Cap.2

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-Gracias, Noona -dijo Daehwi.

-Deberías decirme Unnie -contestó la chica.

-¡Noona! -dijo avergonzado.

Lo intentaron, realmente lo intentaron, pero fue inevitable. Las risas escandalosas de sus amigos se escucharon por todo el lugar.

-Realmente me gusta hacer esto -dijo la chica-. Luego podría seguir con Jihoonie, estoy segura de que ser vería...

-Gracias, Noona, pero no -dijo educadamente y con un poco de pánico en un su voz.

La chica solamente sonrió. Sabía que no lo hacía por gusto, pero era una buena forma de ver la otra cara de la moneda... y eso que esto apenas estaba empezando.

-Creo que deberían grabar esto también, el proceso de convertirse ya les hace anticipar lo que vendrá. Esto es algo por lo que tengo que pasar cada mañana -dijo dramáticamente.

Jinyoung encendió la cámara y comenzó a grabar el reflejo de Daehwi en el espejo. La chica volvió al ataque en cuanto la cámara estuvo lista.

-Pensar que cuidé a Dae desde que era un bebito y ahora lo estoy viendo convertirse en toda una señorita... -dijo mientras fingía secarse una inexistente lágrima.

-Tengo que asegurarme de editar eso... -lo último que quería era tener que pasar otra vergüenza si sus compañeros se enteraban de las miles de historias que su vecina, diez años mayor que él, tenía para contar de esos días cuando él era un bebé y ella lo cuidaba.

-Oh, el proceso de conversión se queda -dijo Guanlin seguro.

-Si... -dijo haciendo una mueca-. Pero igual editaré eso.

-Si encuentras la forma, puedes hacerlo, te doy permiso -dijo Jinyoung que seguía grabando.

Daehwi suspiró y cerró los ojos para que su vecina pudiera continuar con su tarea: maquillarlo para hacerlo ver como una chica. Porque finalmente, después de mucho debatir, llegaron a la concusión de que su experimento sería simplemente pasar una tarde como una chica. Nada del otro mundo, ni siquiera era un día. Después de clases debía maquillarse y cambiarse ropa para ir al centro de la ciudad. Eran hombres y tenían muchas preguntas. ¿Qué se sentía usar maquillaje, vestido y tacos? ¿Hacía alguna diferencia entre usar el metro o el bus siendo chica? ¿Algún tipo intentaría propasarse? ¿Podrían pasear tranquilamente por el centro de la ciudad, entrar a las tiendas de ropa y comprar algo para comer? ¿Algún chico intentaría coquetear? Cuando fue a casa de su vecina a pedirle ayuda para que lo maquillara, ella le dijo que no se preocupara por nada. Al otro día había llegado a su casa con una pila de ropa que ella había dejado de usar hace años porque ya no le quedaba, también había llevado varios zapatos y carteras que podía usar. Daehwi realmente esperaba que algo sucediera ese día, tenía esperanza en que al menos, terminaría con un insoportable dolor de pies, porque los zapatos no se veían nada cómodos. Si ese día terminaba sin resultados... iba a tener que volver a repetir la hazaña durante todo el sábado. Y volver a vestirse de mujer era lo que menos quería.

-Listo.

Daehwi abrió los ojos y al verse en el espejo, solo pudo abrir la boca sorprendido. El maquillaje apenas se notaba. Pero sus piel estaba más pálida y tersa, sus mejillas sobresalían con un leve rubor y sus pestañas se veían más largas. Los pequeños detalles solo acentuaban su belleza, una belleza femenina que no sabía que tenía. A través del espejo, también vio el rostro de sus amigos, sonreían como si de padres orgullosos se tratara.

-¿Y ahora qué? -dijo un poco preocupado.

-Esto -dijo entregándole un colgador de ropa con un delicado vestido acampanado de color rosa pálido-. Y esto -le entregó un par de zapatos blancos.

Daehwi fue hasta su habitación para cambiarse rápidamente de ropa. Ni siquiera se miró en el espejo, no quería. Luego fue hasta el living donde lo esperaban los demás.

-Ahora queda lo último.

Su vecina le entregó un par de delicados aros, una cadena y un anillo que él se puso sin dudar. A estas alturas estaba resignado y quería terminar de arreglarse rápido, salir rápido, hacer las cosas rápido, volver rápido y acabar con la tortura rápido.

-Y esto me lo conseguí en la peluquería de una amiga. Puedes usarla todo el tiempo que sea necesario.

-Espero que hoy sea la primera y última vez...

La chica sonrió y le acomodó la peluca tal y como su amiga se lo había enseñado. Luego sonrió orgullosa de su trabajo final.

-Daehwi-yah... realmente te ves hermosa.

-Noona, por favor -dijo cubriéndose la cara.

-Esta bien -dijo mientras tomaba su bolso y le entregaba una pequeña cartera al otro-. Usa esta, combina con lo que llevas -dijo sonriéndole-. Yo me tengo que ir. Mañana en la tarde-noche vendré para saber cómo te fue.

-Esta bien, Noona. Gracias -dijo sonriendo, después de todo, ella no tenía la culpa de lo que le estaba pasando.

Luego de despedir a la chica, fue Jihoon el que tomó la palabra.

-¿Te quieres ver en el espejo?

-No. Quiero hacer esto rápido y si me veo me voy a avergonzar y no creo que pueda salir siquiera de casa.

Se sorprendió de que sus amigos solo se miraran en silencio.

-¿Qué? -preguntó nervioso.

-Nada -contestó Guanlin.

-¿Entonces vamos? -preguntó Woojin.

-Si...

Lo último lo dijo con un suspiro resignado. Luego tomó el pequeño bolso, donde su Noona ya había metido un par de cosas: espejo, base, brillo labial, máscara de pestañas... y se preguntó para qué, ni siquiera sabía maquillarse. También se sorprendió de encontrar un pañuelo blanco pulcramente doblado y un sobre de pañuelos desechable. Revolvió y apareció un colet, un pinche y varios pinches negros. Y finalmente una libreta con un lápiz. Se preguntaba cuál era el fin de todo eso, ¿acaso una misión secreta? Él lo único que tenía que llevar era su billetera, su celular y las llaves, pero en ese pequeño bolso solo pudo meter las llaves. Sacó un par de billetes y los guardó en los bolsillos de afuera, igual que su celular. Tenía que llevarlos en caso de emergencia.

-Estoy listo -anunció.

-Estoy lista -le corrigió Jinyoung.

-Si, como sea -dijo rodando los ojos.

Los cinco chicos se miraron un momento para asegurarse de que efectivamente estaba todo listo.

-Ya saben el plan -dijo Jihoon-. Daehwi, tú solo preocúpate de hacer lo que tienes que hacer, no te preocupes de la grabación. Nosotros vamos a estar grabando a una distancia prudente. Woojin y yo iremos por delante de ti, mientras que Guanlin y Jinyoung grabarán desde atrás. No apaguen el GPS de sus celulares, así podemos saber dónde están en caso de que nos alejemos demasiado. ¿Todo bien?

Todos asintieron de acuerdo. Luego, Woojin y Jinyoung tomaron sus respectivos bolsos donde habían escondido las cámaras de video y salieron finalmente de casa, manteniendo la distancia, tal y como lo habían acordado.


Experimento social (DongHwi/BaekHwi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora