Narrado 56

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Mario.

Estaba afuera de la casa de Tn, quería arreglar las cosas con ella, era buena gente y no quería perder su amistad ahora que la tenía, me encariñe hablando con ella todo el tiempo, ahora no podía estar tranquilo cuando no lo hacia.

Le mandé un mensaje pero ella se negaba a abrirme, no me quedaba de otra mas que entrar por el patio trasero.

Subí la barda y entre por la ventana, recorrí toda la parte del piso de abajo pero no había rastro de Tn. Cuando subí a la segunda había un pasillo largo y sólo había una puerta, tal vez ese podía ser su cuarto.

Camine hasta el y lo abrí de golpe.

-Oh mierda. -Grito Tn, sobresaltada.

Me reí ante aquello. -Perdón, no quería asustarte. -Dije tratando de ponerme serio.

-¿Qué diablos haces aquí? ¿Cómo entraste?

-Vine a aclarar las cosas contigo y por el patio.

-Lárgate o llamaré a la policia. No puedes estar aquí.

-Ya, escuchame por favor. Solo quiero hablar contigo y aclarar las cosas.

-Bien te escucho, tienes 5 minutos y luego te largas.

-Pero es que no me trates así, yo vengo en son de paz, tranquilizate.

-¿Ah sí? Cuando por tu culpa estamos enojados, si no mal recuerdo tú fuiste el que me empezo a tratar mal. Y no hay necesidad, mejor nos dejamos de hablar y evitamos todo esto.

-No Tn, ese no es el punto, madura por favor.

-Aclaró que tú no eres nadie para decirme que hacer y no hacer, así que te invito a que te retires de MI casa.

-No me iré hasta quedar bien.

-Esta bien te perdonó, somos otra vez amigos raros, Ahora te puedes ir.

-Has lo que quieras.

Me salí de la habitación de Tn, tenía una actitud que no conocía y no me agradaba nada, aparte por qué se ponía así? Pensaba que me podía hablar como ella quisiera? Estaba muy equivocada. No se lo iba a permitir. No a ella.

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