A Proper Send-Off - Fanfic Camren

34 - De espalda

POV Lauren

Estaba sumamente molesta con Camila.

No lo podría creer, me tomo tan de sorpresa el hecho de que se pusiera entre mis piernas que ahora si creía que haríamos record güines.

Era la primera vez en toda mi vida que me iban a hacer venirme en menos de un minuto.

Cuando estaba a punto de tener mi orgasmo, se retiro. Una vez más. Esas acciones se me hacen crueles, no se si llamarlas egoístas o masoquistas.

Me enojo, pero sobre todo me hizo ver que a lo mejor, estoy cometiendo un error, como es posible que haya decidió ahora pasar mi vida con Camila. Quien me dijo que esto es una buena idea.

Aparte de sentir sumo coraje y frustración, por primera vez en mi vida, debo confesar que me sentí con miedo. Me sentí vulnerable. A pesar de conocer muy poco a Camila, pensé que había escogido bien al escogerla a ella. Me decía a mi misma que a lo mejor me había equivocado, que debí de haber esperado mas, a lo mejor salir más con ella. Me recriminaba a mi misma que era lo que conocía de Camila.

Realmente lo único que conocía es que había tenido una pareja anterior que se llama Audrey y que por la versión de Camila, a ella le habían puesto el cuerno des'pues de haber estado en la milicia.

Pero quien me aseguraba que eso era cierto. Quien me decía que esto no era solo una calentura, solo sexo, solo superficial.

Que me decía el hecho de tener un sexo increíble, que me aseguraba, definitivamente no me aseguraba el tener una relación increíble. Por lo que a mí me constaba a lo mejor era lo único bueno que tenia Camila, era sexo.

Me encontraba absorta en mis pensamientos. Ensimismada, con mis brazos abrazándome a mi misma buscando un poco de consuelo.

De repente, siento a Camila acercarse a mi espalda. No voltee a verla, me quede como estaba parada, viendo hacia la pared de la regadera hacia donde estaban las llaves del agua, absorta en mis pensamientos, sintiéndola que se había parado, se acerco a mí, sentí sus pechos tocar mi espalda.

A pesar de saber que se encontraba cerca físicamente, mi mente en ese momento aun se encontraba lejos. Más no tanto, porque estaba consiente sobre la proximidad de Camila.

Me regreso al aquí y ahora con el sonido de su voz.

"Amor mío, mi Lauren, mi princesa, mi adoración, mi encantadora diosa, se que puede ser un poco pronto decir nuestros te amo, perdóname por haberme quitado, te lo juro que no lo hice para lastimarte ni mucho menos, te quiero confesar que por mi me encantaría que te vinieras en mi boca una y otra vez, me encantaría poder decir que tengo residencia entre tus piernas, me encantaría que mientras te hago el amor poder ver tus ojos, viéndote mientras me ves a mi, viéndome mientras tengo mi boca entre tus piernas, poder ver cada una de tus expresiones de placer que ni tu conoces de ti misma, me gustaría que hagamos eso mientras estamos juntas en la cama. Ahorita se que puede sonar tonto, pero solo quiero preparar motores, quiero amarte, quiero besarte, quiero que no me falte ni un centímetro de piel sin besar, quiero demostrarte que a pesar de que no nos hemos conocido mucho te has convertido en el centro de mi universo".

Lauren escucho esas palabras y fue como si fueran la magia que necesitaban escuchar para poder regresar al aquí y al ahora. Se encontraba en ese momento con ella. Camila la tenía abrazada de la cintura. Su torso estaba pegado a su espalda y le estaba diciendo estas palabras al oído. La manera en que le hablaba era como si lo que le dijera fuera solo una confidencia. Información que era solo para ella y para nadie más. En ese momento a pesar de haber tenido sus dudas se sintió como el centro del universo. Pensó para sí misma, que esto era la razón por la cual había decidido podían estar juntas.