CAPÍTULO 13: PERSEGUIR UN SUEÑO

426 37 0
                                    

CAPÍTULO 13: PERSEGUIR UN SUEÑO

Un mes de relación habían cumplido. Los dos eran muy felices juntos. Pasaban todo su tiempo libre en casa de Blaine porque allí podían estar solos. Había noches que Kurt se quedaba a dormir, pero habían tomado la decisión de esperar para entregarse por completo. Querían asegurarse de no utilizar al otro ni que el otro lo utilizase. No practicarían sexo, harían el amor. Sin embargo, había veces que les resultaba muy difícil y buscaban alternativas para saciar su deseo.

Era el mes de enero y los dos se encontraban ilusionados con el futuro que tenían por delante. Sin embargo, la felicidad no les iba a durar mucho, porque vino su primera discusión.

– Blaine, traigo maravillosas noticias.

– Dime.

– Quieren que sea el presentador de las noticias de la mañana en el canal NY1, sé que es un canal pequeño pero por algo se empieza. – Dijo Kurt totalmente ilusionado

– ¿Te mudarás a New York? – El moreno parecía disgustado.

– ¿Qué? Claro que me iré a New York.

– ¿Qué va a ser de nosotros?

– Tú vendrás conmigo.

– A ver si lo he entendido. Tú has conseguido el trabajo de tus sueños y yo me tengo que ir contigo y abandonar mis sueños.

– No... Tú puedes trabajar allí, como actor, cantante... como le prometiste a tu padre. Blaine, es una oportunidad para los dos.

– Mi oportunidad está aquí.

– ¿No me amas lo suficiente como para venir conmigo?

– ¿Y tú no me amas lo suficiente como para quedarte?

– Es una oportunidad única para mí.

– Y Roma también lo es para mí.

– ¿Por qué tengo que renunciar a mis sueños por ti?

– Ah, claro. Tu no renuncias a tus sueños por mí pero yo tengo que hacerlo por ti... – Blaine ya estaba enfadado.

– Me estás haciendo quedar como el malo...

– Por supuesto que no. Yo soy el egoísta aquí. – Dijo irónicamente.

– Tú tienes una oportunidad allí.

– Y tú tienes un trabajo aquí. Yo allí sólo tengo un espejismo que realmente me puede hacer mucho daño.

– Yo voy a ir a New York, tú verás lo que haces.

– Te deseo lo mejor... que tengas mucha suerte.

– Te esperaré en el aeropuerto. Si no vienes, lo nuestro habrá acabado.

Dos días después Kurt estaba en Fiumicino esperando que anunciaran su vuelo. Había facturado la maleta y esperaba a pasar el control de seguridad. No paraba de mirar a todos los lados, buscando una melena morena llena de gel. Pero por mucho que lo deseaba, no aparecía. Muy despacio fue hasta la puerta de embarque y se montó en el avión. Se fijaba en todos los pasajeros, pero ninguno era él. Cuando las puertas se cerraron, no pudo controlarlo más y se puso a llorar.

Por su parte, Blaine estaba tumbado en el sillón de su casa llorando. Había perdido a Kurt. Justo cuando volvía a creer en el amor. Así que decidió llamar a Sam, hacía mucho que no hablaban.

– ¿Qué pasa Bro?

– Necesito que me animes.

– ¿Qué te ha hecho Hummel?

– Le ofrecieron un buen trabajo en New York y se ha ido.

– ¿Por qué no viniste con él?

– Mi trabajo está aquí.

– Y tu vida aquí. A todos nos gustaría tenerte más cerca.

– Pronto me veréis. En dos meses voy allí.

– Por dos semanas. Eso no es suficiente.

– Pensé que no te caía bien Kurt.

– Tengo fuentes que me han dicho que ha cambiado.

– Tus fuentes son 'Cedes y Mike.

– ¿Cómo lo sabes? ¿Eres adivino?

– Britt me preguntó lo mismo hace tiempo...

– Entonces... ¿Lo eres o no?

– No.

– ¿Me explicas por qué sabías quien me lo dijo?

– Porque son los únicos que han estado aquí.

– ¿Y no pude comprobarlo yo en el funeral?

– Sabes de sobra que no...

– Es igual. – Lo interrumpió Sam – Aun no es tarde. Puedes volar en el siguiente avión y sorprenderlo en New York.

– Es tarde.

– Quizá no lo sea...

Ciudad Eterna, ¿Amor Eterno? (Klaine boyxboy)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora