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"Hay una grieta en mi ventana, un ave en mi habitación. Ángeles alrededor que cuidan de ti cuando camino sobre el agua todos mis sueños se vuelven realidad. Aun así, nada significa nada sin ti, ti. Tú me diste una razón, algo en que creer, lo sé, lo sé, lo sé. Me diste un significado, algo que puedo respirar, lo sé, lo sé, lo sé. Es un sentimiento agridulce, anhelo, y me estoy yendo, me voy, me voy, me voy. Le dije a mi corazón que mienta, pero sé que en lo profundo es cierto, que desearía estar allí contigo, que desearía estar allí contigo"  




Los días siguientes son básicamente un torbellino de emociones y momentos. Desde mi participación como oradora, hasta las comidas con los chicos, todo ha sido sin duda espectacular. Pero es momento de volver a casa, de volver a mi realidad, de volver a mi rutina. Es por ello que mis maletas descansan en la entrada de la puerta del hotel, mientras me observo al espejo e intento tranquilizarme.

He estado pasando los últimos días con los chicos, tanto individualmente como en grupo. Hemos creado un revuelo en las redes sociales y entre los fans. Y esta, el día de hoy será la última vez.

Mi móvil suena, es un mensaje de Lincon. Nos hemos estado mensajeando toda la semana y me dice que está ansioso por mi regreso. Una sonrisa se escapa de mi rostro cuando leo sus palabras y entonces decido responderle antes de bajar al bufet.


"Hay muchas cosas que necesitábamos hablar cuando vuelva a casa, nada malo así que no atormentes tu cabeza con pensamientos locos. Te quiero, lo hago de verdad. Muchísimas gracias por aceptarme a pesar de toda la mierda que viene conmigo y mi pasado, gracias por quererme y por cuidar a Teodoro mientras no estoy en casa. Prometo que te recompensaré apenas llegue. Te quiero Lincon, no lo olvides. Nos vemos pronto"Rose


Aun sonriendo bloqueo el móvil y lo meto dentro de mi bolso de viaje. Observo rápidamente la habitación revisando que no se me haya quedado nada fuera de las maletas y cuando me aseguro de que no es así salgo de allí. El elevador está vacío, lo cual es extraño pero placentero. Les envío un mensaje a los chicos diciéndoles que estoy yendo hacia el bufet y ellos me responden que están por llegar.

El lugar está relativamente vacío, la verdad es que las personas prefieren ir a comer fuera, por comodidad y también economía. Pero es mi último día, me voy en menos de cinco horas y no podíamos permitirnos ir a otro sitio que no sea este, porque desde aquí nos vamos directamente al aeropuerto y no tengo que batallar con las maletas.

Los chicos comienzan a llegar, en menos de quince minutos ya estamos los seis escogiendo lo que comeremos y sentándonos en una mesa en el fondo. Comenzamos a comer entre conversaciones y risas. Disfruto de cada momento, de cada pensamiento. Absorbo el sonido de las risas de los cinco chicos a mí alrededor y me empapo de ella.

I Almost Do《 Libro 02 》H.SDonde viven las historias. Descúbrelo ahora