El viaje de Camila se dirigió lo más rápido que pudo hacia su motel donde había dejado sus cosas, todo su proceso para llegar se le había hecho ser un agónico largo tiempo.
Aún así, había que hacerlo.
Tenía que preparar la ropa que guardaría dentro de su maleta, papelerías y cuentas que tenía que organizar, que después se tendrían que pagar y otros asuntos que atender.
En su espalda cargaba su maleta grande con sus cosas y también traía con ella una pequeña maletita. Camila se mordió los labios al mirar dentro de la pequeña maleta que llevaba también con ella. Contenía uno de los otros asuntos interesantes para esta noche. Camila no iba a dejar pasar esta noche sin follarse a Lauren Junio en todos los sentidos posibles que la quería tener. Ella se tomaría su tiempo, para darle a Lauren todo lo que pudiera desear que sucediera en su primer noche con otra mujer.
El viaje en taxi terminó y Camila se encontró fuera del "Pub Jauregui" ya por fin, su mochila sobre su espalda y la bolsa más pequeña colgada del hombro. Por un segundo, Camila tuvo que detenerse para poder controlarse a sí misma de los nervios y la emoción que invadían todo su ser.
Podía sentir autocompasión del celibato que había llevado por un año completo y como este se encontraba quemando sus entrañas y paralizándola por un segundo, al encontrarse justo a la entrada de la puerta del bar.
Como si necesitara recordar, como era que se habría una puerta, respiro profundo, se tomo un segundo más y siguió adelante. Camila no carecía de la confianza sexual. Camila sabía con confianza su desempeño en todos los sentidos, tanto al momento de la reparación de una maquinaria pesada, como eran los autos y los equipos militares, como lo era coger con mujeres, sabía que en esa área no había por qué estar preocupada.
Ella abrió la puerta y cuando entro casi se le cae la mandíbula directito al piso.
Lauren estaba sentada en la parte superior de la barra, con la espalda arqueada y sus piernas largas y suaves cruzadas descansando sobre uno de los taburetes de la barra. Tenía unos tacones altos que se había cambiado por los zapatos que tenía antes de piso y había vuelto a hacer evidente su maquillaje.
En su rostro había una expresión que no podría haber sido más clara, se veía que estaba, cómo dicen, de tomar al toro por los cuernos con toda la intensidad y acabar al que sea que se le ponga enfrente.
"¿Cuánto tiempo llevas en esa posición?" Preguntó Camila, cuestionando la naturaleza de la pose demasiado perfecta.
"Más o menos unos veinte a veinticinco minutos", admitió Lauren, sin dejar de ser y mirarse tan seductora como siempre.
Camila camino rápido hacia ella, tiro las cosas al suelo y se dirigió casi corriendo. Ya para este momento el hacer apariencias sobre todas las ganas que tenia de estar con Lauren, ya no le importaba que fueran más que evidentes. Camila quería coger con Lauren mas que lo que nunca había querido en la vida y Lauren iba a saber muy pronto de todos modos.
Camila se encontró de pie en frente de Lauren mirándola.
"Eres tan jodidamente sexy", dijo Camila mientras ella descruzaba las piernas de Lauren, colocándose en medio de ella y envolviendo sus brazos alrededor de la cintura de Lauren Junio.
"Sí", dijo Lauren, sin aliento por haber sido tocada íntimamente por otra mujer por primera vez.
"Es una pena para ti que soy heterosexual".
Camila se inclinó ligeramente hacia arriba y tiró suavemente del cuello a Lauren para tenerla más cerca; hasta que sus labios hicieron contacto y comenzó con un beso suave y dulce.
Camila no quería sumergirse en el sexo demasiado rápido, no quería ir demasiado rápido. Además, los labios de Lauren los quería saborear con delicadeza y detenimiento. El beso fue lento y suave, los pálidos labios de Camila encontrándose con la boca color rubí de Lauren, flexibles, acogedores, definitivamente los mejores que hubiera besado hasta el momento de cualquier pareja que haya tenido anteriormente.
Lauren se inclinó hacia ella. Ella lo había dicho de verdad sobre su heterosexualidad. Más estaba decidida a tener este encuentro con esta bella mujer, con toda su intensión e intensidad. Al momento del primer contacto del beso con Camila, no había esperado que Camila fuera a ser tan suave y dulce con su primer toque. De cierto modo y después de todas las miradas que le había dedicado Camila, a ella. Lauren no se encontraba preparada para ese desenvolvimiento, hasta cierto punto había esperado que fuera un poco ruda, pero la gentileza de Camila era algo muy poderoso y que no se había esperado.
A pesar de su exteriorizada confianza, Lauren se sentía que se encontraba en territorio desconocido.
Había esperado que Camila, con su aire vagamente masculino y físico bien constituido de sentido rudo, actuara mas como lo haría un chico.
Ella había pensado que haría su primer beso con una mujer sería una sensación más familiar y menos temerosa, aunque había aspectos de la familiaridad, el beso de Camila era diferente a cualquier que había conocido. Era apasionado, firme, pero suave y flexible a la vez. No había forma de poder confundirlo con el beso de un hombre.
El único miedo que sentía Lauren en ese momento, era lo mucho que lo estaba disfrutando.
Camila comenzó a aumentar su intensidad. Ella no quería precipitarse en nada, pero el calor en su interior, la humedad que podía sentir, estaba volviendo el proceso de besarle despacio cada vez más difícil, el hecho de que ella le permitiera explorarla al abrir la boca y dejar que su lengua explorara la boca de Lauren era la misma definición de éxtasis y pensar que por el momento solo la estaba besando.
Las manos de Camila empezaron a recorrer las piernas lisas de Lauren, estas se encontraban descansando y sobando muy suavemente sobre la parte exterior de su muslo y por debajo de la falda de Lauren. Sus intenciones eran eliminar cualquier ropa interior que se estuviera interponiendose en el camino de Camila hacia la meta tan esperada donde quería llegar y comenzar de inmediato.
Para su sorpresa, sin embargo, Lauren rompió el beso y hasta se apartó un poco.
"¿Qué sucede, algo esta mal?" Preguntó Camila, preocupándose mucho de qué Lauren experimentaba dudas.
La mirada de dolor en el rostro de Lauren contaba otra historia. "Bueno, no sé cómo funciona para ustedes lesbianas y todo, pero yo he estado sentada en la barra de un bar durante media hora y mi culo ha conseguido sentirse en un estado de entumecimiento".
"Oh," Camila rió
"En realidad estaba pensando que podríamos, ya sabes, ir arriba y tener el sexo en mi departamento", dijo Lauren, en ese momento Camila le ofreció su mano para ayudarla a saltar y bajar de la barra.
"Dirige el camino", contesto Camila...
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A Proper Send-Off - Fanfic Camren
FanfikceAutor: Esta historia está dedicada a todas esas personas que sobre todo en la cultura de estados unidos los que dan su servicio para la milicia y se van con valor y dan su vida por su país y por todos nosotros que tenemos el privilegio de no tener q...