La campana dio aviso del receso, todos los estudiantes guardaron sus pertenencias, para comenzar a salir de a poco del salón.
Code: ¿Qué harás ahora Dam-Dam?
Damián: ¿Alguna novedad?
Miky: Michael y Bill tienen entrenamiento hasta el almuerzo.
Damián: lo se- suspiro- ah, chicas. Diego- señaló al mencionado.
Kila: lo conocemos, Paula lo presentó al inicio.
Damián: lo siento- se sonrojo- le haré un recorrido por el colegio. ¿Nos acompañan?
-claro- dijeron al unísono.
[...]
Y así fue como el nuevo alumno fue incluido al alocado grupo de las chicas, le enseñaron el colegio completo en un tiempo recor de diez minutos, dejándole diez minutos más para el desayuno. El de ojos verde, no se alejaba ni medio centímetro de Damián, algo que no les molestaba mucho a las chicas, pero si le molestaría a cierto Moreno que llegaría en cualquier momento a ver a su novio, siendo nada celoso, sarcásticamente.
Code y Kila se encargarían de comprar, mientras los mellizos y el nuevo, tomaban asiento en la mesa ya reservada del grupo.
Diego: es muy bonita la escuela- sonrió.
Miky: ¿Cierto?- apoyo sus manos entusiasta en la mesa.
Diego: ustedes...- no logró acabar ya que la mayor interrumpió.
Miky: si, somo mellizos, el es el menor y yo la Alfa- río eufórica para luego mirar a su roburizado hermanito.
Diego: son iguales, sólo le falta tu maquillaje y el uniforme, para que sean gemelas- río.
Damian: n-no es gracioso- inflo las mejillas.
Xx: no lo molesten- llegó cierto rubio y lo abrazó por el cuello- si no, se la verán conmigo- amenazó divertido.
El de ojos verdes le dio un pequeño y casi notorio tic en el ojo. Que se creía ese rubio al abrazar al afeminado chico. Ósea Damián debería ser sólo de el, si tendría que jugar sucio por ello. Lo haría.
Era amor a primera vista, en todas las novelas de romance que había apreciado, los protagonistas terminaban juntos, sin importar que.
Xx: Bill, ¡Por la puta madre!, ¡¿Cuántas veces te debo decir que no abraces así a Damián?!. ¡Te lo he advertido miles de veces oxigenada!- se acercó el peli negro frotándose el puente de su nariz.
Bill: ¡Puedo hacer lo que quiera! Es mi mejor amigo y el me deja- le enseñó el dedo medio.
Damián: tranquilizate Michael, cuantas veces te he dicho que solo es mi amigo- suspiro agobiado.
El castaño mayor hecho un pequeño vistazo a aquel salvador del pequeño. Para su gusto estaba bastante bueno, podría decirse que en un día ya se enamoró dos veces, aunque con el moreno le gustaría ser al que le rompen el culo.
Comenzó a hacerse un sin fin de imaginaciones con el chico. Al sólo ser su primer día en la escuela, ya estaba con las hormonas revueltas, calentándose con los hombres que veía, hasta el rubio tenía lo suyo, pero no le daba mucha espina, por su apariencia presumida y poco desvergonzada. No se entendía porque hasta el momento no se sentía atraído por ninguna chica del lugar, eran lindas, pero nada de su gusto.
Code: hermanito, ¿Qué tal la práctica?- llegó la chica con un trozo de pizza en la mano.
Michael: bastante bien, supongo. Y tu ¿Por que comes comida chatarra? Eso le hace mal al bebé.
Bill: no jodas a mi novia, Jackson. Así como no te gusta que yo moleste a Damián.
Michael: Sabes que no me gusta que te pegues tanto a el. Es mio- lo abrazó por la espalda- ¿Cierto, mi amor?- lo sujetó por una mejilla y lo volteó para besarlo.
Mi amor... Mi amor... Mi amor...
Era la palabra que retumbaba en la cabeza del nuevo, si bien había escuchado, eso sólo se le dice a una pareja, entonces sus dos enamoramientos del día, ¿eran pareja? No podía creelo, eso no podía ser realidad, le costaba procesar tal información, pero claro que no aceptaría tal cosa. Cuando Diego Arias quiere algo, lo consigue. En este caso, no sabía a cual de los dos, bueno, el que se de primero.
Damián: ¿sucede algo Diego? Estas pálido- cuestiono preocupado, haciendo sentir la típica pizca de celos a su novio.
Diego: claro, no te preocupes Dam-Dam soy así- sonrió ladeando un poco la cabeza.
Michael: ¿y el quien es?- preguntó a regañadientes, casi gruñiendo por el hecho de que aquel ojo-esmeralda le haya nombrado por el apodo de los amigos a SU novio.
Damián: es...- fue interrumpido.
Diego: hola- sonrió sonrojado- soy Diego Arias, el nuevo compañero de los chicos- estrecharon sus manos amigablemente. Y esta vez al que le dio celos fue al menor.
¿Cómo podía sonrojarse al mirar a SU novio? No podía, no era correcto, Michael era de el, de nadie más, el solamente podía colocarse como un tomate delante del moreno. Y entendió, ahora comprendía lo que sentía el mayor cuando reclamaba. Se sentía tan estúpido por no darse cuenta antes.
Por otro lado Michael miro con ternura al nuevo, por su forma le recordaba a su pequeño castaño que siempre que le hablaba se sonrojaba. De seguro era pasivo, no cualquier chico se ruboriza así ante otro. No tenía que preocuparse de nada.
Michael: soy Michael Jackson, el novio de Damian- sonrió.
E hizo palpitar el corazón de Diego, sólo con su sonrisa atractiva y varonil. De seguro derretía a cualquiera.
Diego:no sabía que eras te gustarán los hombres, Dam. Y aunque no lo creas, tu tampoco Michael - sonrió de lado- no me mal entienda, se que es algo natural, pero esta sociedad - hizo un ademán con la mano.
Miky: es gracioso, porque el era hetero.
Diego: ¿Hetero?
Code: veras mi estimado amigo, Mi hermano era un Don Juan con las mujeres, hasta que conoció a Damian y lo comenzó a acosar. Hasta que se hicieron novios y este- apuntó al moreno- le gustará el pene- todos rieron.
Diego: ¡¿Eres el pasivo?!- dijo impresionado.
Miky: el es el seme idiota. La pasiva es mi hermano.
Kila: es raro si. Desde que los dos andan juntos Michael se apuesto tan cursi y meloso que llega a dar diabetes. Al igual que Bill con Code.
Bill: dices eso, pero no te decimos nada cuando empalagas con tu amor a Miky.
Diego: no logró asimilar.
Bill: créeme niño, tendrás toda una vida para hacerlo.
[...]
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"Cede a Mi" [Michael Jackson] [Yaoi/Gay] [1]
FanficPor la bocota de su melliza, fue expuesta la sexualidad de Damián ante Michael. El pelinegro curioso por saber que no se trata de un juego, ni una broma pesada. Acosa al menor, con tal de que el le exponga la verdad. Sin pensar que de tanto pensar e...