¿Solo en casa?
Llegas a tu casa, cansado, luego de un largo día de trabajo, listo para una relajante noche solo. Alcanzas con tu mano el interruptor de luz, pero ya hay otra mano ahí.
Solitario
No puedo moverme, respirar, hablar ni escuchar, además está oscuro y frío. Si supiera que iba a ser tan solitario, hubiera pedido que me cremaran