Mi vecino y sus tatuajes (Editando)

S E S E N T A I T R E S

51 kilos

Eso peso ahora, y antes pesaba 55 kilos, nunca en mi vida me habia pasado esto, Jackob cada dia me dice que si no dejo mi estupides no de comer el mismo vendra, tomara una gran hamburguesa y me obligara a comermela, lo cual me estresa ya que es muy poco lo que baje, el solo quiere que engorde para rodar por las calles.

Mi madre ha sido muy estricta conmigo, mi papá siempre ha sido el mejor, me trata de una manera tranquila, amorosa, pero mi mamá desde que supo que estaba con William me trata como una escoria.

La casa de William esta vacia, su pieza no tiene nada, y el silencio en ella lo siento, siempre salgo al balcon a mirar a ver si el esta alli, los recuerdos de cuando me molestaba desde el balcon sabiendo que yo no podia golpearlo al estar tan lejos me divierten, recuerdo las veces que el me miraba en los descansos en la Universidad, y cuando lo sorprendia mirandome el miraba hacia otro lado como si nada, cuando trataba acercarse a mi de las maneras mas estupidas, en mi interior siempre pense en lo idiota que era y que ojala lo hubieran atropellado, pero ahora el es mio, mi idiota.

Me arrodille al lado de la cama y me agache buscando mi caja en donde guarde lo que me ha dado William.

Un set de esmaltes de uñas, que el muy idiota paso a llevar mi preciada caja de esmalte haciendo que estas caigan rompiendose la mayoria, hice que limpiara el gran desastre que habia dejado en mi habitacion, y al otro dia habia un caja en la puerta de mi casa con una pequeña nota: Bueno tal vez no seran las mismas, pero hice lo posible por encontrarlos, ojala te gusten, por favor no me odies. Wxx.

Este set tenia esmaltes de mejor calidad de los que tenia antiguamente, sonrei y deje el set donde estaba, si el supiera que no he ocupado los esmaltes solo por que el me los dio se reiria en mi cara.

Al fondo de la caja vi la carta roja, mi favorita.

La lei y la lei, y mi vista se empezo a nublar de a poco, tan solo ver su letra se me hacia un gran nudo en la garganta, no puedo creer que el idiota que trato de hacer mi vida miserable ahora lo ame tanto, esos ojos verdes cada vez que los miro acarician mi alma de una manera tan sutil, como si caminara en las nubes descalza, pero ahora todo se acabo.

Guarde la carta con cuidado, como si de vidrio se tratase y puse la caja bajo mi cama.

William

--Largo de aqui!--

Una mucama me mira y solloza en silencio mientras sale corriendo de mi habitacion, el cuadro que me habia dado Emily, el primer regalo que me habia dado estaba hecho añicos, tan soño recordar que ella todavia tenia una pisca de odio hacia a mi, y recibir un regalo tan lindo de su parte hace que sonria, al igual que ese dia que recibi tan lindo regalo

Recojo pedazo por pedazo y lo deje en el velador, me acoste en mi cama y mire el techo un largo rato, mi mente estaba en blanco, no he firmado ningun papel, cancele la mayoria de las reuniones que tenia, mande a la mierda a medio mundo ya que mi vida privada se esta destruyendo poco a poco.

--Encerio das miedo-- escucho de lejos.

Muevo la cabeza y a los pies de la cama estaba Chase con una mirada de desaprobacion.

--Lo se, gracias-- digo volviendo a mirar el techo.

Siento movimiento, y Chase se situa a mi lado.

--Crees que estar acostado aqui haras alguna diferencia?-- me dice Chase serio.

--No lo se, me da lo mismo-- digo sin mirarlo

--Levanta tu culo de esa maldita cama, o yo lo hare William-- dice Chase entredientes.

Lo miro con odio, aunque de todas maneras no hace ningun efecto en el, me siento en la esquina de la cama y agarro mi cabeza.

--Encerio te quedaras aqui dando pena?-- me dice Chase muy cerca de mi

Ignoro sus palabras cerrando mis ojos fuertemente.

Chase rie

--Encerio William eres un cobarde, donde esta ese William que hacia lo imposible para lograr lo que queria, que le iba a importar una mierda lo que dijieran los demas?-- dice Chase riendo

Mi rabia me consume de apoco, y cierro mis puños causando que estos enten casi blancos.

--Sabes William? Tal vez es mejor que no la veas, tal vez ella encontrara a alguien que pudiera dar todo por ella, que no le importaria lo que pensaran los demas, en cambio tu, eres un completo idiota que no valora a una chica tan genial, y dudo que le cueste encontrar a alguien, ella es muy guapa, un cuerpo hecho por los mismos dioses, asi que no le costara nada poder......--

Lo miro fijamente a los ojos, tenia a Chase levantado del cuello de su linda pero estupida camisa azul, me miraba sonriendo malicioso, haciendo que le eleve mas.

--Cierra tu puta boca, o lo hare yo-- digo entredientes

Chase con pocas fuerzas rie.

--Con la fuerza que estas poniendo contra mi tendrias que estar tocando la puerta de la casa de Emily en estos momentos-- dice con la voz mas ronca de lo normal.

Lo miro con odio, suelto mi agarre haciendo que Chase caiga al suelo tomandose el cuello adolorido y inhalando todo el oxigeno que pueda.

--No puedo-- digo sin más.

Chase me mira mientras se levanta, se arregla su camisa y me mira serio.

--Despues no quiero verte arrepentirte, o pedir mi ayuda por alguna estupides, esta claro?-- dice con serio

Da mieda vuelta y sale por la gran puerta.

Cierro mis ojos y tomo mi cabello desesperado, necesito respuestas, saber que pasa.

Me sente en mi sillon, tome los papeles y empeze a firmar la mayoria,  mi firma salia de una manera distinta por la rabia con la que lo hacia

Cada palabra que leia se me venia ella a mi mente, su linda sonrisa, sus ojos claros, sus largas y rizadas pestañas, su largo cabello cafe claro, sus gruesas cejas, estaba tan cegado por ella que de un momento a otro tire los papeles lejos, rompiendo en pedasos los que quedaban a mi alcance.

Grite con todas mis fuerzas, tratando de quitar el peso que habia dentro de mi, lo que no funciono en lo absoluto.

Siento el celular vibrar a lo lejos, me quedo parado ahi unos minutos, tratando de alejar mi mente de todos los malos pensamientos.

Tomo mi celular y veo un mensaje, que tan solo verlo nace una sonrisa de mis labios

Quiero verte, por favor juntemonos en la cafeteria central, te esperare ahi

E.

Tan solo leer ese mensaje mi miedo crece, al saber algo muy bien, tomo un poleron sin ninguna gana y salgo lentamente de la puerta.

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