Perkal en la Big Hit entertainment

V: Golden maknae.

POV Lore:

Jungkook y yo andábamos por el pasillo en un silencio incomodo, me ponía nerviosa, demasiado nerviosa, y me negaba a admitirlo, así que hice lo que mejor sabía para protegerme.

— Bueno que Kookie ¿ya os han dado las notas de la guarde? Seguro que llevas a casa todo "supera las expectativas — le dije burlona.

— Yo siempre supero las expectativas — me guiñó un ojo, el cabrón, y giró hacia donde había ido Wonho, justo la dirección opuesta de donde había ido Sara, hice una mueca de burla y la seguí.

— ¡Ah, Noona! — me llamó.

— ¿Eh? — me di la vuelta para ver qué tripa se le había roto.

— Si necesitas pañales me lo dices y te traigo de la guarde, he oído que a las personas mayores a veces se les escapa — le enseñe mi dedo corazón en todo su esplendor y me di la vuelta toda digna en busca de Sara pero pude oír claramente su carcajada.

Seguí por el pasillo y entré en los baños donde encontré a Sara echando pestes por la boca.

— ¡Cabrón, hijo de perra, mamón! ¡Pero será cerdo el tío! — iba de un lado a otro de los baños con los puños muy cerrados pegando golpes a las puertas con el dorso del puño.

— ¡Yeeepa Sara! Tranquila, ¿estas bien?

— Pero ¿cómo voy a estar bien? Le corto los huevos, te lo juro, ¡que antes de ayer me tenia haciéndole una mamada y anoche se estaba trincando a Rox! Que por cierto, ¡cuando la pille a solas no va ir fina tampoco! — me dijo sin dejar de pegar puñetazos.

— Bueno, a lo mejor Rox no sabia que estabais tonteando — contesté en un amago de poner paz entre las dos. Esto era lo que menos necesitamos ahora mismo en el grupo, peleas de gatas.

— ¿Que no? ¡Madre mía te digo yo a ti que si! Si que lo sabía, ¿cómo crees si no que sabia los de los 20 cm flácida?

— Pfft — intenté no reírme — bueno Sarita eso es un secreto a voces — ella me miro con cara de ¿en serio?.

— Bueno, tranquilízate que tenemos que ensayar la coreo, Joon y los demás nos van a ayudar y tenemos que estar todas, vamos.

La cogí por los hombros y la zarandee juguetona. Sentí como se iba relajando un poco, volvíamos por el pasillo cuando pasamos por delante de otra de las clases. Sara de repente se paró en seco y retrocedió hasta la puerta, la seguí hasta allí y el perkal que nos encontramos era cuanto menos inesperado de nuestra dulce Maknae.

— Hobi sunbae ¿tu qué color crees que me va mas? — Maggy sostenía las dos camisetas de Hobi delante suya. Una de ellas era Azul eléctrico y la otra roja con una franja verde en el medio y las letras de gucci en el centro. Mientras el chico, semi desnudo, al que le había hecho quitarse la camiseta que llevaba, intentaba decidir cuál de las dos camisetas le iría mejor.

— Pero.. ¿y ésta? – me preguntó Sara. Yo me encogí de hombros.

— Y parecía tonta cuando la compramos en el chino, se lo está comiendo con los ojos la jodia, vamos. — le dije señalandolos.

— Si, y lo está disfrutando.

Me acerqué a ellos y agarré a Maggy por la camiseta sucia, le quité de las manos la camiseta roja y se la lancé a Hobi, dejándole la azul a Maggy.

La empuje hacia la puerta diciéndole que tenía que estar en 2 minutos en la sala principal para ensayar, la maknae se fue a cambiarse con una sonrisa picarona en los labios.

— Hobi, eres demasiado bueno — le dijo Sara.

Los tres salimos y por fin llegamos a la sala donde estaban todos los demás, el golden maknae y el golden polla, con la cara aún roja, ya habían vuelto también.

— ¿Estamos todos? – pregunto Joon- ¿Dónde está vuestra maknae?

— ¡Aquí! Sunbaenim, aquí — Maggy entró corriendo en la sala ya cambiada.

— Vale, primero haréis los trainees la choreo y Hobi, Jimin y Kookie estarán atentos a los errores e irán corrigiendo. Después lo haremos todos juntos. Cris organiza a tus chicas. Wonho los tuyos también.

— Vamos bellesas, ¡cada una a su sitio!!

— Chicos — hizo un gesto con la mano muy sobradito indicando que sus chicos levantaran el culo. Sara lo fulminó con la mirada.

Nos colocamos cada una en nuestras posiciones y la música empezó a sonar en la estancia, tan alta que podíamos notar los graves en el estómago. La dance line se paseaba entre nosotros a la vez que ejecutábamos los movimientos con la máxima precisión posible corrigiendonos aquí y allá. Alba había mejorado mucho después de sus prácticas personales con Hobi, pero cada vez que Jimin pasaba por su lado metía la pata, se confundía en algún paso o perdía el ritmo. Cualquiera podía ver que perdía las bragas por él, todo el mundo lo tenía claro menos el interesado, eran un roto para un descosido, si Alba era lerda para los amoríos, Jimin era simplemente un cero a la izquierda, no se pispaba de nada.

Después de dos horas de no parar la música cesó. Me acerqué a Cris, le di una botella de agua y me agaché a por mi toalla que estaba a su lado. Madre mía, estaba sudando como una cerda y mi cara desprendía un calor inhumano. Pasé la mirada por la habitación, evitando a cierto ''golden'', y ví como Jimin se acercaba de nuevo a Alba y le ponía las manos en la caderas para hacerla girar de una forma que no perdiese el equilibrio como le había pasado anteriormente en la práctica. Le dí un codazo a Cris para que los mirara, pero no tuve respuesta.

Cris estaba muy ocupada embelesada con un cierto melenas de sonrisa rectangular.

Chasqueé mis dedos delante de sus ojos una par de veces para sacarla del encanto.

— Eh Boss, ¿te traigo un cubo o crees que con un babero tendrás suficiente?

— ¿Eh? ¿Qué? ¿Cómo?

— Pues te iba a decir que te fijaras en Alba, pero creo que prefiero que me cuentes tu salseo. ¿Desde cuándo pierdes el culo por Taehyung?

— ¿Qué? ¿Qué dices tronca? Si a mi no me mola Taehyung.

— Ya, si claro, y yo soy la virgen de Lourdes... Bueno, si tu no me lo quieres contar... ¡Carmy ven aquí! — Carmy que estaba sentada en un grupo entre Sara y Daniel que con cara de muy pocos amigos se levantó y se acercó a nosotras.

— Que oportuna eres unnie, ¿qué pasa?

— Aquí tu sista dice que no le mola Tae, pero yo creo que me la está intentando vender, así que ¡escupe!. Tu y yo sabemos que quieres contármelo.

Por la puerta de la sala ya salían Laura, Sai y Andrea, ésta última iba poniendo verde a la Perkales.

— ¿Pero cómo coño se ha colado la zorra ésta aquí? ¿Me lo explicais? Porque no lo entiendo, te juro que como se le ocurra ponerle un dedo encima a Yongi oppa... ¡se lo corto! — dijo toda indignada.

— Andrea todas sabemos que no eres capaz de matar una mosca, que mucho lerele pero poco larala... ¡Dios, que puto calor hace aquí! – Sai se quitó la camiseta quedándose solo en el sujetador y los shorts — necesito un piti, si alguien me busca dadme un toque al móvil. Voy donde siempre.

Sai saltó por la ventana de la cuarta planta y subió por las escaleras de emergencia hacia la azotea.

— Pero... ¿y ésta? ¿En pelotas por la compañía? ¿De qué va? — preguntó Laura.

Andrea iba a contestar cuando Namjoon chocó con ella, se disculpó corriendo y saltó por la ventana detrás de Sai.