❝Hicimos un desastre y quizás estemos mejor así y debo confesar que en mis sueños acaricias mi cara, me preguntas si quisiera volver a intentarlo y estuve a punto de aceptarlo❞
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Segunda temporada de "Amnesia"
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"Él no puede ver mi falsa sonrisa, y que mi corazón no se está rompiendo porque no siento absolutamente nada. Y tú eras tan salvaje y loco, tan frustrante, intoxicante y complicado, te fuiste por error y ahora...Extraño...Gritar y pelear y besarnos bajo la lluvia, son las 2 A.M y estoy maldiciendo tu nombre estás tan enamorado que actúas como demente, y te amaba de esa manera"
Los siguientes días a mi extraña noche junto a Harry siguieron un curso totalmente normal y rutinario. Me concentré de lleno en mi trabajo y en corregir los escritos que debían ser supervisados y aprobados por el comité, fui de compras, hice la colada, lave mi ropa, limpie todo el apartamento y conseguí un par de nuevos esmaltes de uñas. Para cuando el viernes llegó ya sabía que me esperaba un fin de semana larguísimo.
Douglas, Cameron y Camilla llegaron cerca de las cuatro y veinte de la tarde. Como yo salgo del trabajo a las seis le di a Douglas – porque claramente es el más responsable de los tres – una copia de la llave de mi apartamento, para que cuando ellos viniesen a visitarme yo no tendría que salir antes de mi trabajo. Además eso les permitía dormir, descansar y comer luego de un largo viaje en avión.
Así que cuando llego a casa pasada las seis y treinta de la tarde, soy interceptada por tres pares de brazos que me rodean y apretujan fuertemente. Me dejo ir por un momento y abrazo a mis amigos sintiéndome completa y en casa. Al separarnos soy besada en la frente, las mejillas y mi cabello. Me detengo a verles, mis amigos están claramente más adultos y maduros, bueno, lo último creo que solo Douglas. Pero sonrío, porque son pocas las oportunidades que tengo para verles y sobre todo para que podamos estar los cuatro nuevamente.
—¿Cómo has estado rubia de mi corazón? —pregunta Cameron volviendo al sofá, Teodoro volando a sus piernas de inmediato.
—Bien, algo atareada en la editorial pero todo perfecto. ¿Qué hay de ustedes? ¿Cómo estuvo el vuelo? ¿Comieron algo?
—Estuvo normal—responde Camilla sonriéndome— Yo dormí todo el vuelo hasta aquí así que siento que tengo más energía de lo normal y sí, ya comimos algo liguero pero te estábamos esperando para que pidamos algo de cenar.
—Eso me parece bien, pero primero me daré una ducha ¿vale?
Les veo asentir y les dejo en la sala mientras me encamino hacia mi habitación para coger algo cómodo para vestir luego de mi ducha. Mientras estoy cogiendo mis pantalones de chándal noto como mi puerta es abierta. Douglas está sonriéndome cuando volteo.
—¿Qué pasa grandulón?
—¿Cómo estás? —pregunta. Frunzo un poco el ceño pero contesto de todas maneras.
