Perderte de Nuevo

CAPÍTULO SESENTA Y TRES

CAPÍTULO SESENTA Y TRES

–Dante bajó del auto de prisa, observó cómo el auto de Leonor caía al barranco–

Dante – llamen a las ambulancias –exigió a sus colaboradores–

–En la hacienda todos esperaban la llamada de Dante, después de que la llamada que Leonor le estaba haciendo a Olivia se había cortado, estaban muy nerviosos, Paul sabía que Leonor era una mujer peligrosa y tenía miedo que algo pudiera hacer en contra de su familia–

Gilda – señora Olivia –se acercó a está con una taza de té– tome esto le ayudará a tranquilizarse –Olivia estaba hecha un manojo de nervios, tenía miedo, pensaba que Leonor iba a dar batalla–

Olivia – Gracias Gilda pero siento que no me cae nada –Paul se acercó a ella, abrazándola–

Paul – mi amor no has comido nada –se separó del abrazo–

Olivia – Paul y si no la atrapa –Olivia lo miró con miedo–

Paul – si es necesario, irnos del país mientras a ella la atrapan nos vamos –Olivia suspiró abrazándolo nuevamente– yo no voy a permitir que nada malo les pasé

Olivia – tengo miedo –Raquel se acercó a Olivia colocando su mano en su hombro–

Raquel – no tengas miedo cariño, esa mujer tendrá su merecido –Olivia la observó tomando su mano, Paul las observó–

Paul – ¿desde cuándo sabias que se llamaba Olivia? –Preguntó intentando hacer menos tenso el ambiente–

Raquel – desde siempre –Estrella sonrió y se acercó a ellos–

Estrella – claro por eso la defendías –Raquel asintió–

Raquel – yo desde el primer día que entró a mi cuarto, sabía que algo raro había pasado

Olivia – ese día –Olivia cerró los ojos sonriendo– yo andaba buscando el cuarto de Farah

Estrella – fue difícil –observó a Olivia y Farah– vivir la vida una de la otra –Olivia frunció el ceño–

Farah – me imaginó que para Olivia sí, no le había dejado las cosas muy fáciles, Paul estaba furioso por la huida, tú –observó a Estrella– no me ibas a hacer la vida fácil, la última vez que hablamos la discusión fue muy fuerte y cómo si eso no fuera suficiente Antonio fingiendo que me amaba

Paul – ¿por qué Antonio? –Olivia observó a Paul, al escuchar el tono de reproche que había manejado–

Farah – Paul lo siento –bajó la mirada– Antonio siempre estuvo a mi lado como amigo, poco a poco con detalles se fueron dando las cosas, ni yo entiendo en que momento pasó, nunca imaginé que él y Leonor –Olivia la interrumpió–

Olivia – planearon todo –Farah la observó sorprendida– quien iba manejando el auto que te lanzó a ese barranco fue Antonio

Farah – ¿cómo? –Olivia suspiró y asintió–

Olivia – yo los escuché hablando –observó a Julián– Julián también sabía que no era Farah –Estrella lo observó– le pedí que no dijera nada, él se enteró porque escuchamos a Leonor y Antonio

Estrella – claro por eso el día que Antonio quiso abusar de ti, tú –observó a Julián– la defendiste

Farah – ¡abusar! –Olivia asintió–