CAPÍTULO IV: CAPTURADO

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Julius Schaub caminó a paso veloz por el largo pasillo de la base de HYDRA en la ciudad

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Julius Schaub caminó a paso veloz por el largo pasillo de la base de HYDRA en la ciudad. El hombre llevaba las manos en el bolsillo de su uniforme y tenía el ceño fruncido, acababa de recibir un reporte de parte de la organización en Europa. Los hombres que habían recibido la orden de capturar al Soldado del Invierno acababan de ser encontrados muertos en Chernóbil. El Herr bufó y abrió la puerta de un gran salón en el cual se encontraba una veintena de hombres fuertemente armados. Frente a él se colocó el agente Reed, quién levantó la mano derecha y exclamó.

-HAIL HYDRA

Schaub lo miró y también levantó su mano derecha y Reed se alejó, uniéndose a su equipo. El Herr carraspeó para comenzar con su discurso: - Hace dos meses que encomendé una misión – Dijo el hombre – El agente Piaget y cinco hombres más que lo acompañaban tenían una tarea; la de capturar al Soldado del Invierno. ¡Desgraciadamente fracasaron! Esos ineptos no fueron lo suficientemente inteligentes para enfrentarse con ese imbécil que resultó ser más astuto. Seis hombres fuertes no pudieron contra ese traidor. Pero yo confío en ustedes y sus capacidades, ¡sé que podrán llevar a cabo esta misión! – Exclamó con fuerza Julius Schaub – Necesito que vayan a Ucrania y busquen a ese desgraciado, ¡lo necesito en mi poder! Si fracasan, ya saben lo que les espera, a menos que él les dé el mismo destino que a Piaget y a sus hombres.

-No fallaremos, Herr Schaub – Dijo el agente Reed – Le prometo que traeremos al Winter Soldier ante su presencia, ¡vivo como usted lo quiere!

-Espero que así sea, Reed – Sonrió Schaub – Ya que Piaget me dijo lo mismo y no pudo lograr su cometido.

-Yo no soy él, señor – Murmuró Reed – Yo no soy un fanfarrón. Mis hombres y yo somos los más capaces, los mejores de nuestra división. ¡No vamos a fallar! – Exclamó el agente y abandonó la habitación, seguido de sus hombres.

-Eso ya lo veremos – Dijo Schaub al verlos alejarse – Todos lo subestiman, pero no saben de lo que es capaz ese soldado. El hombre es fuerte, es astuto y puede exterminar a cualquiera en cuestión de segundos. Por eso lo necesito para que obedezca mis órdenes y con él, una vez que exterminemos a los Vengadores, HYDRA logrará sus propósitos.

El hombre caminó alrededor de la sala y se llevó las manos a la cabeza. ¡Jamás pensó que fuera difícil capturar al Soldado del Invierno! Comenzó a reírse a carcajadas, pues para Herr Schaub no había imposibles, por algo él era una de las cabezas más importantes de HYDRA. Nunca había fallado y esta vez no sería la excepción.

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Bucky conducía su motocicleta por una callejuela solitaria en Kiev, habían pasado dos meses desde que se había enfrentado con la gente de HYDRA y los había vencido; sin embargo, jamás había bajado la guardia y siempre estaba alerta sobre cualquier actividad sospechosa que se presentara. A pesar de llevar una vida tranquila y sin ningún tipo de contratiempo, esa calma no le gustaba, había algo extraño en esa tranquilidad tan repentina. Nadie lo buscaba, ni lo seguían, pero sabía que alguien lo seguía y que tarde o temprano se encontraría con más enemigos.

STOCKHOLM SYNDROME (SEGUNDA TEMPORADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora