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Teasing

Solo confiaba en una mujer para pedirle opinión, tenía que presentarse con una apariencia formal a la ceremonia y si le pedía ayuda a la entrenadora Hyuga lo mataria, asi que hizo una llamada y el timbre sonó 15 minutos después.

Su cabello ondeaba al viento y su sonrisa enorme se dibujaba mientras prácticamente se le lanzaba encima

- Tetsu- kun - gritó mientras lo abrazaba - ha pasado tanto tiempo, te he extrañado

- Momoi-san, nos vimos la semana pasada

- Aun así, te he extrañado - sonrió mientras se despegaba un poco de él - ahora veamos el traje

Era horrible. Azul marino con una corbata rosada y una camisa color turquesa. Momoi estalló en risas y su cuerpo se doblo en carcajadas. Kuroko no daba crédito a sus ojos, la mujer simplemente se lanzó a su cama y se reía sin parar señalando de vez en cuando su selección.

- Bueno...creo que ya es suficiente - dijo Tetsuya sentándose al filo de la cama

- En verdad no entiendo porque no me pediste que fuera contigo a comprarlo, tienes un pésimo gusto - se rió un poco - supongo que podemos hacer algunos cambios en la tienda

- No me gusta cuando te ries asi de mi Momoi-san - dijo serio mientras miraba el suelo

- Lo siento, no fue mi intención - lo rodeo con los brazos y Kuroko pudo sentir los pechos de Momoi apretándose contra su espalda y su cuerpo reacción - ¿Que debo hacer para que me perdones?

- Te vas a quedar muy quieta hasta que yo encuentre algo en tu cuerpo de lo cual burlarme...

La acostó sobre la cama y bajó el cierre de su chamarra, le quito las calcetas y descubrió un par de pies delgados, pequeños y para su desgracia perfectos. Las piernas eran largas, suaves, no tenían ni una cicatriz en las rodillas, los muslos, las caderas siendo ajustadas por unas bragas de encaje azul, el vientre blanco, la cintura estrecha. Acariciaba cada parte de Momoi mientras ella se dejaba hacer con los ojos cerrados, los brazos delgados, el cuello blanco.

- Sabía que no podías ser perfecta Momoi - san - dijo triunfante

- ¿Que? - abrio los ojos de golpe

Kuroko señaló las estrías que se dibujaban en lo senos de Momoi y esta abrió la boca para quejarse y se cubrió inmediatamente

- Oye, no es para tanto - le dijo Kuroko acariciando su cabeza - ya, ya

- Es que...aumente una talla y creo que...- se avergonzó de estarle contando esto al hombre que amaba pero - es que yo...

- No importa - se inclinó hacia su busto y le paso la lengua por uno de los pezones, la otra mano se ocupaba del otro seno y se ajustó a quedar entre sus piernas - solo voy a quedarme aquí, no haremos nada más ¿si?

- Ok - le dijo Momoi mientras acariciaba el cabello de Tetsuya

Le lamió los pezones y beso cada una de las estrías de sus senos, a excepción de esas marcas los senos de Momoi eran perfectos, buen tamaño, suaves, firmes, los pezones duros y rosados. Momoi gemía un poco y apretaba las piernas mientras Kuroko se acomodaba entre ellas.

- Sabes que no podemos...aún no - le dijo Kuroko al oído

- Lo se pero...- gimió Momoi y se mordió la lengua cuando sintió a Kuroko tomar su seno y empezar a chupar el pezón - cada vez es más difícil

Se quedó mirándola y acariciándola hasta que la sensación de calor en Momoi se desvaneció poco a poco, dirigió la mirada al traje colgado en la puerta.

- En verdad es horrible - dijo riendo - vamos a la tienda y veremos si lo podemos devolvelo

- Tienes un pésimo gusto en verdad - le dijo mientras se ajustaba el sostén - aunque definitivamente hay algo que puede salvarte

- ¿Que?

- Yo, yo seré tu heroína Tetsu- kun

- No lo creo, no puedes ni siquiera correr un kilómetro - un almohadazo aterrizó en su cara - eso duele

Momoi se levantó de la cama y le saco la lengua, en verdad era fácil convivir con esa mujer.