CAPÍTULO IX: EL RESCATE (LA DECEPCIÓN DE STARK)

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El Capitán América se echó a correr, lanzando su escudo directamente hacia el panel de control que comandaba la silla en la que Bucky se encontraba sentado, ¡no permitiría que le lavaran el cerebro! Los agentes de HYDRA se pusieron rápidamente en ...

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El Capitán América se echó a correr, lanzando su escudo directamente hacia el panel de control que comandaba la silla en la que Bucky se encontraba sentado, ¡no permitiría que le lavaran el cerebro! Los agentes de HYDRA se pusieron rápidamente en movimiento, atacando a los invasores, pero Barton y Thor ya habían comenzado a hacer de las suyas, eliminando a sus enemigos.

-¡Llévense al soldado! – Gritó de inmediato Schaub.

Thor lanzó una descarga contra la "máquina lavacerebros" y esta hizo costo circuito, deteniéndose inmediatamente. Hawkeye disparó contra los agentes que intentaban llevarse al Soldado del Invierno y trató de mantener a los demás alejados de él. Steve Rogers corrió, aproximándose a su amigo para tratar de liberarlo, al tiempo que su escudo golpeaba y golpeaba a más agentes. Julius Schaub estaba desesperado, podía ver que sus planes se venían debajo de nuevo.

-¡Deténganlos! Atáquenlos – Gritaba Schaub haciendo sonar las alarmas y reunir a más hombres – No permitan que lo liberen, ¡no dejen a ninguno con vida!

El alemán disparó contra Hawkeye, pero Steve logró cubrirlo con su escudo: - ¡Ve y libéralo! – Dijo Barton – Yo te cubriré – Exclamó el arquero, Fácilmente Thor y yo podremos hacerles frente a todos, salva a tu amigo.

El Capitán América asintió y se echó a correr, acortando la distancia que lo separaba de Bucky. Thor y Hawkeye continuaban disparando a todo aquel que trataba de impedir que Steve lograra su cometido. En un par de minutos, Rogers ya estaba junto al Soldado, quién lo miró con una mezcla de sorpresa y agradecimiento.

-¡Steve! – Murmuró Bucky - ¡Estás aquí!

Rogers contuvo las lágrimas, y tragó grueso, tratando de deshacer el nudo de su garganta. Posó su mano sobre el hombro de su amigo mientras que le decía: - No iba a dejarte solo, ¡no esta vez! – Dijo el Capitán – Debes estar con Lyna, ella te necesita.

-¿Dónde está ella? – Preguntó Bucky, relajándose para que Steve lograra liberarlo - ¡Dímelo!

-Te lo diré cuando hayamos salido de aquí – Respondió Rogers – Sólo puedo decirte que está encerrada contra su voluntad, por eso debemos terminar con esto para ayudarla.

Buck asintió y movió los brazos entumecidos por estar sujeto en esa silla. ¡Iba a pelear para salir pronto de ahí! Quería reunirse con Lyna lo más pronto posible, necesitaba verla y decirle cuanto la amaba. Se incorporó de su asiento y golpeó a un agente que trataba de impedir que se moviera de su lugar.

-¡Cómo detesto a esa escoria! – Bufó el Soldado con molestia.

Steve asintió y le dedicó una media sonrisa. Bucky también lo observó y suspiró, uniéndose a la lucha y derribando un par de agentes. Los ojos de James se posaron en la imagen de Barton, que lanzaba flechas, hiriendo o asesinando a los soldados de HYDRA. Hawkeye giró la cabeza y lo miró, dedicándole una sonrisa mientras hacía la "V" de la victoria con su mano derecha. E inmediato, Bucky se dio cuenta que ese era el mismo sujeto que había tratado de detenerlo en Siberia.

STOCKHOLM SYNDROME (SEGUNDA TEMPORADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora