Caótico

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No quiero que sepan mis secretos

No quiero que sepan la forma en que te amaba

No creo que lo entenderían

No creo que me acepten.

Caótico.

Era la única palabra que le venía a la mente en ese instante, no era de los que iban a grandes fiestas y si lo hacía prefería ir con personas que conocía en realidad, para evitar el tener que fingir interés en personas que probablemente al despertar con dolor de cabeza por la resaca, ni recordarían que habían hablado con él.

Había aceptado ir ahí con él solo porque quería salir de la casa y últimamente cuando quería salir con Jonas, él proponía llevar a Eva, lo que no era malo, solo incomodo, ellos dos estaban intentando ser amigos y era extraño verlos hablar sobre chicas con las que el castaño había estado saliendo o coqueteando, ellos parecían tomarlo con calma, pero estar ahí resultaba raro, así que había optado por salir con él solo cuando iban con los chicos, la única razón era que al salir de su casa, donde sus padres estaban en medio de peleas silenciosas al sentarse para evitar que él los viera pelear realmente, no quería entrar a otra situación incómoda.

Chris no era precisamente su amigo, habían salido un par de veces en las últimas semanas y resultaba divertido en ocasiones, le hacía olvidarse momentáneamente de la situación de sus padres.

Sin embargo, seguía sin estar acostumbrado a la locura de una fiesta de los chicos del buss, era una total histeria, no se parecía en nada a las habituales fiestas organizadas por las personas de su grupo, a veces iniciaban en el buss y parecía que serían menos personas que la última vez, pero conforme avanzaba la noche más y más chicas entraban al lugar, hasta el punto en que era difícil moverse.

Había pasado la ultima hora hablando con una chica castaña que estaba bastante borracha como para ignorar el hecho de que era el único ahí sin una de esas chamarras con el nombre del buss, era linda, sonriente y al principio parecía bastante lista, aunque ahora con tanto alcohol en su sistema comenzaba a murmurar incoherencias, así que simplemente sonreía y asentía a aquello que la chica decía.

Mientras daba un último trago a la cerveza en su mano y miraba a la chica con algo de indiferencia, el responsable de haberlo llevado se sentó a su lado, con la mirada curiosa que ponía cuando el alcohol comenzaba a hacer mella en él y sonriendo de lado.

―Alex, Adam está buscándote. ―exclamó mirando a la chica con una sonrisa, suponía que Adam era quien la había invitado a unirse al buss aquella noche y ella había terminado perdida entre tanto alboroto.

―Debería buscarlo ¿quién es Adam? ―preguntó la castaña confundida a lo que el rubio solo puso los ojos en blanco mientras Chris le señalaba al chico que estaba bailando y bebiendo con el resto. Alex se levantó para ir a buscarle, olvidando por completo que habían estado hablando por casi una hora.

―Al menos deberías fingir mejor que eso. No todas las chicas están tan ebrias para creer que estás mínimamente interesado. Quizás es por eso que todos creen que eres gay, aunque también eres apático con los chicos, quizás eres de esas personas que no sientes deseos sexuales. ―murmuró el castaño que aun con todo el alcohol en su sistema, podía hablar perfectamente e incluso hilar toda esa línea de pensamiento. ― ¿Sabes cómo se llaman?

―No. ―murmuró dando otro sorbo a su cerveza antes de notar que la botella estaba vacía, quería volver a casa, suponía que sus padres ya estarían durmiendo así que evitaría totalmente sus problemas.

Dirty little secretDonde viven las historias. Descúbrelo ahora