❝Hicimos un desastre y quizás estemos mejor así y debo confesar que en mis sueños acaricias mi cara, me preguntas si quisiera volver a intentarlo y estuve a punto de aceptarlo❞
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Segunda temporada de "Amnesia"
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"Aquí estamos de nuevo, cuando te amaba tanto vuelve antes de que pierdas lo único que de verdad has conocido, fue raro, estaba ahí, lo recuerdo todo muy bien"
Rose abre la puerta de su departamento dándonos a ambos la bienvenida a su nuevo hogar. Enciende las luces y noto inmediatamente la decoración que ha adaptado para este lugar, me doy cuenta de que no se parece en nada a como era nuestro apartamento en Londres. Es como si una vieja Rose y una nueva se encontrarán y ya no tuviesen nada en común y aquello me revuelve el estómago.
La noto quedarse en el recibidor mientras se quita el abrigo y las botas. El lugar está templado y aquello es agradable. Ella se voltea hacia mí y esboza una mueca parecida a una sonrisa.
—Adelante, siéntate—Apunta el modesto sofá de color violeta con muchísimos cojines de diversos colores que combinan entre sí de una manera particular. —Traeré el café en un momento ¿Vale?
—Vale—asiento como estúpido yendo hacia el sofá, me detengo antes de sentarme y me quito el abrigo dejándolo semi doblado en la orilla del mueble—¿Quieres que te ayude?
—No hace falta, volveré en unos minutos.
La veo moverse hacia el espacio de la cocina, mientras escucho el sonido de los muebles y posteriormente el del agua corriendo me permito recorrer el lugar con la mirada. El departamento es relativamente pequeño, tiene la cocina, el comedor y la sala conectadas en un solo ambiente que Rose se encargó de separar con mamparas. Es acogedor, pequeño y se siente muy como un hogar.
Mientras la espero comienzo a pensar en que desde hace mucho tiempo el apartamento de Londres – donde cabe destacar no paso mucho tiempo – no se siente como un hogar, desde que Rose se fue de allí se siente vacío y frío. Suspiro. Me obligo a mí mismo a decirme que todo estará bien, que esto es solo es una conversación casual con mi ex novia, que todo quedará aquí y luego volveremos a nuestras vidas como de costumbre.
Estoy por tomar mi móvil para enviarle un mensaje a Niall cuando algo salta a mis piernas. Me quedo de piedra cuando noto que se trata de un gato, sí, un bendito gato color blanco que me observa con unos grandes ojos antes de acurrucarse en mi regazo. Mis manos se van hacia su cabecita donde comienzo a acariciarlo.
—¿Desde cuando tienes un gato?
Escucho una maldición desde el interior de la cocina y luego veo a Rose aparecer en donde estoy, me observa sorprendida y luego ve a su gato en mis piernas.
—Dios—suspira pesadamente—pensé que te iba a arañar
—¿Lo hace? —Miro al gatito ronroneante en mis piernas—parece amistoso
