Único

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Pocas personas creen en la reencarnación, ya que lo que pasa despues de la muerte es un misterio para casi todos... he dicho casi todos porque como todo en la vida, hay excepciones y existe una cantidad muy reducida de gente que recuerda sus vidas pasadas, pero lamentablemente, nuestros personajes no son parte de esa minoritaria excepción...

En un pais latinoamericano de habla hispana, se encontraba un ciudadano comun y corriente llegando al hogar en donde reside él y su familia, especificamente con su esposa y sus 2 hijos. Luego de una larga jornada de trabajo, con un clima caluroso y sofocante, se sento en el simple y algo pequeño sillon que poseia, sintiéndose cansado quizo dormir, pero sus hijos llegaron de clases, 2 pequeños de ojos verde esmeraldas, como los de su padre Eren, y cabello azabache, como el de su madre Ester; habiéndosele practicamente imposible descansar gracias a sus revoltosos pequeños.

El no tenia nada de que quejarse, tenia todo lo que necesitaba, tenia una esposa a la que apreciaba, dos preciosos hijos, una casa comoda, un empleo que le permite mantenerse bien, y a su madre; pero a pesar de todo, su corazon se sentia vacio, una sensacion que se le hacia inexplicable, mas sin embargo, vivia su vida con normalidad y dentro de todo lo posible la disfrutaba.

Ahora traslademonos a las montañas que se encuentran en el continente asiático, un lugar donde se habla un Japones antiguo, una lengua casi extinta; un hombre llamado Levi de estatura mediana (por no decir baja), con cabello largo azabache, cuerpo bien formado, aura elegante y salvaje (una extraña mezcla), vestido con pieles finas y decoradas, montando un caballo negro pura sangre se encuentra, a trote lento a traves de la espesura de un gran bosque que se elevaba tan alto y frondoso que con suerte se percibía la luz del sol, el viento suave pero helado, la neblina y la humedad convertian a este paisaje en algo tetrico y lugubre, pero a la vez una maravilla de otro mundo.

Levi se dirige a la casona principal debido a que tomara el mando como cabeza de la familia ancestral, para ello tendra que casarse con su hermana pequeña (una antigua tradicion por pureza de sangre), esta decidido, es por lo que a vivido hasta ahora, para lo que a crecido, para lo que lo han educado, para lo que nacio, y deberia sentirse honrado con tal privilegio, pero su pecho se oprime y un susurro silencioso le grita que en esa direccion no esta su felicidad, pero a pesar de que su mente flaquea, el orgullo no lo dejan parar, ni aunque la duda sea grande dara un paso atrás... horas mas tarde estaba casado y ahora forma parte de un retrato ancestral, su parecido con el primer antepasdo es inigualable, una copia perfecta.  Pero a pesar de todo, su corazon se sentia vacio, una sensacion que se le hacia inexplicable, mas sin embargo, viviria su vida con normalidad y dentro de todo lo posible lo disfrutaria.

Es asi como 2 almas que compartieron un pasado y una promesa de volverse a encontrar, reencarnaron, sin saberlo y sin recordar nada, pero que se siguen extrañando, se siguen amando, se siguen necesitando sin medida, a pesar de que los separa un mundo, culturas, millas, lazos, recuerdos, memorias, familia, idiomas, un océano... ese mismo oceano que prometieron ver juntos... mas su promesa tendra que esperar hasta su proxima reencarnación, ya que en esta no esta previsto su reencuentro bajo ninguna circunstancia... el destino y el tiempo son como pequeños niños traviesos a los cuales les encantan las jugarretas, y en este caso nuestros enamorados pagaron las consecuencias, haciendo sus vidas incompletas por la falta del otro...

Los Recuerdos Que Nunca LlegaronDonde viven las historias. Descúbrelo ahora