Luis Carlos ©

Capitulo 16: Busqueda mortal

Todos los miembros del clan se reúnen en la sala de estar para comenzar la votación, los votos quedaron de la siguiente manera:
Víctor votó por José Luis
Juan Pablo votó por José Luis
José Luis votó por Juan Pablo
Manuel votó por José Luis
Felipe votó por José Luis
Fernando votó por José Luis
Ricardo votó por Manuel
Ulises votó por José Luis
Jonah votó por José Luis
César votó por José Luis
Luis Carlos votó por Ulises

José Luis............8 votos
Ulises.................1 voto
Manuel..............1 voto
Juan Pablo........1 voto
Total..................11 votos

Por mayoría de votos, José Luis fue elegido para ser mi acompañante en la búsqueda de Luciana; José Luis sacó un mapa del mundo, y comenzamos a ver probabilidades y a estudiar todas las pruebas:
1.- Helicóptero, el helicóptero desde el que Luciana le había disparado a mi primo tenía una calcomanía de una calavera.
2.- La antigua base de operaciones de Luciana fue Grecia​, por lo que deducimos que el lugar donde estaría sería un país de Europa.
3.- Luciana ni se expondría a trabajar a plena vista, por lo que trabajaría bajo tierra, al igual que en Grecia que trabajaba bajo el Partenón.

Había algo que se nos estaba pasando, algo que no veíamos, comenzamos a estudiar todo lo que me unía a Luciana, los euros que me dio en Grecia, La nota que me dejo, el libro con el escrito y la flecha de Isaac.
José Luis dijo a modo de juego, que usara luz negra, solo para darnos un respiro, al aplicarle la luz negra, en una esquina de la nota, había un sello de la Torre Eiffel, ¡PARÍS! La siguiente base de operaciones de Luciana era París, nuestro próximo viaje era a Francia, pero la pregunta del millón de dólares era ¿Cómo llegaremos hasta allá? Yo estaba "quemado" en todo el país, no podía ir al aeropuerto o me metería en graves problemas, Ulises me dió la idea de ir al muelle y colarnos en un barco con dirección a Europa, y de ahí podíamos tomar cualquier transporte a París.
Al llegar la noche, José Luis y yo nos dirigimos al muelle, con un equipaje ligero y los ahorros de mis tíos, vimos a unos hombres que irían a llevar unos contenedores a Europa, ese era nuestro boleto de ida, nos colamos entre los cachivaches y nos sentamos arriba de unos contenedores, esperamos unas dos horas y por fin el barco emprendió el viaje a Europa.
A lo largo del viaje había un hermoso paisaje de... ¡Agua! Era deprimente ver solo agua, agua y más agua, por un momento llegue a extrañar la civilización, el pasto, los árboles, pero solo era agua, y no con peces, era simplemente agua, José Luis era mayor que yo, el tenía 18, tenía el cabello negro oscuro, sus ojos eran de un color avellana, era alto, de más o menos 1.72 metros, vestía un suéter azul ajustado, unos vaqueros también ajustados y unos tenis grises; yo traía un suéter negro que el me había prestado, me quedaba muy grande, también unos vaqueros holgados y unos tenis negros.
No había mucho en que pensar estando en medio de la nada, me puse a repasar el plan para detener a Luciana unas diez veces, y después comencé a escuchar música en el móvil que me había prestado Víctor, era un celular azul con batería de larga duración, eso sería de gran utilidad.