Capítulo 18 - Primeros Indicios.

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Maia

— ¡Maldición! —me asome al borde del colchón al ver a Niall en el suelo sobando su cabeza.

—Buen día. —reí levemente, el me miró mal para luego cambiar su cara a una leve sonrisa. — cuidado con la calefacción. —Hablé entre risas.

—Ja Ja, que graciosa eres. —me miró desafiante y sacó su lengua.

— ¿Cómo te encuentras de tu resaca señor "me robo la plata que tenemos para sobrevivir y la gasto en alcohol"?

—Me duele la cabeza señorita obvia. —movió su cabeza de un lado al otro. —lamento la tontería, pero en mi defensa seguramente la necesitaba. Tanto aguantar tus caprichos me torturan.

—Anda que bien te gustan mis reproches. —Lo mire divertida.

— ¿Qué? —yo reí internamente y me levante del colchón.

—Nada. Voy a darme una ducha. —comencé a caminar con una sonrisa.

— ¡Hay que ahorrar agua! —Hablé levantándose de golpe.

—Oh no, no caeré en eso de nuevo. —Hablé encerrándome en el baño y cerrando con traba.

—Maldición. —Lo oí del otro lado y reí.

Luego de hacer mis necesidades y darme una ducha, salí fresca y lista para un nuevo día. Salí de la habitación y vi a Niall en la cocina comiendo un trozo de la pizza que había sobrado.

—Gran desayuno. —alce la ceja con sarcasmo.

—Solo es la masa. —habló con la boca llena, yo lo mire con desagrado y me serví un vaso con agua. — ¿Te encuentras bien? ¿Tienes hambre? —gire mi cuerpo hacia él y lo mire sin expresión alguna.

—Creo que es muy claro que si tengo hambre señor alcohol. —Lo mire de mala manera.

— ¡Hey! Ya te dije que lo siento. —yo suspire y rodé los ojos. —Solo quiero asegurarme de que el bebé esté bien.

—De acuerdo, necesitamos dinero para un desayuno digno.

—Cantaré por dinero. —Yo lo mire sorprendida. —Tengo muchas dotes además de ser hermoso.

—Guau, no eres para nada vanidoso. —Hablé con sarcasmo.

—Cuando uno es atractivo no es malo reconocerlo. No digo ser perfecto pero me acepto tal y como soy y no creo que sea algo malo. Reconozco mi belleza, así como reconozco que me vuelve loco verte semidesnuda por las noches. —hablo mordiendo su labio con una mirada pervertida sobre mí.

— ¿No te has hecho tu paja matutina Niall? —El negó pero río levemente.

—Sé que no nos agradamos, pero no estaríamos aquí si no me atrajeras físicamente. —se acercó a mí y me tomó de la cintura desprevenida. —Eres muy hermosa Maia y no necesito del alcohol para sentirme atraído hacia ti. Me excitas mucho...

—Niall... Mmm.... —No sabía qué hacer ni que decir, así que decidí dejarme llevar por mis primeros impulsos. Una cachetada y un empujón. —No soy tu jodida puta, que me haya acostado contigo no significa que me tendrás a tus pies. —Lo mire mal y el me miró sorprendido. Rápidamente la culpa me invadió. —Yo... Lo siento... No... No debí... Déjame ayudarte... —me quise acercar pero el retrocedió.

— ¿QUÉ DEMONIOS CON TUS CAMBIOS DE HUMOR? —Me hablo alterado. —Joder, ¿Por qué eres tan agresiva conmigo? —se alejó de mí y salió de la casa.

— ¡Niall! —quise seguirlo pero él ya se había ido. — ¡Maldición!

Me abrace a mí misma y comencé a sollozar, no entendía por qué había reaccionado de aquella manera, mi cordura y mi mente parecían estar en desacuerdo a lo que deseaba hacer.

(...)

—Y eso fue lo que pasó. —Mire a Harry con tristeza, él estaba atento a mi relato de lo sucedido con Niall.

—Son los primeros signos de que ambos terminaran juntos.

—Pero no quiero estar con él si voy a ser agresiva. —Hablé con preocupación. —No quiero que mi bebé esté en ese ámbito.

—No serás agresiva con él, eso fue un impulso de tu embarazo. Muy extraño y no lo justifica, pero fue una reacción que podrás controlar, tu misma aceptas que estuvo mal e intentaste arreglar las cosas. Maia, tú y Niall se quieren desde que comenzaron esta aventura, es imposible que no se atraigan estando juntos tanto tiempo. ¡Acaban de darse su primer beso luego de tanto tiempo! ¿Acaso le tienes miedo al amor? ¿Cuál es tu miedo linda? —tomo mis manos y yo suspire, las lágrimas se juntaban en mis ojos para rápidamente comenzar a salir.

—Tengo miedo de enamorarme y arruinarlo todo. —Lo mire a los ojos. —Niall me gusta mucho y me encantaría estar con él pero tengo mucho miedo Harry. ¿Qué tal si no me ama? ¿Qué tal si solo me quiere utilizar? ¿Qué si no resulta lo nuestro? No quiero arruinarle la vida a mi bebe por mi estúpido corazón. —Hablé entre lágrimas.

El me abrazó con fuerza y me acariciaba el cabello con delicadeza haciéndome sentir protegida. Me tomo de las mejillas y seco mis lágrimas con una leve sonrisa en sus labios.

—Hermosa, todos tenemos miedo al amor, pero debemos arriesgarnos. Si tu amor con el no funciona no importara, aprenderás lo que es amar, lo que es querer, lo que es que te rompan el corazón, pero seguirás adelante, tu bebé quiere que tú seas feliz. Y si Niall decide dejarlos y no verlos, él se lo perderá. Tu bebé no sufrirá, te tendrá a ti quien será la mejor mama del mundo. No necesitas de un hombre para criar a tu bebe Maia, date la oportunidad de equivocarte, date la oportunidad de sentir amor.

Yo asentí levemente y me aleje secando mis lágrimas.

— ¿Crees que el sienta lo mismo?

—Luego de escucharte decir lo que sucedió anoche no me cabe duda que ambos se atraen como dos imanes y que ese bebé tendrá una familia muy divertida. —Yo reí levemente y golpee su brazo con delicadeza.

—Tonto. —Ambos reímos y el me abrazo por los hombros.

—Todo estará bien, solo déjense llevar por su corazón y dejen que las cosas pasen. Estoy seguro que el destino no se equivoca.

—Eso espero... —Hablé con esperanzas.

(...)

Salí de la tienda junto a Harry y vi a Niall parado frente a nosotros con una bolsa y una flor en sus manos.
Mire a Harry intrigada y el me hizo señas para acercarme.

Camine hacia él y lo mire intrigada.

—Hola... 

Destiny © |njh|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora