El amor nunca avisa.
Esta es la historia de cómo Annabeth Chase, conoce y con el tiempo se va enamorando de Percy Jackson el cual es MUY diferente a los demás.
El sentimiento es recíproco, Percy también se está enamorando de Annabeth.
Ambos son de m...
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El sábado por la tarde Annabeth y Luke, fueron a la playa en el convertible de la rubia, Annabeth pensaba que olvidaría lo malo del día de ayer y pasaría un agradable rato con su novio. Cuando llegaron, aparcaron el auto en un pequeño estacionamiento, los ojos de Luke brillaron al ver las olas el chico no se hizo esperar y miró a su novia la cual asintió, Luke saco su tabla de surf y corrió al mar.
Annabeth salió del auto y se sentó en el estacionamiento el cual era como una plataforma, sus pies volaban y podía ver al mar en todo su esplendor, ella amaba el mar, había escuchado tantos poemas del mar que terminó enamorada de el. Su paz se vio interrumpida cuando alguien empezó a tararear I'm yours de Jason Mraz, Annabeth se obligó a mirar a su lado y ahí estaba la persona que menos quería ver.
-Percy- el chico detuvo su tarareo y volteó a todos lados- Soy yo Annabeth, estoy a tu derecha- la rubia se acercó más a él para que el chico deje de girar su cabeza.
-Annabeth, ¿Qué te trae por aquí?- dijo el chico con una sonrisa.
-Vine con mi novio, pero él está... surfeando.
- ¿Tú no surfeas?
-No, los deportes extremos no son mi fuerte- El chico rio, mientras Annabeth ya no se sentía incomoda junto a él, al contrario, era... tranquilizador- ¿Tú qué haces aquí?
El chico suspiró -Bueno yo... me gusta esto, el olor del mar, el sonido de las olas, el agua me hace sentir...
-Mas tranquilo- terminó Annabeth, y sonrío al ver que el chico asentía.
-Sí, mis padres creyeron que el venir aquí era buena idea, y lo fue.
Annabeth sonreía como niña en dulcería, ese chico Perseo tenia pensamientos muy profundos, no como todos los chicos de su edad pero aun así quería saber más de él.
-¿Por qué viniste aquí? es decir, a esta pequeña ciudad.
-Mis padres crecieron aquí, querían que yo cambiara de aires y me alegro el estar aquí es muy saludable para personas como yo.
-¿A qué te refieres?
-De donde vengo me molestaban con bromas, me maltrataban por el hecho de ser diferente- Percy agachó la cabeza, de pronto Annabeth se sintió mal por aquel chico, lo cual era raro porque ella nunca sentía empatía por nada ni nadie.
Annabeth quería calmarlo pero detrás de ellos sonó un claxon algo más agudo de lo normal.
-Ya vinieron por mí- dijo Percy, la rubia se levantó y lo ayudo a levantarse.
Annabeth vio el auto que había llegado un Prius plateado, al volante estaba una señora con cabello castaño, la madre de Percy supuso la rubia, estaba batallando con un niño como de 4 años también con cabello castaño en los asientos de atrás.
-Bueno, hasta el lunes Annabeth- se despidió Percy.
-Hasta el lunes Percy.
La madre de Percy salió del coche para llevar al chico al asiento del copiloto, la señora Jackson miro a Annabeth y le sonrió, la rubia regreso la sonrisa y los vio alejarse.
-¿Quién es esa chica Percy?
El chico sonrió -Una compañera de la escuela.
-Es muy bonita- sonrío Sally Jackson la madre más cariñosa, estricta, y comprensible del mundo, sus ojos azules brillaban al ver que Percy sonreía como nunca antes.
-No puedo saberlo- se carcajeó Percy, su madrerodó los ojos .
