Experimento social (DongHwi/BaekHwi)

Cap.14

Daehwi suspiro antes de entrar al edificio del departamento de Dongho. Jihoon casi le había rogado que no fuera, pero aun así, él había ido.

El bailarín le había dicho que si Dongho quería que fuera como Dae, es porque "algo" había detrás de eso. Y Daehwi no era tonto, sabía a lo que se refería su amigo, pero no le importaba. Fuera cual fuera la razón por la que Dongho quería verlo como Dae, él iba a ir. No importa si era para descargar su ira o frustración, si era para humillarlo o menospreciarlo, incluso si era para vengarse por su mentira, él aun así iba a ir.

Él aun así había ido...

Llenó sus pulmones de aire una vez más y entonces entró al edificio. Cada paso que daba se sentía más pesado que el anterior, y al momento de estar frente a la puerta del departamento del mayor, parecía como si hubiese corrido una maratón. Se sentía mareado, que le faltaba el aire y que su corazón se le iba a salir, en pocas palabras, sentía como si se fuera a desmayar.

Tocó el timbre y esperó.

Y cuando Dongho abrió la puerta, Daehwi quiso salir corriendo.

Sentía que la mirada del mayor lo quemaba... y no de una buena forma. Bajó la vista, vio su vestido, sus piernas y sus zapatitos de señorita, se rascó el cuello incómodo, recordando que también la peluca estaba ahí. Estaba avergonzado de estar vestido así frente a Dongho cuando este ya sabía su verdadera identidad.

El mayor se hizo a un lado para permitirle la entrada, pero él no se atrevió a dar un solo paso al interior del departamento.

-Pasa...

Daehwi se sorprendió de escuchar ese tono. Era como si Dongho estuviera cansado, resignado, quizás. Él esperaba más un tono molesto, incluso furioso. Nada menos que eso. Pero aún así, a pesar de la sorpresa y el desconcierto, no se atrevió a levantar la cabeza para mirarlo. Simplemente entró en silencio.

-Toma asiento...

El menor eligió el sillón de tres cuerpos, sentándose con su mochila unisex sobre las piernas. Dongho tomó asiento en el sillón frente a él.

Y un silencio incómodo se hizo entre ambos.

Daehwi aún no se atrevía a levantar la cabeza, prácticamente sentía que tenía una piedra sobre su cuello. Y era completamente consciente de que era observado por el mayor, lo que lo hacía sentirse aún más incómodo y ansioso.

-¿Por qué me pediste que viniera? -el castaño rompió el silencio, sintiendo que si no lo hacía él, iban a estar en ese extraño ambiente tenso por horas.

-Había un par de cosas que quería saber.

-¿Y por qué así?

Dongho soltó una pequeña risa incómoda antes de hablar.

-Porque no podría tener esta conversación con un desconocido.

-Lo siento...

Daehwi sintió que se hacía aún más pequeño en su lugar. Entendía a qué se refería el mayor. Por qué empezó a hacerlo, por qué siguió haciéndolo... por qué no le dijo la verdad... esas eran cosas que no podía preguntarle a la cara a Daehwi como Daehwi, eran cosas que tenía que preguntarle a la persona que hizo todo eso: a Dae.

-¿Entonces? -preguntó el mayor.

-Lo siento -repitió, porque incluso si lo decía un millón de veces, sentía que no sería suficiente.

-Eso no responde preguntas, Dae.

El menor no supo cómo sentirse frente al hecho de que el mayor lo llamara así.

-Yo solo... -empezó Daehwi-. No lo sé.

No es que no lo supiera, es solo que no sabía cómo explicarlo, por dónde empezar. Es solo que sentía que, dijera lo que dijera, no sería suficiente para ser perdonado. Y si no iba a ser personado, no tenía sentido que abriera su corazón solo para sufrir un poco más.

-¿Qué es lo que no sabes? -preguntó el mayor-. Ciertamente hay cosas que aún desconoces -continuó ante el silencio contrario-, pero no creo que lo que hiciste y las consecuencias de eso esté entre esas cosas.

Daehwi no dijo nada, se sentía como un niño siendo regañado por una travesura. Aunque esto fuera mucho más que eso.

-¿Entonces? -Dongho repitió su pregunta.

-Yo... el día que nos conocimos... fue la primera vez que me vestí así -dijo mirándolo un segundo antes de desviar su mirada, suspiró antes de continuar-. Fue por la escuela, yo... no quería hacerlo, pero tenía que. Esperaba que esa fuera la primera y única vez... pero te conocí -hizo una pausa para llenar de aire sus pulmones-. Y tú me conociste así, como Dae. Y ni siquiera dudé en volver a vestirme de mujer para verte -hizo una larga pausa-. No sé exactamente cómo ni cuándo, pero de pronto, ésta rutina se volvió natural para mi. Ya sabes, vestirme de mujer y... todo eso.

Daehwi se quedó callado después de eso. Había mucho más por ser dicho, mucho más que él quería decir, pero no sabía cuándo sería demasiado para Dongho. Tenía que decir, al menos lo más importante, antes de que el mayor lo sacara de su departamento por todas sus frases... sinsentido.

-Sigo sin entender del todo por qué te vestiste de mujer la primera vez -ahora que tenía la historia a grandes rasgos, Dongho comenzó con su ataque.

-Un experimento.

Daehwi lo dijo como si nada, pero pudo sentir de forma automática el obvio cambio del estado de ánimo del contrario. Dongho se veía hecho una furia, aunque intentara mantenerlo dentro de él y el menor se dió cuenta de inmediato de que algo había hecho mal.

-¿Un experimento conmigo? -preguntó entre dientes.

-¡No, no no! -se apuró a responder mientras movía sus manos con desesperación, ahora entendía el enojo contrario-. La idea inicial de todo esto era experimentar lo que viven las mujeres día a día. La presión social por maquillarse, vestirse bien, no subir de peso... y soportar cosas como el acoso -dijo bajando la voz-. Tú lo viste. Muchos hombres... -se rascó el cuello incómodo ante lo que iba a decir- "coquetearon" conmigo antes, pero cuando estaba siendo obviamente acorralado por esos tipos, nadie, ni hombres ni mujeres, me ayudaron. Excepto tú.

Dongho se encontraba con el ceño fruncido, y Daehwi no sabía exactamente por qué de todo lo que había dicho se había molestado.

-¿Te "coquetearon"?

El mayor lo dijo con un extraño tono en su voz, y el castaño se preguntaba si acaso se estaba burlando de él.

-Bueno... -desvió la mirada, ya que estaba siendo sincero, lo iba a ser hasta el final-. Un chico me pidió mi número en una librería -dijo sintiéndose sonrojado.

-¿Se lo diste? -preguntó, lo vio negar, así que continuó-. ¿Por qué? -preguntó burlesco-. ¿No era acaso parte del experimento salir con un chico?

-¡No lo era! -dijo entendiendo que se refería a él.

-¿A no? -volvió a preguntar con ese molesto tono de burla.

Daehwi sentía que algo en su garganta le quemaba, y no sabía si eran las palabras o las lágrimas.

-¿Entonces qué hay de mi? -Dongho había cambiado completamente el tono, ahora estaba preocupantemente serio, incluso parecía molesto.

El castaño no lo dudó. Lo miró fijo mientras llenaba de aire sus pulmones. Y lo dijo.

-De ti me enamoré.

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Siento la tardanza, estuve con una gripe horrible y ni ganas de meterme al note. Bueno, aun sigo un poco enferma, pero espero que no me aleje mucho de mis historias.

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