Equivocado// YoonMin

capítulo 3: las prioridades de YoonGi y Taehyung

El día había terminado. Luego de unas películas ambos chicos se quedaron dormidos en el sofá de Jimin, ninguno de los dos se dio cuenta hasta que las 2:30 a.m. se vio en el reloj, y claro, Jimin era un buen amigo y no podía dejar que YoonGi se fuera a esas horas, ¿no?

Fueron a la habitación de Jimin y ambos se recostaron en la cama...

¿Creían que era algo especial?, pues en realidad no. Jimin y YoonGi tenían ese habito de dormir donde sea, por lo que en mas de una ocasión se recostaron en la misma cama a dormir, esta vez no haría la diferencia, ¿cierto?

Una vez ambos cómodos comenzaron a caer en el sueño de nuevo. Jimin dio unas cuantas vueltas en la cama hasta que sintió los brazos de su Hyung rodeándolo. Se sonrojó un poco.

—quedate quieto, mocoso...—

Jimin se dio la vuelta quedando frente a frente con su amigo. Sonrió un poco al verlo con los ojos cerrados y el ceño fruncido. Se acomodó mejor, poniendo su cabeza en el pecho de su amigo y durmió abrazado a él. Nunca había dormido mejor...

...

—¡YoonGi!, ¡YoonGi Hyung!,¡despierte!—Jimin suspiró. Llevaba un largo rato intentando despertar a su perezoso Hyung y nada servía — ¡Yoonie!¡despierta!—comenzó a pegarle con una almohada.

Grande fue su sorpresa al sentir como jalaban de la almohada en sus manos, llevándolo así justo encima del cuerpo de su Hyung, quien lo miraba con un sólo ojo abierto y una sonrisa ladeada...

—mocoso, deja de pegarme,¿quieres?—

—¡Yoonie Hyung, debes levantarte antes de que se nos haga tarde!¡rápido, arriba!—

YoonGi rodó los ojos y sacó a Jimin de encima suyo con cuidado, fue hasta el baño y se dio una ducha rápida.

Jimin abrió uno de los cajones y de ahí saco un conjunto de su Hyung. Unos pantalones negros con una camisa azul oscuro. Y sí, por si se lo preguntaban, YoonGi tiene de su ropa en la casa de Jimin. No es primera vez que hacen pijamadas.

Cuando YoonGi salió vio el conjunto encima de la cama de Jimin y sonrió. Se lo puso y bajó a la cocina donde Jimin estaba esperándolo.

—Hyung, ¿harás el desayuno,cierto?—

YoonGi rió un poco mientras negaba. Pasó al lado de Jimin y despeinó sus cabellos para seguido ir a la cocina y comenzar a hacer el desayuno.

...

—¡Hyung! ¡Vamos a llegar tarde!—Chilló el menor casi corriendo.

—¿me estás jodiendo?, Jiminnie, pequeño torpe, ayer nos escapamos de la universidad en medio de una clase por ir a tomar un helado, ¿y te preocupas por llegar tarde?—

—es un buen punto... ¡Pero no es excusa Hyung!, además, si llego tarde no alcanzaré a ver ni un segundito a JungKookie...—

—Jimin, ya te lo había dicho muchas veces antes —comenzó a hablar el mayor con el ceño fruncido— pero por lo visto se te olvidó, nuevamente, así que te lo repetiré; no te acompañaré para que observes al tarado de Jeon, ¿entiendes?—

Jimin asintió, sabía que su Hyung odiaba a JungKook, pero simplemente no se acostumbraba a pasarla lejos de su mejor amigo, él simplemente no podía, le costaba mucho y siempre terminaba extrañándolo mucho, tanto así que habían veces en las que dejaba de ver que hacía JungKook e iba a buscar a su Hyung, veía unos minutos lo que hacía y cuando creía que ya era suficiente volvía con él, pero, era algo normal siendo mejores amigos, ¿cierto?

—aún así quiero llegar rápido Hyung, así que mueva esas perezosas piernas de pollo y ¡andando!—

—mas respeto, mocoso, soy tu Hyung—

—lo siento Hyung...—

Llegaron a la universidad por fin y Jimin abrazó a su Hyung de improviso.

—¿J-Jimin?—

— acabo de ver a JungKookie, iré a ver con quien está, vuelvo mas tarde, ¿si?—

Cortó el abrazo y corrió hasta detrás de un árbol, donde podía apreciar perfectamente a su amado sin ser visto.

YoonGi mordió su labio inferior, queriendo a toda costa evitar llorar.

—¿Hyung? ¿Qué tiene?¿p-por qué sus ojos están acuosos?— preguntó un preocupado Taehyung recién llegado.

—y-yo... Taehyung, yo no tengo oportunidad, ya está, todo estaba bien ido a la mierda desde el principio, y lo único que he conseguido al no olvidarme de Jimin es dolor...—

—Hyung...—abrazó a su amigo con fuerza, buscando reconfortar lo. Pocas veces se veía a un YoonGi llorar, y no existe otra escena que pudiera dañar mas el corazoncito de Taehyung que ésta, uno de sus mejores amigos llorando...— tranquilo, no pierda las esperanzas. Yo sé que Jiminnie está enamorado de usted, es solo que no sabe distinguir entre el gustar como amigo y el gustar romántico. Él no ama a JungKook, lo ama a usted, yo lo sé, y si tengo que pelearme con él todos los días para que se dé cuenta y sea feliz con usted, estoy dispuesto a hacerlo...—

—n-no pequeño, t-tu eres muy bueno enserio, pero no puedes seguir arriesgando tu amistad con Jimin solo por mi, es algo muy estúpido, mi felicidad no es importante, mi prioridad son Jimin, NamJoon, Jin y tú, nadie mas, ¿oíste?, mientras ustedes estén bien, yo lo estaré también — secó las pocas lágrimas que se habían escapado y acarició los cabellos de su tierno dongsaeng.

—¡no! ¡No pienso rendirme aquí!, usted nos cuida mucho YoonGi Hyung, siempre nos protege e intenta que seamos felices por sobre todas las cosas, ¡ahora es mi turno de protegerlo y hacerlo feliz!—

El hiperactivo chico tomó la mano de YoonGi y lo llevó hasta el salón correspondiente. Hizo que se sentara en uno de los asientos y puso su mochila al lado de este.

—nos vamos a sentar juntos, Jimin morirá de celos cuando vea que estoy siendo cariñoso con su futuro novio, se le confesará, se casarán, tendrán muchos hijos ¡y yo seré el padrino de todos ellos!— dijo lo último con una chispa de emoción en sus ojos. Le encantaban los niños.

—es un poco peligroso, ¿no crees?, lo único que lograrás es romper tu amistad con Jimin...—

—bueno, me lo agradecerá cuando estén juntos de una vez por todas. Ahora, ni se le ocurra echar a perder mi plan, Hyung. Usted solo siga me el juego a toda costa. —

—¿y si no lo hago?—

—¡le diré a Jin Hyung que usted rompió su jarrón favorito cuando todos fuimos a su casa!—

—no te atreverías— desafió el mayor.

—¿quiere comprobarlo?—

Un escalofrío recorrió su espalda al pensar la reacción de Jin.

—no, no quiero. Te seguiré el juego, mocoso malvado.—

Taehyung sonrió satisfecho y se sentó al lado de su Hyung, cinco minutos después el timbre sonó y todos los estudiantes entraron al salón. El plan de Taehyung comenzaba...