CAPITULO 20

247 8 0
                                    

La noche llegó rápido. Llevabas una hora en el backstage arreglando la ropa de los chicos, ellos todavía no estaban ahí. Llegaron como una hora después. Como siempre, los preparaban, maquillaban y calentaban la voz para después salir al escenario. La noche parecía muy perfecta. Liam antes de salir del escenario estuvo casi todo el rato pegado a ti, besándote, abrazándote y demostrando a todo el mundo que te quería. No te incomodaba pero sí que te daba un poco de verguenza. 

Como como muy bien se dice, no todo es de color rosa. Cuando todo está yendo perfectamente, prepárate que algo pasará. Y joder, vaya que eso tenía razón.

Cuando llegó el último cambio de los chicos, habían entrado algo tarde y tenían menos tiempo aún para cambiarse. Todos estaban vistiéndose con rapidez y por eso a Harry se le había olvidado cerrarse la bragueta. Intentabas decirle que se la cerrara pero no te escuchaba ya que estaba bebiendo agua e intentando respirar para recuperarse de la carrera que había hecho. No podías dejar que saliera ante miles de personas con la bragueta abierta así que sin quedarte de otra te acercaste a él y se la cerraste con las mejillas rojas de la verguenza. Sí, te daba verguenza pero tampoco podías dejar que se burlaran de él. Estaba claro que casi todos que te vieron te miraron como si fueras una extraterrestre o algo semejante. Harry y tú sabían que no lo habías hecho con malas intenciones así que él te mandó un besó y te gritó un 'gracias'. 

Cuando los chicos salieron del escenario todos estaban sudados y exhaustos, había sido un concierto difícil ya que estaban algo cansados y habían tenido varios contratiempos. 

Todos se tiraron al sofá y se dedicaron a beber litros de agua por el cansancio. Sonreíste y los felicitaste por el concierto.

—Como siempre han hecho un gran trabajo—sonreíste—¿cansados?

—Bastante. Lo bueno es que descansaremos por unas pocas noches—habló Zayn.

—Gracias por lo de antes _____(TN)—suspiró Harry levantando su pulgar—te debo una.

—No pasa nada—sonreíste—no pensaba dejarte ir así, ya sabes, ante todo soy la estilista y tengo que cuidarlos.

—¿Y cuidar significa poner la mano en su bragueta y tocarle el pene?—bufó Liammirándote atentamente.

—No le he tocado el pene como dices tú—gruñiste—le cerré la bragueta, ni tuve tiempo de darme cuenta de lo que estaba haciendo o tocando. No seas estúpido.

—Ahora da la casualidad que soy estúpido—gruñó Liam ante la sorprendida mirada de todos—yo estúpido ... después de que ella ha tocado el puto pene de mi amigo. ¡El pene Dios! Ni siquiera me lo has tocado a mi.

Abriste la poca quedándote completamente atontada, ¿de verdad Liam había dicho eso? Todos miraron a Liam de la misma manera que tú. Él no solía ser así. ¿Estaba celoso y eso le hacía actuar de esa forma? Nadie sabía en realidad pero les había dejado sorprendidos a todos.

—Eres un idiota—saliste de ahí dando un portazo.

Liam quiso levantarse para ir detrás tuya pero el empujón de Zayn lo volvió a sentar bruscamente. Si se trataba de peleas de novios y cosas así, el que más se enfadaba era Zayn. Y con enfadar no me refería con gritar o comentar algo, simplemente te echaba esas miradas asesinas y te avergonzaba por completo con su silencio. Sí, así de misterioso era Zayn, nadie sabía en qué pensaba o qué demonios se proponía.

—Siéntate—le gruñó Zayn cuando Liam se intentó levantar de nuevo—la has cagado amigo, pero bien eh.

Se levantó y salió por la puerta que saliste tú, debía buscarte y hablar contigo, cuando uno estaba enfadado lo mejor era estar con alguien. No era necesario hablar con ese alguien, sólo que se sentía bien saber que alguien estaba a tu lado en silencio apoyándote.

—¿Estás bien?—preguntó cuando te vio sentada en un rincón cerca de donde estaba el escenario.

—Sí, no pasa nada—diste un suspiro—supongo que él tenía razón para enfadarse. No debí ya sabes, tocarle la bragueta a Harry. Aunque fue para ayudarlo, no era con doble intención o lo que demonios piensa él.

—Lo sé, todos lo sabemos—sonrió sentándose a tu lado—está celoso. Ha metido la pata y ahora está haciendo todo lo posible para que lo olvides. ¿No te has dado cuenta que no se despega de ti y que está siempre empalagoso? Se siente culpable y cada mínima cosa le parecerá que está poniendo en peligro la relación que tienen.

—No sé ...—suspiraste—ya no sé qué decir la verdad.

—No digas nada, déjalo que se tranquilice, se dará cuenta de todo—te guiñó un ojo—ahora vamos que tenemos que irnos al bus. ¡Descanso babe, por fin descanso! Hay que disfrutarlo.

Te levantaste y fuiste con Zayn con una pequeña sonrisa, ese chico no solía hablar mucho pero cuando lo hacía sabía qué decir y todo tenía mucho sentido. Para tí, Zayn Malik era un chico jodidamente inteligente.

Al entrar de nuevo viste que todos estaban cambiados ya, estaban esperando por Zayn y por ti.

—¿No te cambias?—le preguntaste a Zayn—Te dejé la ropa en el baño, ves.

—Gracias—te besó la mejilla ante el gruñido de Liam. La verdad era que amabas verlo celoso.

Después de cambiarse todos entraron a la camioneta y no, no te pusiste al lado de Liam, te pusiste justo lo más alejada de él, que era al lado de Louis. Ir hasta donde estaba el bus tomaba algo de tiempo así que cerraste los ojos olvidando todo y te acostaste en el hombro de Louis.

—No hice nada para que se enfadara ...—susurró Liam mirándote.

—Sí hiciste—habló Harry—yo si hubiera sido ella te habría abofeteado, pero bien, para arrancarte unos tres dientes. Ella simplemente me ayudó, es nuestra estilista, ¿cuántas veces nos ayudó a vestirnos? Nos cerró los botones de las camisas, nos dio masajes, nos vio en bóxers, y vamos, ¡hasta a ti te cerró más de una vez la bragueta! ¿Por qué de repente esos celos sin sentido? 

—Yo ... yo ...

—Sí, tú ... no tienes ningún argumento válido—habló Zayn—más te vale arreglarlo y no estropearlo todo de nuevo.

—Malas personas ...—susurró Liam encogiéndose de hombros como un un niño de tres años enfadado.

—Enfádate si quieres, no conseguirás nada—rió Niall divertido.

—Son unas malas personas y no me importan—gruñó él.

—Sí vamos ... seguro que no—rió Louis—estás así porque sabes que tienen razón y no sabes cómo reconocerlo.

—Malas personas he dicho.

Al llegar al bus todos estaban riendo y ya habían olvidado el incidente de antes. Te despertaste algo desorientada y al entrar al bus estabas dormitando así que te tumbaste en la primera cama que pillaste y te tumbaste.

—Se quedó dormida ... ni siquiera quiere hablar conmigo—gruñó Liam.

—Vete a la mierda Payne—abriste los ojos—¡a la mierda!

—Oh, oh—rieron todos.

—No se rían—les advirtió Liam—¿te parece bonito decirme eso?

—¿Y a ti te parece bonito decirme lo que me dijiste antes?—te levantaste de la cama enfadada—¿Es bonito eso Liam? ¡Vamos dime!

HEART VACANCY | LIAM PAYNE & YOU |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora