Fin Del Juego (Keo)

Parte 11

Perfect 3/3

Leo

Acostado en mi cama veía el techo sin poder conciliar el sueño, suspire y me acomode de costado. Hoy fue un día muy raro. Para comenzar estaba mi madre que llego con la noticia que se iba a casar dentro de dos días y nada más y nada menos que con un niño de mi edad, podría ser su hijo. Y muy aparte de que debía asistir a su ridícula boda, me dijo que se vendrían a vivir a MI CASA, ¡CONMIGO! de todo el infinito espacio que hay sobre esta tierra, vivir en mi propia casa. Papá por supuesto que le valió madre mis berrinches.

Me sentí disgustado, y la única persona que me hacía olvidar mi asquerosa vida era Ken, que ese es el otro dilema, por alguna razón,  no me lo puedo sacar de la mente, creo que ya enloqueci. Pero por alguna razón que desconozco todos quieren verme lejos de él.

El reloj marca las 5:42 de la mañana, afuera se escuchan muchas voces y movimiento como si algún loco estuviera mudándose, me levanto de mala gana para regañar a los imbéciles que no me dejan dormir, pero al ver por mi ventana me doy cuenta que el ruido lo está ocasionando mi propia progenitora

Bajo las escaleras usando un traje deportivo, es lo único que alcanzo ponerme y veo a mi madre en el living dando órdenes a un montón de empleados que metían cajas.

-¡Cariño! ¿Te desperté? – Se acerca a darme un beso – lo siento mi vida, pero si no organizo mi boda con mis propias manos siento que nada saldrá como quiero

-¿¡Qué!? – digo incrédulo. ¿Qué la boda no se daría en otro lugar? - ¿planeas que la ceremonia sea en mi casa?

-"Nuestra" mi amor, ahora viviremos como una verdadera familia – intenta acariciarme lo que evito

-¿Ahora? - digo riendo amargamente - ¿Solo porque te compraste ese mocoso de marido? ¡No me hagas reír! 

-Mira TaekWoon, mañana será un día importante para tu madre, no me la eches a perder.

-No te preocupes mami – sonrio sarcásticamente - no pienso asistir

-No te atrevas a faltar TaekWoon – me mira seria - Cómprate un lindo esmoquin y trae a TU NOVIA que ya la quiero conocer para darle mi aprobación - ¡que mierda!

-no recuerdo haberte pedido tu aprobación

-No me hables de ese modo TaekWoon, y respétame que soy tu madre – habla entre dientes mientras sonríe aparentando que todo está bien

-¿Respeto? ¿Acaso conoces la definición de ese termino? – Los empleados se dan cuenta y empiezan a murmurar – no tienes derecho de reclamarme respeto – vuelvo a levantar la voz, estoy muy molesto y no puedo controlar mi ira hasta que me da una cachetada

-PUES ENTONCES VETE COMO TU PADRE, AL FINAL ERES IGUAL A ÉL – me grita y se da la vuelta indignada

-NO ESPERABA QUE ME LO PIDIERAS, ME VOY DE TODAS MANERAS – digo y salgo por la puerta principal empujando a dos hombres que esculcaban por detrás.

-¡DETENTE AHORA MISMO TAEKWOON! SI TE VAS, NO HABRÁ VUELTA ATRÁS – escucho sus gritos, pero ya he tomado una decisión. Estando ya en la calle un par de ojos que de seguro han escuchado todo el escándalo me miran con confusión y lastima quizá. Ken y su madre junto a dos enfermeras que acababan de llegar.

Nunca me ha gustado que me miren de esa forma. Hago una reverencia para la mayor y camino con rumbo desconocido, poco a poco aumento la velocidad de mis pasos comenzando una carrera sin destino determinado.