La fiesta siguió de forma normal. Bueno, más o menos. Taehyung le había prometido a Nam que no bebería, entendiendo el riesgo público que eso significaba para su fiesta, pero nadie más en esa fiesta había prometido algo semejante. Todos bebían a destajo y a medida pasaba el tiempo, el efecto se hacía más evidente. Hasta Jennie, siempre prudente para beber, se veía algo mareada y hasta había pedido una silla para mantenerse sentada.
Taehyung vio a Suni cruzar la habitación hacia el exterior. Decidió seguirla.
- ¡Hey, Suni! ¿Dónde vas?
- ¡Oh! Solo a tomar aire afuera... ¿vienes?
- Claro.- dijo, mientras le abría la puerta de la entrada principal. Suni bajó los escalones de la entrada y sentó en el último. Él hizo lo mismo. La casa adentro parecía retumbar con la música a alto volumen. Taehyung sacó un cigarrillo y le ofreció uno a Suni. Ella lo aceptó sin dudar. Taehyung disimuló su sorpresa. Le ofreció fuego y aprovechó de acercarse lo más que pudo, con la vista pegada en cada uno de sus movimientos.
Es atrevida. Y fuma muy sexy.
- Así que ya no tienes novio, Suni... ¿qué pasó?- preguntó hablando amenamente.
Ella bajó la mirada y Taehyung entendió que había tocado un punto importante. Tal vez no debería haberlo hecho.
- Perdona, no es de mi incumbencia...- se disculpó.
- No, está bien... es solo que... no lo sé, aun no puedo hablar de él libremente, ¿entiendes?
- Ooohhh, ya veo...- dijo él, pensativo.- De todas formas, cuando quieras hablar solo tienes que decirme... para eso somos amigos, ¿no?
Ella lo miró a los ojos con una mirada directa.
- Claro, Tae.
Se produjo un silencio un poco incómodo, interrumpido solo por los movimientos de los respectivos brazos que acercaban los cigarrillos a los labios.
- ¿Y tú, Tae? ¿Aun sigues muy triste?
- Aish, Suni... que entrometida...- dijo él bromeando.
Ella le sonrió, mostrando sus dientes. Taehyung la miró y le sonrió de vuelta. ¿Era coquetería lo que percibía? No estaba seguro, pero sentía una atracción innegable con la mujer que tenía al lado.
- La verdad, ya estoy mejor, Suni.
- ¿Seguro? La última vez que nos vimos yo sé que te habías ido de parranda. Otra vez. ¿O me equivoco?
- Aish, Suni, que calumnias. Si yo ya ni bebo.
Ella soltó una carcajada fuerte y no notó cuando Taehyung se sentó más cerca de ella. Al menos no lo hizo hasta que él pasó un brazo por su hombro y le dijo casi al oído.
- En este momento estoy completamente sobrio... soy plenamente consciente de mis actos...
Suni se sintió aturdida por unos segundos...¿Qué quería decir con eso? La actitud era claramente sugerente. Y la cercanía...casi aterradora.
- Hey, Tae...- le dijo, empujando la cara de Tae hacia atrás con la palma abierta.- ¿Ahora te las das de coqueto conmigo?
Él la miró fijo, divertido.
- ¿Habría algún problema con eso? – le dijo.
Suni le lanzó una mirada examinadora. Había visto a Taehyung coquetear un montón de veces con muchas chicas, incluso cuando era novio de Irene. Pero nunca con ella. Jamás con ella. Por eso no podía evitar un dejo de extrañeza en ser el objetivo de la galantería de Taehyung.
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/// Las reglas del juego ///
FanfictionDe los juegos siempre se obtiene diversión, ¿no? - Yo quiero toda la diversión que puedas darme. - dijo Taehyung. ¿Aceptas?