Se irá

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Bonnie había venido para ayudar a Emma a vestirse. La médica llegó poco después. Emma le explicó que se había tropezado en la ducha.

La doctora miró su pie con aire experto.

-Solamente te dislocaste el tobillo. Tengo que volver a acomodarlo.

El grito de Emma aún resuena en mis oídos.

Bonnie se marchó porque tenía una ecografía y la doctora, luego de recomendarle a Emma guardar cama unas dos semanas, también se fue.

Mi compañera de casa dormía profundamente.

Cerré la puerta de su cuarto.

Me metí en la habitación de invitados y me eché sobre la cama, recordando mi pequeño problema.

Miré mis pantalones con un suspiro.

Los desabroché y metí mi mano dentro de la ropa interior.

Emma. Pensé en ella.

Sonaba muy mal pensar así de ella si estaba pasando por una situación terrible por ese mismo motivo, pero no podía evitarlo.

Pensé en sus manos recorriendo mi torso y dejándome desnudo... Sus labios acariciando los míos... Su cuerpo perfecto, que no tenía nada que ver con esas fotos... Yo entrando en su interior mientras ella gemía mi nombre...

-Rupert...

Parecía que mi problema iba a desaparecer.

-Rupert...

Sonreí.

-Rupert...

Listo. Abrí los ojos. Algo andaba mal, porque seguía escuchando los gemidos de Emma.

Me dirigí hacia su cuarto y lo abrí para entrar.

Emma me había estado llamando.

-Lo siento, no te oí.-Dije.

Suspiró.

-Está bien. Solamente quería... Charlar contigo.

Me senté en la cama y acaricié su frente.

-¿Qué ocurre?

Suspiró.

-Te agradezco mucho que me estés hospedando aquí, pero por fin pude ponerme en contacto con mis padres... Creo que me vendrán a buscar pronto.

Tragué en seco. Ella esperó mi reacción.

-Me alegro por ti.-Dije.

Sonrió.

-Muchas gracias por todo, en serio.

Sonreí y besé su frente.

-No hay de qué. Voy a dormir.-Dije.

Fui hacia mi habitación.

Cerré la puerta y enterré mi rostro en la almohada.

No quería que Emma me oyera llorar.

Fotografías falsas [Grintson]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora