16.-El chico del monopatín

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Narra Emma

Me despierto al oír un ruido que viene de la habitación de al lado, y veo que Oliver no está. Se ha debido de despertar antes. Me levanto para investigar que ha sido ese ruido, pero nada mas entrar al córtex veo a Barry recogiendo un montón de cristales del suelo con au supervelocidad.

-¿Pero qué has hecho?- le pregunto frotandome los ojos.

-Siento haberte despertado, Emma. Es que por la mañana soy un poco torpe.-suelta una risa nerviosa.

-Tranquilo, Barr, me habría despertado tarde o temprano.- Barry sonríe y me mira- ¿Por qué me miras así?

-Nadie me había llamado nunca "Barr".

-Pues acostúmbrate, porque siempre llamo a la gente por diminutivos.- desvío la mirada al reloj que hay en la mesa. Las 08:50- Mierda...

-¿Qué pasa?- pregunta Barry extrañado

-Que voy a llegar tarde, eso pasa.- me meto corriendo al cuarto y abro el armario en el que tenia ropa de repuesto. Me pongo esto mientras Barry me habla a través de la puerta:

-¿Seguro que estás bien?-pregunta Barry desde la otra habitación- A lo mejor deberías descansar

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-¿Seguro que estás bien?-pregunta Barry desde la otra habitación- A lo mejor deberías descansar...

Abro la puerta ya cambiada y me dirijo al baño.

-No intentes persuadirme de ir a trabajar, es un guerra que ya has perdido- digo justo antes de hacerme la coleta alta y colocarme mis guantes y mi gorra.- Y... ¿no se supone que tu también tienes que ir a trabajar?¿Qué estás haciendo aqui?

-Suelo pasarme por S.T.A.R.Labs antes de ir a trabajar. Y hablando de lo cual...- ahora es él quien mira el reloj. 09:06- Sube, que ya llegamos tarde.

Cojo la mochila con el móvil, el portátil y el monedero y me subo a su espalda. Cierro los ojos, y a lo que los abro estamos en el laboratorio.

-Wow- digo riendome y bajando de su espalda, justo antes de darle la vuelta a mi gorra.

-¿Te ha gustado, eh?-dice Barry riendose también.

-¡Y a quien no le gustaría experimentar uno de los hechos que más desconciertan a la humanidad, como el hecho de moverse a la velocidad de la luz!- digo cada vez mas emocionada.

-¿Qué te pasa Emma? Se te oye desde el pasillo- pregunta Joe entrando en el laboratorio con un informe en la mano.

-Barry me ha traído corriendo y ha sido...¡WOW!-digo emocionandome otra vez.

-Bueno, pues deja que te emocione un poco más-dice riéndose y entregandome el informe- Tu primer caso oficial, y tu mesa esta junto a la del detective Andrews, será tu compañero.

-¿¡Tengo mi propia mesa!?- pregunto soltando un gritito.

-Enhorabuena, Emma- dice Barry sonriendo.

-Me voy ahora mismo a empezar con este caso- digo antes de salir corriendo del laboratorio emocionada.

Nada más bajar las escaleras veo a lo lejos la mesa de Andrews junto a una vacía y despejada, excepto por una pequeña placa en la que pone "Detective Emma Nicols". Me acerco a mi nueva mesa y me siento dejando el informe sobre esta, pero mi mirada va hacia el chico de mi edad de que está sentado en la silla del detective Andrews, que no deja de mirarme. Tiene el pelo castaño y corto, los ojos castaños, y su brazo derecho está escayolado.

-Hola, ¿quién eres?- pregunta el chico.

La senalo la placa con mi nombre y él se ríe.

-Ya claro, y yo soy el detective Andrews- contesta señalando la placa con dicho nombre. Yo sonrío perversamente y me giro hacia él.

-No. El detective Jack Andrws es tu padre- veo que se mueve nervioso en su silla pero no despega su vista de mí- Supongo que le has acompañado ya que faltarás unas tres semanas aproximadamente debido a eso-señalo su brazo escayolado con la cabeza- Por cierto, deberías tener más cuidado con el monopatín.

-Ya me advirtieron que eras buena- dice una voz a mi espalda, y al girarme veo que es el detective Andrews.- Pero esto no lo había visto nunca.

-Solo soy observadora, y se me da bien el lenguaje corporal- le respondo- Joe me ha dicho que vamos a ser compañeros.

-Así es, y me parece que contigo los interrogatorios serán mucho mas fáciles-dice riendose- Eso sin decir que has sacado un 6 en el entrenamienyo con Eddie. Yo solo saqué un 4- dice riéndose de nuevo, y yo hago lo mismo- En fin, ¿has visto a Allen? Necesito que me analice unas pruebas.

-Está en su laboratorio-le contesto.

-Gracias, detective Nicols- dice sonriendo y recalcando lo último, antes de dirigirse al laboratorio. Yo me siento y miro al chico que sigue mirandome.

-Entonces, ¿eres detective?-pregunta atónito.

-Si, y la compañera de tu padre, para ser más exactos. Pero por favor, no me preguntes como es que a mi corta edad, puedo ser detective, porque como me lo pregunte una sola persona más le tiro por esa ventana.- digo riendome y viendo como él hace lo mismo.

-¿Pero como has sabido todo lo que has dicho sobre mí? Y por favor, no me digas que me has estado investigando por que te tiraré por esa ventana- dice repitiéndome, y nos volvemos a reír.

-En realidas no me ha hecho falta. Tus rasgos son muy similares a los del detective Andrews y al estar en su mesa he sabido que eras su hijo. Y esa escayola está libre de firmas o de los dibujos propios de un adolescente, por lo que he supuesto que te la habrían puesto hoy y que por consiguiente tienes dos semanas con ella puesta. Y como la llevas en el brazo derecho no podrías escribir, por lo que faltaras al instituto.

-Increible...-dice sonriendo- Espera... ¿y lo del monopatín como lo has sabido?

-Tus vaqueros. Por mucho que se laven es imposible quitarles las marcas de gravilla de las caídas con el monopatín.- va a hablar pero antes de que lo haga respondo a lo que sé que iba a decir.- Y se que son caídas de monopatín, porque las marcas están en las rodillas, mientras que si te caes de una bici las marcas quedan a los lados.

-¿Y cómo sabes tanto de caidas de monopatín?- pregunta intrigado.

-Una vez intenté aprender. Pero dejemoslo en que el monopatín no es lo mío- vuelvo a reírme y el hace lo mismo.

-Si quieres podría enseñarte- dice sonriendo.

-¿Podrías hscerlo con una escayola?- pregunto levantando una ceja.

-Así de buen profesor soy- dice riéndose.

-Está bien, pero no prometo que aprenda rápido...-dejo la frase amedias ya que no se su nombre.

-Bellamy, y creo que mi apellido ya te lo sabes.-dice tendiendome la mano.

-Pues encantada, Bellamy, mi nombre es Emma, y creo que tu también te sabes mi apellido- respondo dandole la mano.

-Bueno, será mejor que te deje trabajar- dice levantandose de la silla y llendo a la salida, pero retrocede unos pasos y se gira hacia mi- ¿A qué hora tienes el descanso de la comida?

-A la 13:30, y solo trabajo por la mañana, por la tarde hago... unas prácticas en S.T.A.R.Labs.-digo rápidamente sin tiempo de pensar otra excusa, aunque técnicamente si que es cierto lo que he dicho- ¿Por qué?

-Era por si querías ir a comer al Big Belly Burger y después nos vamos al parque a ver que tal eres con el monopatín- dice un poco... ¿nervioso?.

-Amm... Claro, será divertido.- respondo.

-Genial, pues me pasaré por aquí a la 13:30- dice, y se va hacia el ascensor.

Sonrío ante lo que acaba de pasar, y miro el informe, antes de abrirlo y empezar con mi primer caso.

(THE FLASH) Ya no seré una niña 1#Donde viven las historias. Descúbrelo ahora