CAPITULO 7

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Ese día no saliste más de la habitación. Después del beso de Liam, saliste de ahí casi corriendo, no porque no te había gustado ... sino porque había sido raro. Él estaba herido y seguía queriendo a Danielle. Por tí no tenía ningún sentimiento que pudiera confirmarte que tal vez ... tal vez alguna vez tendrías la oportunidad de tener algo con él.

Para comer pediste todo a la habitación y cuando los chicos te llamaron les dijiste que tenías un dolor de cabeza y que no ibas a cenar con ellos. Sería raro. 

"Nialler ... sube a mi habitación después, necesito hablar contigo"—le escribiste un mensaje que esperabas que lo leyera.

Niall llegó como media hora después con los brazos llenos de comida basura, ese chico nunca paraba de comer y estaba como un palo, ¿acaso la comida que comía no le engordaba? En fin. 

—¿Qué te pasó en todo el día?—preguntó tumbándose en la cama—Liam también estaba algo más raro aunque no me extraña con todo lo de Danielle y esas cosas.

—Uh sí ...—asentiste nerviosa.

—¿Quieres?—te pasó una chocolatina—¡Qué buenas están Dios!

—Sí ...—comiste la chocolatina a pequeños mordiscos—Niall yo quiero hablar contigo de algo.

—Escucho—te miró él mientras que masticaba.

—Hace unos meses hablé algo con las fans y les propuse una cosa—hablaste buscando tu laptop para encenderla—y bueno, ahora creo que es momento de hacer lo que les prometí.

—¿Qué les prometiste?

—Me besé con Liam ...—soltaste sin más para después ponerte a andar de un lado a otro ante la atontada mirada de Niall.

—No entiendo. ¿Les prometiste que te ibas a besar con Liam ...?

—¡No, no! Nos besamos cuando fui a llevarle la camiseta que me había prestado—miraste a Niall angustiada—no sé cómo demonios pero nos besamos. Y no sé, ahora se me hace demasiado raro verlo. Y lo que más molesta es que él ... me gusta. Me ha gustado desde siempre pero nunca hice nada porque Danielle era mi amiga.

—Ok, necesito más comida—abrió una bolsa de Doritos—bien. Entonces, te ha estado gustado Liam desde siempre pero nunca has hecho nada porque Danielle era una de tus amigas. Y ahora que ella ha terminado con el maravilloso de Liam te gusta más, ¿cierto? Bueno, y la cosa más importante, se besaron. Y ... ¿quieres algo con él? 

—No lo sé—gruñiste—no sé. No sé cómo se lo habrá tomado él. Te ha sonado el teléfono.

—Es Liam—miró el mensaje—quiere hablar conmigo, ¿crees que sea de lo mismo?

—No lo sé, ves a hablar con él ...—le cogiste de la mano para levantarlo de la cama—y después me dices qué ha pasado. ¿Vale? ¡No me falles Nialler!

Niall con su bolsa de Doritos fue a la habitación de Liam donde éste le recibió igual de angustiado que tú. Se sentó en la cama y escuchó a Liam también que contaba casi lo mismo que tú pero sumando su propia opinión.

—¿Entonces qué me dices?—preguntó Liam que se estaba comiendo las uñas.

—Que no te comas las uñas, si quieres comer toma un Dorito—habló—ah y bueno, creo que deberías pedirle una cita. 

—¿Hablas enserio?—preguntó Liam que estaba comiendo junto a él.

—Sí. Se besaron, ya han pasado a otra base por llamarlo de alguna forma—masticó—ya no vale coqueteos y bla bla. Ahora es ir directo a por la cita que seguramente ella acepte. Siempre pensé que a ella le gustabas.

—¿A ______(TN)?—preguntó Liam incrédulo.

—Sí, a ella—asintió—¿la pedirás salir o no?

—No sé ... ¿dónde salir? Estamos en Estados Unidos y no sé, seguramente hayan millones y millones de cosas que debemos hacer y paparazzis ... y fans.

—Creo que deberías de empezar con decirle a las fans tu ruptura con Danielle, todavía no lo saben.

—No sé cómo abordar el tema ...—suspiró.

—Encontraremos momento para eso también—lo tranquilizó Niall—pero ya sabes, tienes que pedirle una cita a _____(TN). Pueden ir a ver una película, ¿qué crees? Y después a comer tranquilamente, nadie sospechará teniendo en cuenta que están acostumbrados en vernos con ella.

—Nialler ... cuando quieres puedes ser muy astuto mi querido irlandés—le besó Liamsonoramente la frente.

—Ugh no, momentos gays más tarde—se separó de él—ahora estoy comiendo.

—Sí, sí, sigue comiendo ...—blanqueó los ojos Liam—¿jugamos una play?

—¿No ibas a invitar a _____(TN)?—se quejó Niall.

—Es cierto, es cierto. Voy a hablar con ella ... no te vayas, quiero encontrarte aquí—avisóLiam mirando como comía el irlandés.

—Tranquilo amorcito, no me iré de aquí—le mandó un beso Niall y se rió a carcajada limpia.

—Estúpido ...—rió Liam saliendo por la puerta.

Estaba nervioso, como si fuera un adolescente de quince años invitando a su chica. Era estúpido, había pasado por esas cosas, vamos, tenía que llenarse de valor. Tocó la puerta y esperó a que abrieras ... lo hiciste casi con demasiada rapidez cosa que le asustó ya que lo habías pillado distraído.

—Hola Liam—saludaste nerviosa—pasa, pasa.

—Uh, hola ... yo venía a preguntarte algo nada más.

—Claro, dime te escucho—lo miraste.

—¿Te gustaría ... uh ... tú y yo mañana ... ya sabes ... ir al cine y después comer algo fuera o algo parecido?—balbuceó nervioso.

—¿Una cita?—preguntaste con tu corazón bombeando a mil.

—Sí, eso, una cita—asintió.

—Claro que me gustaría—asentiste.

—Bien, entonces ... mañana hablamos lo de la hora y eso—habló abriendo la puerta para salir.

—Claro, mañana nos vemos—reíste—siempre nos vemos.

—Sí, así es—asintió sonriendo—que duermas bien.

—Tú también, sueña con angelitos.

—Ya tengo en mente a uno—te guiñó el ojo.

—Y yo ...

—Nos vemos mañana—besó tu frente y se dirigió a su habitación.

Cuando cerraste la puerta te dejaste caer al suelo y empezaste a hacer caras como idiota, ¡LIAM Y TÚ IBAN A TENER UNA CITA, UNA MALDITA CITA! ¿Cuánto lo habías esperado? Ah sí, dos jodidos años. ¡Dos años y por fin iba a pasar! ¿No era eso maravilloso? Te levantaste del suelo y pusiste música para empezar a bailar y saltar, eso merecía una celebración buena así que llamaste a servicio de habitaciones y pediste un buen trozo de tarta con una coca-cola, sí ese era tu modo de celebrar.

—¿Qué pasó?—preguntó Niall cuando llegó Liam.

—Aceptó ... y se veía ... contenta—sonrió alegre—¿crees que yo le guste?

—Lo sé con seguridad—se metió en la boca un oreo.

—¿Has parado de comer desde que hemos empezado a cenar?—preguntó Liam mirando a Niall como si fuera algún bicho raro o algo parecido.

—No realmente—negó Niall masticando.

—Ok, eres raro.

HEART VACANCY | LIAM PAYNE & YOU |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora