10

32 6 3
                                    

Evimeria. Zona Norte.

Había oído pasos,y no tuve otra opción que preocuparme.Tuve que mirar a Jane para confirmar que no estaba loco,que realmente había oído unos pasos.Mi compañera me asintió,y tras mirar la puerta,susurre.

-Avisa a los otros dos.Ire a ver quien es.-musite en voz baja,levantandome y acercándome a la puerta.Si era verdad que los pasos no eran dentro,si no fuera.Pero aún así en esta localización pocas veces alguien merodea cerca de otros hogares.O bien es que acaban de llegar,como ocurrió con Benjamin y Lydia,o bien porque buscan robar o timar,y os aseguro que lo último pocas veces dejo que pase.
Sigiloso,salí a la puerta,poniéndome en una de las paredes. Me asusté,y bastante.Un hombre forzudo y notablemente peligroso merodeaba cerca de aquí.Vestia de negro,con un pinganillo al parecer.Llevaba una americana,una camisa,una corbata y unos mocasines a juego,todo caro al parecer.Trague saliva,y tras rezar por no morir,apreté mi puño,sintiendo aquella dolorosa tensión bajar a mi puño.Aquel problema ya lo llevaba encima desde que tenía unos tristes 6 años,donde se manifestó mientras jugaba.Le lance una mirada a mi puño,viendo como estaba totalmente hinchado y marcado.Estaba preparado.Con cuidado,mire de reojo pegado a la pared,sin dejar de apretar mi puño.El tipo parecía buscar algo,y ahora,me daba la espalda.Era mi momento.Volvi a ocultarme tras aquella pared,cogí aire y sintiendo otra bajada a mi puño,salí de mi sucio escondrijo. No había nadie,aquel tipo se había ido sin decir nada,sin siquiera pedir nada.

-Que coño... -Murmure.Mire mi mano.No haber liberado aquella fuerza me estaba pasando factura,y con ello,mi mano comenzaba a ponerse entre granatosa y moradiza. Entre de nuevo a "casa",para cerrar una vez mire a los lados y me asegure.

---------------

-Lydia, creo que necesito tu ayuda.-oí la voz de Keith dentro del mismo lugar donde estábamos nosotros.Habian dos opciones:o se había cargado a aquel tipo y lo necesitaba vivo o el que había salido malparado había sido él.Mire a mi compañera,y asustado,salimos a verle.Jane miraba curiosa su mano,mientras le susurraba algo.Al vernos,sonrió de forma forzosa.-Todo esta bien,se ha ido sin decir nada.Al parecer no tenía malas intenciones.-mostró su puño a mi amiga,la cual frunció su ceño.

-¿Te ha pegado?-murmuró.

-¡No,no!Es solo que...ejerci mucha tensión en mi puño.

-Yo me encargo.-sonriendo algo apenada,se acerco a el,para coger su mano y acariciarla con cuidado y cariño.Si algo era Lydia,era dulce.Me sentí algo apartado,sentí que no valía para nada.Aun asi,mis ojos no se despegaron de la mano de mi amiga.Con la yema de sus dedos,acarició sus venas,haciendo que estas fueran bajando el tono tan poco sano que había tomado,volviéndose aquel color caramelo que el chico tenía.Con una sonrisa,miro a Lydia.

-¡Lydia,eres increíble!

-No lo soy.Esto es un defecto.-murmuró,aún así,sonriendo.Aquello se le había grabado a fuego en su cabeza."Defecto".Lydia no tenía ni un solo defecto.Si quiera aquella capacidad que había adoptado era defectuosa.

El moreno suspiro,mirando por la ventana,con un cigarro en la mano.

-No se quien era ese tío.

-¿Nunca has visto...gente como esa aquí?..-Murmure.

-No.Tan arreglados y uniformados no.No quiero pensar que es el gobierno.¡Imaginaos que les da por limpiar esta zona,sería ya la risa!-dijo aún en la ventana,dándole una calada al cigarro.Se quedo mirándolo,algo embobado.No tenía no idea en lo que pensaba.

-Keith.¿Que...defecto posees?-ese sería el nombre clave.Defecto.El moreno dirigió sus ojos violetaceos a los míos,y con aquella sonrisa amistosa,murmuró.

-No sabría como explicarte.-apago la colilla en el alféizar,para lanzarla y mirarme.-Céntrate en tu puño.¿No sientes nada no?

-No...

-Si yo me centro,siento una carga bajar por mi antebrazo.Como una tensión característica.¿Sabes cuando te da un calambre al chocar tu codo con un pico de una mesa?Es algo así,pero más lento y más doloroso que molesto.-murmuró, mirándome.-Solo funciona si centro mi atención en mi puño,e imagino que baja esa tensión lentamente...-no sabía por que,pero mi subconsciente comenzó a seguir aquellos pasos.No sentí esa tensión,pero si un frío muy particular.-¡Benjamin,tu mano!-mire mi mano.Ya decía yo que hacía demasiado frío.Sin yo quererlo,había creado en mis manos diferentes picos de hielo que se habían fundido en el suelo.Asustado,aparte de allí mi mano,tapandola con la otra.

-¡Y-yo lo siento,de verdad!..-dije asustado.El moreno tan sólo negó,yendo hacia mi.Cogio un trapo,y con cuidado,limpió mi mano.Sentia aquel olor tan repulsivo a tabaco,pero en aquel momento no me importaba.El chico tenía tacto y cuidado,era totalmente amable.

-No te disculpes.Esto pasa.Bueno,nos pasa.-dijo sonriendome.Tras varios segundos en silencio,musitó algo.-Jane también tiene un defecto.-Aquello si me congeló.

-¿También es...como nosotros?

-Si.Pero...ella está mucho más atrasada.Tiene miedo a ese defecto.-murmuró,apartando el trapo de mi mano,la cual estaba rojiza debido al frío.Un poco de calor y estaría como nueva.

-¿Miedo?

-Es,según ella,doloroso y difícil.Ironicamente,es como mi otro lado.Yo soy físico,ella es mental.Esta mal que te lo cuente yo,porque me dejo claro que no lo contase nunca.Pero...me pareces de fiar,Benjamin.Tu y Lydia me parecéis buenos chicos.-no se levanto de allí.Suspiro y clavo mis ojos en los míos.Alli solo estábamos el,la tensión,el frío que yo solo había creado y yo.-Tiene algo como...telequinesis.Como poderes mentales.Suena ficticio que lo cuente así.Si la vieses sabría que te digo.-murmuró,mirándome.

-¿Puede...mover cosas con la mente?

-Eso es un 20% de lo que llega a hacer.Sabe hacer más cosas,o eso a llegado a demostrarme,pero no es capaz de controlarlo.Le he visto como lo ha intentado,semanas enteras.Se ha rendido totalmente.

-¿Por qué tan pronto?...-musite.

-Cree que es una maldición,o el karma.Cree que la vida le está castigando por...-frenó en seco.Si,estaba contando más de lo que realmente debía.-Por cosas.-suspiró, poniéndose en pie, tendiendome la mano.-Es muy cerrada y fría,que lo sepáis.No le caeis mal ni nada así,es solo que desconfía mucho.-dijo,para sonreirme y estirar sus brazos.-Dejemos las historias de señor mayor y comamos algo.Yo iré a por Jane,ves tu a por tu amiga.-me mostró aquella sonrisa tan amable y fiel,y devolviendosela,asenti. Fui hacia nuestra habitacion y vi Lydia,una vez más,tumbada y dormida.Se veía tan frágil.Parecia de otro mundo.Todos los de aquel lugar parecíamos otro mundo.La zona norte era otro mundo totalmente.

ευημερία - The Lost Kids // [ CANCELADA ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora