parte 4

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Otro día, me desperté temprano, demasiado para mi gusto, ya que Sherlock no paraba de tocar el violín. Me levanté, me cambié y me dirigí a la sala.

-¿Qué diablos pasa Sherlock? Son las cuatro de la mañana, por el amor de dios.

-Disculpa, John. -dijo dejando de tocar y mirando a la ventana.

¿Acaso Sherlock se había disculpado? ¿Sólo por tocar el violín? Ok, eso si me  preocupaba.

-¿Qué dijiste?

-Disculpa, John.

-Bueno Sherlock ¿Qué te pasa?- dije mientras me senté en el sillón.

-¿Por qué debería pasarme algo?

-Tú nunca te disculpas, ni aunque mates a alguien, además son las cuatro de la mañana y estas tocando el violín, solo haces eso cuando te pasa algo o necesitas pensar, pero no tienes caso asi que dime ¿Qué te sucede?- lo miré fijamente.

-creí que el que deducía era yo. -dijo sonriendo muy suavemente.

-lo eres, yo solo lo hago contigo.- en ese momento mis mejillas se tornaron rojas, pudo parecer con doble sentido esa frase pero creanme que no es así.

-em.. bueno yo... yo solo necesitaba pensar.

-¿En qué?

-En... los sentimientos, bien todavía no entiendo de eso, pero creo que es así.

-¿Sentimientos? Sherlock me estas preocupando.- esperen, necesitaba recalcular esa información, ¿dijo sentimientos? eso si que es raro, siempre sale con su "error humano" cuando hablamos de los sentimientos.

-bueno, John, me lo estás haciendo más difícil de lo que es, creo que me gusta alguien ¿si? yo solo no sé.

En ese momento quede en shock, no solo se abría conmigo, sino que le gustaba alguien, no se veía con nadie, a menos que yo sepa, me dio cierta tristeza, mezclada con enojo y envidia de quien sea esa persona, lograr que a Sherlock le pase eso no es fácil.

-Tú... ¿te has enamorado? ¿De quién?

-ay vamos John, no creo que sea amor, solo digo que me da algo de curiosidad, no suelo sentir estas cosas, pero esa persona realmente hace cambiar mis pensamientos.

-¿vas a seguir hablando o me vas a decir de quien se trata?

-no creo que quieras escucharlo. -dijo y se dirigió hacia la cocina.

-si pregunto es por algo, Sherlock. -me levanté y lo seguí.

-no hagas de las cosas tanto escándalo.

-disculpame por tratar de demostrar mi afecto.- y otra vez las mejillas rojas.

-¿Qué?

-q..que trato de entablar una conversación en la que por fin me cuentes sobre tu vida, o lo que te pasa, Sherlock.

Sherlock agarró su abrigo y su bufanda, se los colocó y estaba por salir cuando lo interrumpí.

-¿te vas a escapar como siempre?- sentí mi enojo, sentí rabia a que siempre escape de los temas serios, bueno, al menos serios para mí.

-tú, eres la persona, John.- cerró la puerta y se fue.

Intenté seguirlo, pero fue inútil, me senté en mi sillon ¿qué acababa de pasar? me dijo que le gustaba ok, no se como me sentía, felíz, confundido, era una mezcla de emociones y para colmo se había ido y no podía preguntarle nada.

×One more miracle, Sherlock×Donde viven las historias. Descúbrelo ahora