Anti Racismo

O8: Pesadillas

—¡Oh gay dios!— Bryce se tomo la cabeza —, ¡estas dentro, por la virgen de las perras!

—Bryce— lo regañé entre dientes —, deja tu lenguaje de diva para cuando estemos solas.

Me miro indignado.

—¿Me estás desaprobando?— sé que esta bromeando, él rió y me abrazó con mucha efusión —. Felicidades cariño.

Sonreí escondiendo mi cabeza en su pecho.

Quedé dentro...

***

—¿Qué, qué cúa'?

Rodé los ojos por milésima vez.
—Estoy. Dentro. De. Un. Estelar. En. Televisión, ¿es tan difícil entender?— dije ya fastidiada. Escuche su risa silenciosa al otro lado de la linea.

—Lo sé, lo sé... solo quería hacerte enfadar.

—Que buena mamá eres— dije mirando mis uñas - debería usar protectores, después de la ultima pelea algunas quedaron como mierda de perro aplastada -.

—No te molesto mas, tu padre y yo tenemos algunos trámites que hacer— asentí como si pudiese mirarme, escuché como suspiraba melancólica —. Te extraño.

—Y yo a ti ma'— sonreí —, a-adiós.

Presioné el botón rojo que significa cortar. Mordí mi labio inferior y cerré los ojos fuertemente, mi voz se había quebrado, espero que no lo notara mi madre.

Siempre he estado con mis papás, en las buenas, malas y muy malas. En cada momento de mi vida, así que me vuelve muy sentimental alejarme de ellos, pero también es bueno; tengo un poco más de libertad.

Bryce venía a acompañarme, debería haber llegado hace cinco minutos -lo vi en mi teléfono -, así que lo esperé en el sofá. De a poco mis ojos se fueron cerrando, hasta quedar en un profundo sueño.

Solo veía paredes negras, sentía aire en mi cabeza, un escalofrío me recorrió la columna vertebral. Pude divisar en una esquina a alguien con el cabello con tubos.

Mamá.

Corrí a la esquina de la habitación, al llegar pude ver bien a mi mamá.

—Cl... ¿Clarisse?— tenía la cabeza agachada, sus tubos tapando su rostro. Me acerqué dudosa, con mi dedo tembloroso toqué su hombro. Esta lentamente levanto su cabeza.

Por la santa mierda.

No tenía ojos, los remplazaban dos equis, lo más raro es que lloraba sangre. Rasguños se veían en todas partes, de apoco mi madre se fue esfumando como ceniza, primero los pies hasta llegar a su cabeza.

—Muerte— fue no último que alcanzó a susurrar antes de desaparecer.

Ruido. Destellos blancos y negros. Sirenas de ambulancia.

Silencio...

El sonido metálico de las llaves chocando contra la cerradura me pusieron alerta. Pasé una mano por mi rostro mientras que con la otra tomaba mi móvil y miraba la hora.

Está 40 minutos tarde.

Bufé exasperada.

—¡Llegué...!— gritó entrando, me levanté del sofá y lo miré enfadada.

—¿Sabes qué hora es?

—¡Es hora de sushi!— lo miré con una ceja enarcada —. Solo... debo pedirlos.

Reí y esperamos la comida.

***

HI! CAPÍTULO CORTO!

Necesito inspiración, o sea, se me ocurren demasiadas escenas de tensión pero... No sé como llegar a esas escenas

¿Ideas? Diganme pls 7u7

Eso.

√Sinon