Miras.

La vida es injusta.

A veces no sabemos porque la vida nos pone en diferentes situaciones.
No sabemos porque tenemos que ponernos en la piel de un personaje para encajar.
No sabemos porque le hacemos la vida imposible a otro ser que no nos ha hecho nada a nosotros.
No sabemos porque a veces la vida intenta hacernos quedar como tontos.
Ni porque otras veces intenta tratarnos como niños.
No sabemos porque nos coloca en situaciones en las que nos alejamos de alguien especial.
Ni porque tiene que torturarnos, y no llevarse a esa persona de una vez por todas.

La vida es injusta. Es injusto que no ser ella sea su única forma de hacerse respetar.
Es injusto que se haya propuesto que la amaran, sin importar a quiénes tenía que lastimar.
Es injusto que haya nacido con una etiqueta que no podrán quitarle nunca.
Es injusto ser sumiso de tu propia vida.
Es injusto que llore y me preocupe todos los días que no te veo.
Es injusto que te estén arrebatando el amor poco a poco.
Es injusto que no puedas llorarlo ni gritarlo.
Es injusto que lo susurren con tonos de pena fingida.
Es injusto no tener el valor para decirles a todos en la cara.