielle había sido casi perfecta y en tu opinión casi ni te ponías comparar con ella ... pero ahí estaba él diciéndote que eras perfecta. ¿Cómo no quererlo? ¿Cómo no amarlo?
Lo besaste mientras que tus manos viajaban a su toalla para quitársela y dejarlo completamente desnudo.
—¿Babe me ayudas?—gruñó peleando con tus jeans—No sé cómo demonios se baja esto.
Reíste y te quitaste los molestosos jeans quedando en ropa interior, él sonrió y volvió a besarte pero esta vez más lentamente, saboreando cada rincón de tu boca.
Estabas cansada de besarlo así que con un movimiento te frotaste contra él intentando hacerlo entender ciertas cosas. Él rió en tus labios y acarició tu sujetador negro por encima haciéndote jadear.
—Liam ...—lo llamaste sonrojándote—tengo que decirte algo importante.
—Después babe, ¿no puede ser?—besó tu barbilla.
—Es que ... es mejor que lo sepas desde ahora—gruñiste al sentir sus manos jugar con tus pechos ahora ya desnudos—¿me escuchas?
—Sí mi vida, sí—asintió mirándote.
—Yo nunca he tenido relaciones—lo besaste sin dejar que dijera nada—quería ... llegar hasta el matrimonio.
—¿Qué?—intentó quitarse de encima tuya—No ... lo siento _____(TN). ¿Por qué no me lo dijiste? Lo siento, lo siento. Soy tan ... idiota.
—No, no, cariño, no—enrollaste tus piernas a su cadera—no quiero que dejes esto así. Yo estoy bien, ¿sabes? Quiero hacerlo, contigo, aquí y ahora.
—Pero tú ...—se mordió el labio preocupado.
—No importa, quiero hacerlo—lo volviste a besar.
Liam asintió con un brillo nuevo en los ojos. Te besó toda la cara y te dejó más de una marca en el cuello, prácticamente te estaba volviendo casi loca. Te mordías los labios fuertemente para no gritar ya que te avergonzaban los gemidos que salían de tu boca, casi ni parecías tu.
—Allá voy ... tranquila y relájate, ¿vale?—te besó la frente.
Sabías todo lo que se podía saber de la primera vez, el sexo y demás cosas. Sabías que era una cosa totalmente normal el dolor en la primera vez así que no pensabas lloriquear. Besaste a Liam e intentaste relajarte lo más posible para que su entrada fuera más fácil.
—Estás ... muy ... apretada—habló jadeando Liam—te quiero ______(TN), gracias por todo.
A los pocos minutos después estabas gruñendo, moviéndote y arañando la fuerte espalda de Liam. Era imposible no reaccionar de ese modo sintiendo todas esas cosas por primera vez. No sabías muy bien qué estabas haciendo pero se sentía bien y no pensabas ... parar hasta que ese algo explotara.
Cuando el orgasmo golpeó tu cuerpo gritaste, arañaste, te convulsionaste y podías decir que hasta se te cayeron las lágrimas. Liam simplemente se había quedado sorprendido por toda la pasión que tenías guardada, todavía se le hacía raro el hecho de que él te hubiera quitado la virginidad.
—Me ... has matado—se dejó caer a un lado Liam totalemente agotado.
—Lo siento—balbuceaste respirando con agitación.
—Es una cosa buena—rió besándote—eres muy apasionada, me gusta.
—Sí ...—bostezaste—tengo mucho sueño.
—Descansa cariño, es normal—sonrió abrazándote.
—Buenas noches Liam—bostezaste una última vez.
Te quedaste dormida muy poco tiempo después dejando a Liam despierto. Estaba sorprendido y agotado, le habías salido muy pasional. Y demonios, ¡cómo le picaba la espalda! Pero todo había valido la pena.
"Niall ... mañana tengo que comprarle algo a _____(TN), ¿me acompañarás?"—le mandó un mensaje al irlandés.
"Claro que sí lady"—le contestó él.
Liam sonrió dejando su teléfono en la mesilla que estaba al lado de la cama. Bostezó dos veces, se puso los bóxers y se colocó bien en la cama. Después te abrazó posesivamente contra él y se dejó dormir totalmente relajado.
