Capítulo 4

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Galadriel sonrió complacida al escuchar un caballo, desde su talan observó cómo su esposo regresaba a ella

O Oooo

Celeborn dejo su caballo en manos de Haldir y corrió presuroso hacia su alcoba

-Galadriel que ocurrió- el elfo llegó sin respiración hacia la dama que solo se acercó a él, acariciando su mejilla

-acaso no puedo extrañar a mi esposo- la elfa lo beso

Celeborn abrumado la alejo de el, en su mente solo había alguien igual que en su corazón y ese ser estaba lejos de el

Galadriel suspiro pero lo volvió a besar, esperando a que la poción hiciera efecto

Celeborn se sintió extraño y de repente cayó sobre su cama totalmente inconsciente

Galadriel lo observó, solo debía ser paciente

-pronto regresarás a mi Celeborn- sonrió la elfa

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Haldir preocupado de que su señor no saliera a entrenar fue a buscarlo

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Galadriel claramente no esperaba ver a su capitán junto a su alcoba pero no dejo que su rostro reflejara nada de sus pensamientos

-lo lamento mi señora, yo quería saber- Haldir bajo la cabeza

-no hay nada que deba preocuparte- Galadriel sonrió- es admirable tu lealtad- dijo la dama señalando a su esposo

- disculpe las molestias mi señora- Haldir observó al lord dormido

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Celeborn despertó en la noche y de pronto sintió la imperosa necesidad de estar junto a Galadriel y como si sus pensamientos se cumplieran observó a su esposa sonriendo

-buenas noches mi señor- sonrió la dama besando a su pareja- me alegra que hayas regresado a mi lado

Celeborn embelsado beso a la Elfa olvidando de pronto a el bello elfo que dejó en Mirkwood

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Celeborn y Thranduil: Un Amor EternoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora