Capitulo 7

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Cargaba el bebé mientras Kaguya sacaba el biberón de la pañalera y me lo daba para alimentarlo.
-No puedo creer que tenga que hacer esto - mascullé mientras el bebé tomaba su biberón rápidamente.
-Esto no habría pasado si no hubieras estado de hablador con papá, sempai - me respondió Kaguya mientras se sentaba a nuestro lado.
- Nunca me ha gustado la idea de tener hijos y esto...
- Es solo un momento sempai

Teru llegó con nosotros dando brinquitos.

-Masashi~san es hora de grabar la escena con Kamijo, cuando terminemos grabaremos las partes con tu bebé
-¡No es mi bebé!
-Tu lo trajiste, es tuyo
-Es mi sobrino, yo fui quien le sugirió la idea para el programa a Kamijo y me pidió que consiguiera el bebé- dije bastante molesto, tener un par de semanas a mi sobrino porque le di una idea a Kamijo ya no me agradaba en lo absoluto - y mi hermana me lo ha dejado mientras ella y su esposo iban de viaje
-¿No seria lindo tener un bebé? - dijo Kaguya con ojos soñadores, parecía que soñaba en voz alta sin prestarnos mucha atención
-A mi me gustaría, pero no se si pudiera hacerme cargo de algo tan importante - respondió Teru
-Tengo a mis sobrinos y con eso me basta
-Siempre me ha agradado la idea de tener una gran familia - contesto Kaguya
-¿Qué dice Kamijo~san a eso?- preguntó Teru mientras tomaba a mi sobrino en brazos y le hacia mimos
-Dice que ningún hombre sería lo suficientemente perfecto para mi hermana o para mi. Pero creo que en el fondo le agrada la idea

Yo estaba seguro que Kamijo nos mataría a ambos de saber nuestro dilema.

Kaguya cuidó amorosamente al bebé mientras grabábamos las escenas, aun no entendía que hacia ahí en el estudio puesto que Kamijo jamás la llevaba. Quizá sabia que ella seria buena cuidándolo ya que todos estaríamos ocupados grabando, ensayando, editando... O quizá solamente cumplió el capricho de su amada princesa.
Al estar todos ahí no podía hablar en privado con Kaguya ni un momento, y cuando podíamos estar solos, me sentaba en una silla y me quedaba dormido. No descansaba nada en las noches porque el bebé lloraba y por consiguiente dormia poco. Y el cansancio de las grabaciones no ayudaba en nada.

Un sábado en la tarde estaba jugando con mi sobrino mientras alguien toco el timbre. No esperaba visitas así que extrañado fui a abrir la puerta, al abrirla me encontré con Kaguya , mi hermosa Kaguya.
Vestia un lindo Jsk amarillo con hotcakes y ositos de miel estampados, tea parties rojos y un par de coletas adornadas con pequeños monitos de colores pastel. Esta vez tenia el cabello naranja claro, rizado y esponjado, como el cabello de un unicornio.

La abracé emocionado y ella entro al apartamento, llenándolo con el suave y dulce aroma de su perfume.

-Sempai, necesitamos hablar- decía mientras se sentaba junto a mi sobrino- es muy importante
- Si, casi no hemos podido hablar con todos en el estudio y todo el cansancio- me senté frente a ellos en la alfombra de plaza sésamo que mi hermana me dio cuando llevo a mi sobrino- ¿ y Kamijo?
- Le dije que iría a una reunión... Bueno, si fui, pero me salí mucho antes para poder venir aquí
- Kaguya
- Sempai, yo no... - bajo la mirada- no... Sobre lo del mensaje, yo
- Dime, pequeña- rogaba porque dijera que era una falsa alarma o algo así.
- Yo... Si tengo un pequeño retraso- seguía mirando la alfombra de Elmo y Big Bird - pero no... Yo no...
- Estas de broma, ¿verdad? - alcé la voz- ¿cómo es posible que vengas a decirme que tienes un retraso cuando he sido cuidadoso? ¿ crees que no se que pasaría si tu te embarazas? ¡Todo Japón me condenaría en los medios por hacerlo con una menor de edad, y más aún siendo quien eres!

Me levante y comencé a dar vueltas por la estancia.
El pánico se apoderaba de mi y yo no podía escapar de mis acciones.
Sabia que no había sido del todo cuidadoso. Era también culpa mía.

Kaguya seguía sentada en la alfombra con la mirada clavada en el suelo, el cabello le cubría la cara.

- Y que se supone que debo hacer, eh?! Casarme contigo no es posible, eres menor de edad, ¿ escuchaste lo que le paso a Gackt cuando lo acusaron, verdad? Y no me refiero a lo que dijeron los medios, lo que realmente le paso, tu padre debió decirte, siendo tan amigos seguro sabia mejor que nadie ¿¡me estás escuchando, Kaguya?!

Me planteé frente a ella y la levante, empecé a sacudirla mientras trataba de hacerla hablar, cuestionando si se había hecho alguna prueba o había pensado que haría.

La sacudí como una muñeca. Y ella estaba sin decirme nada, ni siquiera me miraba, estaba ausente.
Comencé a gritarle para hacerla hablar, deje que el pánico se apoderase por completo de mi y grite y grite.

Debido a mis gritos el bebé comenzó a llorar asustado.

Había gritos y lloriqueos y Kaguya no me miraba, no me hablaba. Y yo me estaba volviendo loco ante su indiferencia.

Sonó el timbre y me di cuenta de lo que hacía. Solté a Kaguya y tomé el bebé en brazos, mientras iba a la puerta ante el insistente llamado del timbre y trataba de calmar al bebé. Al abrir esperaba encontrar algún vecino molesto, pero no fue así.

-Kamijo- dije en un susurro mientras un escalofrío me recorría todo el cuerpo.
-Masashi, ¿cómo están? - dijo con cigarrillo en mano, sonriéndome amablemente
- Yo... Eh... Bueno, estábamos... Estaba, ahm, el niño...
-Oh, no me digas que te causa problemas, pero si es tan tierno- dijo con una cálida sonrisa que ilumino sus ojos mientras me quitaba al bebé y lo tomaba en brazos, quien seguía teniendo lágrimas en su carita.

Kamijo me dio su cigarrillo y acurrucó al bebé en su pecho, entro al apartamento y arrulló al pequeño, calmándolo mientras tarareaba una canción de cuna. El bebé sonreía y estiraba sus manitas para tocarle el rostro a Kamijo, quien sonreía completamente con una cálida y amorosa expresión paternal.

Llegó a donde estaba la alfombra de plaza sésamo y Kaguya no estaba ahí.
Me había olvidado de ella al quedar atontado por lo que veía, Kamijo, quien casi no se había acercado al niño en las grabaciones, ahora estaba felizmente arrullándolo.
Podía ver su instinto paternal salir a flote. Era muy cariñoso.

Todo eso me hacia preguntarme porque si era tan bueno, estaba solo con sus niñas.
Y una de ellas, estaba ahí, escondiéndose en mi apartamento.

妖 『Ayakashi』Donde viven las historias. Descúbrelo ahora