(THE FLASH) Ya no seré una niña 1#

28.-Fuerza Vs Agilidad

Narra Emma

Me puse la alarma a las 07:00 para despertarme pronto y poder salir a correr. Todavía no conozco Starling City, así que tenía pensado entrenar y conocer la ciudad al mismo tiempo. Me puse ropa cómoda, y me hice una coleta alta. Cogí mi móvil y los auriculares, y me puse la gorra y los guantes. Salí de mi cuarto, y mientras bajaba las escaleras me encontré con Oliver.

-Buenos días, Ollie.

-Buenos días, Rach- me saludo con confusión- ¿Qué haces despierta tan temprano?

-Pues, todas las mañanas salgo a correr y a entrenar, así que iba a salir a correr un rato y a conocer Starling City.

-Yo iba a ir a entrenar ahora. ¿Te vienes conmigo?- me propone Oliver.

-Amm... claro, porque no.

20 minutos después...

-No estaba seguro de si me seguirías el ritmo- dice Oliver sonriendo mientras entramos en el Verdant- Ni siquiera me voy a molestar en preguntarte porque seguro que ya lo sabes, así que... Voy a enseñarte la cueva Arrow.

-¿Quieres que me haga la sorprendida?- le pregunto divirtiéndome- Porque se actuar de miedo- me río de mi misma y Oliver también.

Oliver se detiene frente a una pared que únicamente tiene un panel para introducir un código numérico. Él me da la espalda impidiendo que vea que números marca. Pero no cuenta con una cosa. Y es que soy muy buena. Veo el patrón que sigue al introducir el código, y como mueve el codo, ya sea hacia arriba o hacia abajo, y... Ya está. La puerta se abre, y yo ya me sé el código.

-Bienvenida a la cueva Arrow- él baja por las escaleras, pero yo me deslizo por la barandilla como si fuera un tobogán- Hay cosas que nunca cambian.- dice riéndose.

-Exacto. Sobretodo en lo que a mí se refiere.- digo riéndome de igual manera, mientras me acerco a la zona de entrenamiento.- Todo lo que tienes aquí para entrenar...

-¿Qué le pasa?- me pregunta como si se aburriese.

-Que todo se centra en la fuerza.

-¿Y que tiene eso de malo?- me pregunta.

-Que no te sirve de nada dar fuerte los puñetazos si tu contrincante es más ágil y rápido.- le digo con las manos en la cintura.

-En eso tengo que discrepar- dice con los brazos cruzados.

-¿En serio? Pues demuéstralo- le reto.

-¿En serio quieres que me enfrente a ti?- me pregunta como si fuese una idiotez.

-Si- le respondo rápidamente- Y puede que te lleves una sorpresa.

-Está bien...-acepta, y nada más hacerlo me intenta dar un puñetazo, pero como no quiere hacerme daño es flojo, y yo aprovecho para agacharme y girar, y mientras giro darle en el costado con el codo.

-Vamos, no seas flojo conmigo- le digo para animarle.

-Tu lo has querido- me contesta, y me empieza a lanzar puñetazos, pero yo los paro con los antebrazos. Tengo una idea, y para eso tengo que engañarle. Mientras paro sus puñetazos con los antebrazos, empiezo a retroceder unos metros, hasta que llego a una zona en la que sobre mí hay tuberías. La separación entre las tuberías es pequeña para Oliver, pero perfecta para mí. En uno de sus puñetazos, tras pararlo con el antebrazo, le doy una patada en el costado izquierdo. Eso le tambalea un poco hacia atrás, el tiempo suficiente para que yo me agarre a la tubería que hay sobre mí y salte a la siguiente. Me mantengo en equilibrio sobre la tubería cuya anchura es mas pequeña que mi pie, cuando veo que tengo a Ollie a unos metros.

Sin hacer el menor ruido, me quito la chaqueta y me la dejo en la mano. En menos de un segundo salto al suelo, me agacho, enrollo la chaqueta en su tobillo, y lo derribo. Haciéndole una llave en el cuello e inmovilizándole un brazo a la espalda y el otro en el pecho.

-Entonces... ¿gana la agilidad... o la fuerza?- le pregunto sin aliento.

-Eres buena. Eres ágil, silenciosa y rápida. Pero no me he ensañado a fondo, no quería hacerte daño.- dice cogiendo una toalla.

-Ya, ya... Tu sigue diciéndote eso.- me vuelvo a subir a las tuberías y empiezo a dar volteretas y acrobacias mientras mantengo el equilibrio.

10 minutos después se oye la puerta.

-¿Te vas a pegar ahí toda la mañana?- me pregunta Oliver.

-¿Con quien hablas Oliver?- pregunta Felicity. Entonces Oliver señala hacia arriba, y cuando la chica sube la vista me ve haciendo el pino en la tubería.- Vaya, hola. No esperaba conocerte así. Quiero decir, que estaba ansiosa por conocerte, pero no esperaba que estuvieses bocabajo.

-¿De qué hablas Felicity?- dice ahora Roy y cuando me ve exclama- Wow, menudo equilibrio.- nada más decir eso reconozco su voz. Es el que grito que Bellamy y yo bailásemos otra vez anoche en el Verdant. De un salto, bajo al suelo.

-Y menuda agilidad- añade Felicity.