MEMORIAS DE UN VAMPIRO *INMORTAL*

COMO SI FUÉRAMOS UNO MISMO.

31 de agosto de 1888
Querido Diario:
Hoy será una linda noche.

La noche fría y oscura se extiende por todo Londres. Una bruma densa que envuelve el ambiente, le da un toque de película de terror a todo esto. La luna llena se extiende en lo más alto y despejado del cielo estrellado.
Luna llena.
Avanzamos sigilosamente, cubriéndonos con el follaje del bosque sombrío, sin respirar, cuidando cada uno de nuestros movimientos.
Una rama cruje a mis espaldas y volteo rápidamente, en guardia. Uno de los vampiros que va tras de mí se encoje de hombros en señal de disculpa y yo lo fulmino con la mirada.
Más adelante, Cassian dirige al grupo.

El no posee un poder especial como Justin y como yo, pero si tiene otro talento: rastrear hombres lobo y vampiros. Por eso es tan importante para el grupo. Además de que tiene muy bien controlados a los que llamamos los "hanters"
Un "hanter" es un vampiro que no es completamente vampiro, pues no es inmortal como nosotros. Su parte humana sigue ahí, pues a pesar de que los mordieron, nadie les dio sangre de vampiro para completar su transformación. Se quedaron estancados en el proceso. Lo que los hace todavía más interesantes... pero al mismo tiempo, salvajes y peligrosos.
También son los más vulnerables, pues a pesar de tener una fuerza y agilidad incluso mayor que los vampiros, su piel y cuerpo sigue siendo igual de frágil que el de un humano.
Sin embargo, sin siempre los que van hasta adelante. Como dijo Justin hace tiempo... (y por más desagradable que parezca) es como el ajedrez, las piezas más débiles (los peones) se encargan de cuidar a las piezas más fuertes.

A mi punto de vista, yo me encuentro entre las piezas tácticas. Justo en medio. A las orillas, están Christian y los demás chicos, (menos Ryan y Elizabeth, que son "completamente pacifistas") casi al final está Justin.
Cassian levanta la mirada hacia el cielo... sus ojos como la noche líquida destellan entre rojo y púrpura. Lo he visto tantas veces hacer eso, que sé perfectamente que está haciendo su trabajo como cazador.
Yo también puedo olerlos, percibirlos, al igual que todos los demás, pero con más debilidad. Arrugo la nariz ante el característico aroma a azufre.
Unos segundos después, inhala profundamente y da un pequeño silbido, a penas perceptible...
La señal de que el juego ha comenzado.

Cassian desaparece inmediatamente del frente y de un momento a otro ya está a mi lado, en guardia. Se escuchan las ramas y las hojas de los árboles crujir justo cuando de los cuatro puntos cardinales, aparece una horda de hombres lobo, que al oler la sangre humana que aún tienen los hanters, se abalanzan sobre ellos.
Por un momento, solo es una confusión de enormes bestias mitológicas luchando con lo que parecen ser chicos comunes y corrientes.
Pero claro que no lo son.

Algunos logran esquivarlos, enfrentarlos y hasta matar a algunos, pero la mayoría, no corren con mucha suerte. Solo son una distracción.
Casi pegada a mis espaldas, Valerie alza la mano y todos los demás vampiros que estamos observando, pasamos a formar parte de la encarnizada batalla.
La lucha por la supervivencia... una lucha ancestral entre los dos enemigos mitológicos que se ha efectuado desde quien sabe cuantos siglos atrás. Por demostrar quién es el más fuerte. Para aniquilarse el uno al otro.
Hombres lobo, vampiros y hanters vuelan por los aires. Por todos lados se escuchan gritos, gruñidos, piel desgarrándose y sangre chorreando.

Es absolutamente raro, pero esto es nuestra diversión. Aniquilar al enemigo ancestral. Se ha convertido en una especie de "tradición" entre nosotros, salir a darles caza en grupo a los hombres lobo la primera noche de luna llena, pues es cuando están más irritables y salvajes. Participo activamente en todo aquello. Escalo árboles, lucho con las bestias, logro matar a algunos.
A lo lejos, veo que Valerie hace lo mismo.
Aunque no me guste admitirlo, es buena, muy buena. Puede derribar a 2 de ellos en menos de un minuto.
Hm... creo que yo también puedo hacer eso.
Supongo que esto para nosotros es más que un juego o una forma de divertirse. También es la forma de demostrar quién es el mejor y que los vampiros recién convertidos practiquen sus tácticas de ataque.

De una patada voladora mando a un hombre lobo a caer a un barranco.
Un grito me distrae.

Volteo rápidamente y encuentro a Natasha cerca de una enorme bestia que la tiene sujeta del cuello contra el suelo. Está a punto de darle un zarpazo en el rostro o algo peor...
Maldigo por debajo y como si fuera un látigo, mi poder logra quitarle a la cosa esa de encima, antes de que sea tarde. Al mismo tiempo, Chaz se abalanza sobre su cuello y lo muerde.
Ante esto, mi nariz se envuelve de nuevo en el olor a azufre y sé que vienen más, muchos más de los que calculamos.
No podremos con todos.

En eso estaba pensando, cuando siento unos dedos fríos tomar mi mano. Sé perfectamente quién es antes de verlo.
Llegó la hora.
Olas de incesante poder bañan por completo a las bestias que surgen de lo más recóndito del bosque.
Lo hemos practicado demasiadas veces. El poder de Justin y el mío se funden en uno solo. Como si fuéramos uno mismo. Rayos de en forma de neblina negra y blanca atacan por todas partes, cegando a amigos y enemigos por igual. Algunos lobos se elevan por los aires, retorciéndose de dolor y otros simplemente caen muertos ante el contacto fantasmal.
Pronto, no queda ninguno más.

La niebla se dispersa y el juego termina.

-fin del juego-anuncia Justin, con voz autoritaria.
Los vampiros que quedan se incorporan, sacuden la tierra de sus ropas negras y miran a su alrededor. Hay cuerpos por todos lados. La mayoría son de hombres lobo, que, al morir, regresan a su estado humano. Algunos otros son de algún descuidado que no puso suficiente atención.

-limpien esto-señala Justin-quémenlos, no queremos que se haga una infección.
Suelto nuestros dedos entrelazados y voy a donde Chaz examina minuciosamente a Natasha.
-¿estás bien?-pregunto.
Ella solo hace una mueca de dolor, apuntando con la barbilla a su brazo, que tiene un enorme y grueso rasguño desde el hombro hasta la muñeca.
-gracias por ayudarme-responde-por fortuna solo fue un rasguño.
-¡¿UN RASGUÑO?! ¡UN RASGUÑO! ¡ESTUVIERON A PUNTO DE MATARTE Y TU DICIENDO QUE FUE UN RASGUÑO!
Explota Chaz. Sus ojos arden de furia.
-ya, ya, no seas exagerado.
Le acaricia el cabello.
Chaz suspira e inesperadamente la carga en sus brazos, como un bebé.
-regresemos al castillo a que te revise Ryan.

Con un Chaz bastante gruñón , regresamos a la casa. Justin también regresa con nosotros.
A penas estamos acercándonos a la puerta, cuando Ryan ya está esperándonos, con aspecto preocupado.
-Ryan, necesito que...-empieza a decir Chaz, todavía no Natasha en brazos.
-espera Chaz. Hay algo importante.
Su mirada se dirige inmediatamente a Justin.
Este arquea las cejas.
-¿qué pasa?
-asesinaron a una prostituta en la ciudad.
-bah, ¿y eso qué?-bufa Chaz.
-no solo eso... le... am... bueno, le mutilaron el abdomen, estrangularon y degollaron.

SPOILER
"Lo que no sabía, es que esa noche y gracias a él, comenzaría a enterarme de cosas que jamás imaginé"