Guardiana De Cristal ©

Capítulo 8

¡¿Como mierda habían llegado?! Iza no conocía otra forma de transportarse tan rápido, que como ella lo hacia. Solo ella tenia él don. ¿Como entonces fue que ellos llegaron tan rápido y justo detrás de ella?

A su lado izquierdo Caleb y Gabriel peleaban espalda con espalda, y Alex estaba justo detrás de ella, era así como debía pelear un equipo. En cuestión de minutos acabaron los trecgeraptos que los rodeaban y de los túneles comenzaron a salir mas y mas.

Iza, tomó su collar, cerró los ojos. Tenia que intentarlo, ya iba siendo hora de que lo lograra por si misma. Tomo la mano se Alex y de Gabriel a su lado quien tenia una cara de extrema repulsión por los cuerpos de los alienígenas, le hizo de señas a Caleb y este tomó la mano de Alex, una vez todos estaban juntos Iza se concentro, busco muy dentro de su mente entreteniendo en los hilos de sus recuerdos, y lo encontró, lo tomo y segundos después abrió los ojos y ya estaban en su habitación.

•••

—¡Maldita Sea!! ¡¿Iza siempre tienes que opacarme?!— no habían pasado ni cinco segundos cuando Caleb comenzó a discutir con Iza

—Caleb no quise opacarte!!

—no te creo!— la señaló con él dedo.

—¡bien!, pues no me importa.

—¡Joder! ¡¡Eres una maldita perra!!— grito al tiempo que entraba a su habitación y azotaba la puerta.

Iza entró a su habitación y Alex se fue a la suya mientras negaba con la cabeza, Gabriel solo se quedo ahí parado contemplando las tres puertas ahora cerradas frente a él.

Toco la puerta de Iza y esta la abrió con violencia —¡¿Que quieres Caleb?!... Oh, lo siento Gabriel, ¿que pasa?

El comenzó a tronarse los huesos de los dedos uno a uno, de pronto estaba nervioso —ah... Veras... Iza, no... Yo... Ay, solo... Solo olvidalo — escucho la risita de Iza mientras se daba la vuelta para irse, y lo hizo sentirse tonto, ¿que mierda le pasaba? Por que tenia que sentirse así frente a ella.

Era cierto que la chica era hermosa, y a pesar de ser mujer, imponía. Tenia algo en la dulzura de su ser que la hacia verse letal. Era tan contradictoria.

—Gabriel, espera...—
Gabriel se giro, estaba ya a medio camino de su habitación—¿quieres pasar?

Asintió, e Iza abrió mas la puerta permitiéndole la entrada, Gabriel entro y cerró la puerta tras él, Iza estaba sentada en su cama y lo miraba fijamente, todavía llevaba puestos los trozos de vestido que había usado en la lucha y había algo que lo hacia sentirse como si estuviera invadiendo su intimidad — ¿pasa algo?— pregunto inclinando la cabeza a un lado, su gesto le recordó a los pájaros.

—no...—busco un lugar donde sentarse y al no encontrar refirió quedarse parado— bueno, yo... Me gustaría recibir mas entrenamiento físico, hoy ni siquiera me entrenaste y en un santiamén ya estaba en la cueva sin saber que hacer, de no haber sido por Alex probablemente hubiera muerto.

Iza negó con la cabeza.

—no habrías muerto, te vi, tienes potencial, además apenas va comenzando el entrenamiento, ya veras que cuando termine él mes seras tan capaz como Alex o Caleb, seras una parte fundamenta en él equipo, mientras basta con que pongas atención.

Iza se levantó, abrió el armario y saco un vestido, Gabriel pudo ver que todo lo que tenia eran vestidos —Iza...— ella fue al baño y grito un sí al cual Gabriel contestó — ¿por que tu usas siempre vestidos? — en ese momento Iza volvio del baño—Eh visto a las otras chicas y eres la única que los usa, ellas siempre usan ese extraño pantalón color pergamino que todo mundo parece amar

De pronto él hambiente pareció tensarse, Iza le lanzo una mirada fría y tomo una toalla del mueble— ese es él color de los guardianes Gabriel, ahora si me disculpas voy a lavarme toda esta suciedad alienígena.

Y con eso entro despavorida al baño, Gabriel solo pudo salir del cuarto de Iza con una expresión de confusión en su rostro.