"Un día perfecto
nos olvidamos de los problemas
Domingueros de nosotros mismos
es tan divertido.
Un día perfecto
Haces que me olvide de mí mismo
Creí que era alguien diferente
Alguien bueno.
Oh, es un día tan perfecto
Estoy contento por haberlo pasado contigo
Oh, es un día tan perfecto
haces que me sienta a gusto."
La habitación de Harry era triste. Ni siquiera era 'de Harry', ellos alquilaban en una fea corrala, y compartía con Patti.
Pero aún así era triste. Era triste y apagada a pesar de las fotos en las paredes y pósters de alguna banda clásica. Era aburrida y desgarradoramente triste; y a veces acumulaba llantos durante horas y otras gemidos entre las sábanas y jamás un beso, jamás una caricia. Jamás conservaba una risa ni chiste, los buenos recuerdos escapaban hacia la luz del sol y tal vez buscaban una mente mejor.
En cambio, la habitación de Louis era cálida. Alguien realmente vivía en ella, y las ventanas estaban abiertas y aún en invierno era malditamente cálida. Y se oían los llantos y risas y gritos y besos encerrados, se oía que había amado y vivido, y era algo real.
En la habitación de Louis sobraban colores y dibujos en las paredes, y había ropa por todos lados y música en todo momento, el olor de alguna infusión siempre llenando el lugar. En la habitación de Louis parecía vivir en al aire la posibilidad de ser feliz, aún si en el ahora no lo eras.
Pero ahora la habitación de Harry tiene una pequeña foto instantánea de dos hombres sonriendo, pegada en el marco del espejo del armario, y tal vez son felices aún, eso vuelve el momento inmortalizado una promesa escondida. Y hay alguna risa escandalosa dando vueltas, un gracioso dibujo en la pared junto a su cama, con un chiste de 'toc-toc' del que solo un rizado podría reír.
Hay un par de medias que no son de él y a veces aparecen calzoncillos que tampoco le pertenecen; la mejor parte es cuando un cepillo de dientes es olvidado por unos días y su dueño vuelve a buscarlo, y siempre se queda unos días más.
Y la habitación de Louis tiene nuevos dibujos y algunos maquillajes y barnices de uñas que no le pertenecen, y suele tener alguna falda o medias que tampoco son de él y definitivamente podría amar eso.
Louis cree que también ama el hecho de dormir abrazando alguna prenda con aroma a Harry, y se pregunta si es demasiado pronto para pensar en despertar de ahora en adelante con algo más que tan solo olor y tela. Abrir los ojos más de una noche con un cuerpo frío y largo que calma su insomnio y canta para verlo sonreír, que se ha memorizado 'Perfect Day' para susurrárselo cuando tiene una pesadilla, o no puede dormir, o tal vez porque si. Y siempre acaba diciendo que es un día perfecto a su lado y el mayor intenta mantenerse despierto para besar sus labios y repetir lo mucho—demasiado que lo quiere.
Porque vivir con él se ve algo casi posible, vivir con Harry se ve demasiado bien. Louis siente que podría acostumbrarse a pasar luego de él al baño y sentir la calidez que deja el agua y el olor a jabón y sonreír cuando ve su ropa en el cesto. Él amaría escuchar al rizado llamando «casa» a ese lugar, y se pregunta si diez meses son muy poco como para estar en concubinato.Se cuestiona si Harry piensa igual.
•••
Es un día un poco especial, un apenas cálido domingo a finales de septiembre. No quieren aceptarlo, pero es como su primera cita formal.
Comienza cuando están encontrándose en una esquina, un hombre bajito que viste una remera corta y una gran sonrisa, cabello que ha mutado a su castaño original luego de ser cercenado por todos lados. Uno alto de cabello rizado que crece rebelde, ha intentado peinarlo hacia atrás hoy. Sus uñas, hoy cortas, son negras y su vestido se lleva todo el aire de los pulmones del mayor, mientras juntos se dirigen al zoológico.
Compran helado en el camino, lo comparten porque es mejor hacerlo; y hay muchas risas cuando Harry deja caer un poco sobre el pantalón del mayor; recibiendo quejas sobre que no se irá. Eso dicen sobre el helado de chocolate.
Ellos ven algunos animales, tienen un poco alimento y se aseguran de que no les hará mal antes de dárselo. Alimentan algunos pájaros y pasan la tarde con pereza, tirados en el césped y buscando algún rayo de sol que no hay, porque el cielo está bastante nublado y parece que se ha decidido tragar la iluminación. Así que sólo se mueven cuando la lluvia comienza a asustarlos entre algunos besos, y corren hasta algún techado para pensar que hacer. Se deciden por entrar a un supermercado y comprar vino tinto, soda, algunas frutas y canela, con la idea fija de hacer sangría, propuesta por Harry.
Hay chistes que van y vienen en la cocina de Louis, y Harry chilla cuando el mayor quiere cortar una fruta y pone su dedo demasiado cerca del cuchillo, y el rizado se siente una buena persona luego de evitar eso, y el más bajo se siente diferente hoy, una pequeña parte en su interior está cálida mientras comparten el tiempo y cuando la sangría está lista la beben entre risas, porque el castaño ha acabado con una nariz y bigotes de gato pintados por el rizado. Y tal vez todo se siente demasiado etéreo y onírico para estar pasando, y es también dulce, como sus besos y la bebida que comparten, y Harry ese día decide que quiere conocer España.
Y más tarde están mirando una película, solo porque Louis insistió en hacerlo. Un hombre de bigote presiona piernas con deseo mientras ellos están acurrucados, besos cortos van y vienen y el sol del atardecer les molesta con pequeños brillos colándose en la tela de la ventana. Como no podía ser de otra manera, el mayor es fanático de las películas de culto, y esta ha cautivado a Harry.
"El mundo está cambiando, la música está cambiando, las drogas están cambiando, incluso los hombres y mujeres están cambiando" el suspiro del rizado escapa mientras mira la película, concentrado. Su rostro contra el pecho del mayor, respira tranquilo. "dentro de mil años no habrán más hombres ni mujeres, solo personas"
¿Es la escena fuerte? ¿Es la escena relevante, siquiera? Claramente, para Harry lo es.
"¿Todo en orden?" Tiene que preguntarle Louis cuando lo ve fruncir el ceño, enojándose con el personaje que acaba de dejar al otro cuando están cerca de consumar el acto sexual.
"¡Es un marica!" Escupe, irguiéndose. "¡Es un jodido marica y no quiere aceptarlo! Era un hombre de aquí hasta China, joder, no puede vivir con eso. No puede vivir con ser tal vez un poco gay" se queja, enojado, y el mayor lo abraza por los hombros, respirando tranquilo contra él.
"Lo es, amor. Pero la gente es así" murmura, y es jodidamente irónico para Harry, porque el lo sabe tal vez mejor que nadie. Sabe que tan cruel puede llegar a ser la gente. Sabe de maravilla que la gente es mala por naturaleza, y puede que eso es lo único en lo que quiere pensar algunas veces, alejándose de la especie un poco más.
Así que quitan la película y finalizan el día entre besos y risas, y las manos de Louis tomando las de Harry e intentando dar pinceladas perfectas sobre las uñas del rizado.
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Andar por el lado salvaje |L.S.|
General Fiction{anteriormente, el nombre de la historia era Walk On The Wild Side} Louis es fanático de The Velvet Underground, y Harry tiene esa voz que sonaría demasiado bien cantando cualquier canción interpretada por Lou Reed. Harry a veces olvida la diferen...