Cielo Azul (PAUSADA)

" Culpas perdidas "

Narra Azul

El sonido de mi celular hizo que despertara de mis sueños haciéndome sobresaltar en el sillón de mi sala.¿ A que hora me habré quedado dormida aquí?. El sonido era persiste y yo aun estaba adormilada, busque a tientas por todos lados y di mi ultimo bostezo antes de contestar.

— ¿hola? 

— linda perdón si te desperté — al otro lado sonaba una voz muy familiar para mí. — Caleb esta allí contigo? no ha venido y ya es demasiado tarde, estoy un poco preocupada no contesta el telefono.— Amy sonaba muy angustiada.

— ¿Que hora es? — pregunté sabiendo que no podía distinguir la oscuridad del día.

— son las 3:30 de la madrugada. No esta contigo ¿cierto?

El recuerdo de los sucesos anteriores se filtraron en mi mente y un mal presentimiento se hizo presente. De pronto tuve miedo de que hiciera algo malo.

— ¡Lo buscaré tranquila Amy!

— Azul es muy peligroso no puedes salir a esta hora a la calle en tu condición es... — corté la llamada antes de que dijera algo más, me apresure a ponerme unas zapatillas ya que aun tenía puesta el vestido del día anterior.

Tomé mis llaves y salí corriendo.

Afuera en las calles había un silencio ensordecedor y una tensión que casi podía cortarse con tijeras. Camine cautelosa, contando cada paso quedaba, mi corazón comenzaba a agitarse, sabía que no había elaborado bien mi plan. ¿Cómo se supone que iba a encontrarlo ? ¿ Cómo se supone que podría si quiera caminar en las calles sin poder ver nada? me reproche a mi misma, pero un lado valiente de mí decía que había hecho lo correcto.

Seguí caminando sin saber exactamente hacia donde me dirigía con la única esperanza de sentir su perfume por las calles. Escuché un fuerte ruido de una fiesta al otro lado de la calle, me apresure a caminar en lado contrario, era obvio que Caleb no iba a estar allí, a él no le gustaba que lo vieran. 

— ¿Dónde te metiste Caleb? — hablé al aire calmando un poco mis ansias para aceptar que me estaba perdiendo. — solo espero que estés bien... Te Necesito.

Escuché las risas de un par de chicos, sonaban ebrios. Apresuré mi paso mientras mi mente ideaba planes de huida. Escuché sus voces acercarse, mi corazón se paro por unos segundos y comencé a correr. ¡Diosito por favor no permitas que choque con un árbol o cualquier otra cosa! suplique mis plegarías al cielo. 

En un momento de nuevo había silencio, todo estaba callado, tan callado que podía doler. Me obligué a calmarme y disminuí el paso confiada que quizá no era nada, y que los chicos ya habían desaparecido.

Saqué mi celular resignada a que era un plan suicida y que dependía de alguien en estos momentos "llamar Amy" ordené al altavoz de mi celular.

— Mira lo que el viento nos trajo — habló una voz en tono de burla asustandome — Que bonito regaló — habló la otra más cerca de mi oído.

"No tengo que demostrarles que soy ciega" pensé y me arme de valor, colocando mi rostro más duro.

Las dos voces rieron fuertes — ¿Qué te parece si nos divertimos un rato? — sonaban ebrios supuse que eran los mismo chicos de atrás.

— Déjenme en paz o llamo a la policía — les advertí. Uno se acerco y movió mi cabello a un lado mientras el otro acariciaba mi mejilla. Me sentí invadida, temía lo peor. Realmente estaba asustada. Tomé sus manos aventandolas lejos pero uno me tomó por el codo fuerte — Me lastimas — chille pero ellos solo reían.