Que tierno eres Stiles.

Capítulo 20

“Eres más guapo de lo que eras antes, ¿Quieres repetirlo?”

Aquella frase había aparecido en mi casillero esta mañana.

Stiles solo estaba bromeando cuando dijo lo de la chica en la cafetería, pero si que se enojo cuando vio la nota.

Me pregunto quien era y yo no tenia ni idea, no he vuelto a ver con otros ojos a nadie más.

¿A quien más debería ver? Stiles es algo así como la perfección ante mis ojos.

Con ese estúpido sarcasmo, esos hermosos ojos mieles, ese cabello que siempre suele estar enredado, su tan blanca piel y esos hermosos lunares que me he dado el lujo de contar.

Su cuerpo que me lleva hasta las más lejanas nueves, esas enormes pestañas y esos labios tan rosados y carnosos.

¿Existe acaso algo tan hermoso? Lo creo imposible, digo, a menos que Stiles pudiera tener hijos y saliera una extraña combinación entre ambos, eso si que seria mas que perfecto.

He intentado explicarle que no tengo nada que ver con la/el chico que escribió esa nota, se que confía en mi, pero a mi también me costaría confiar cuando, al anterior día una chica se presenta con la típica cara de "Quiero tener sexo contigo"

Y al día siguiente una estúpida nota aparece en ti casillero con la frase "¿Repetimos?" Además, ayer no estuve con el en toda la noche. Laura me había pedido ayuda con algo al igual que Cora y no había podido ir a su departamento.

Por lo tanto el que el pensara que le había engañado no sonaba tan loco, no cuando no has escuchado toda la historia completa.

Stiles paso frente a al armario del conserje, por donde yo estaba, inmediatamente abrí la puerta y lo jale hacia dentro.

—¡Joder!—La habitación estaba oscura, el no podía saber que era yo, quiero creer que es por eso que me pego con un paraguas en la cabeza.

Si, había estado lloviendo.

—Esto es secuestro.—Dijo cuando confirmó que era yo.—No quiero hablar contigo Hale.

—Eso sonó tan seco.—Dije frunciendo el seño.

—Pues agrega agua.

Frunci aun más el seño.

Lo acorrale contra el armario.

—Me obligas hacer algo que en verdad si quiero hacer.—Dije repitiendo esa tan famosa frase.

Comencé hacerle cosquillas hasta que estaba convulsionando.

—¡Ya entendí ya entendí!—Dijo entre jadeos.

—No te engañe Stiles, no lo haría nunca, te amo bebé, deja de ser tan infantil.

—Hace mucho que no me decías bebé. —Contesto con un puchero.

—Bueno, ahora estoy aquí y voy a llamarte bebe las veces que quieras.—El sonrió, alegrandome por fin el día.

°°°

Entramos a mi habitación, lleno de jadeos mientras lo empujaba dentro.

Stiles paro con los besos en mi cuello, no sabia que lo había detenido, miro lo que el estaba mirando y me sorprendí, la habitación estaba echa un desastre, había prendas tiradas, prendas mías y de mujer.

Olía a un asqueroso perfume barato.

“No me dio tiempo de arreglar como me lo pediste, asegura te de no llevar a tu novio, podría enojarse ”