Equivocado// YoonMin

capítulo 16: ¿la madre de Jimin en Seúl?

Jimin y YoonGi por fin llegaron a la casa del menor.

Jimin estaba algo mareado, la sensación de esa motocicleta tan rápido sin duda lo había desorbitado.

YoonGi estacionó y bajó de la motocicleta, ayudando después a Jimin para que bajara.

YoonGi dejó a Jimin en la puerta de su casa, y cuando el menor iba a sacar su llave para entrar, encontró la sorpresa de que la puerta estaba abierta, y él podría apostar todo lo que tenía a que cerró la puerta de su casa con llave antes de salir de su casa.

Chillando, corrió hasta su amigo y se abrazó a él.

—¿Jimin...?—

—la puerta está abierta, Hyung, y yo la había cerrado...—

YoonGi mordió su labio inferior y entró a la casa con cuidado. Escuchó ruidos en la cocina y no tardó en tomar un jarrón que estaba al paso.

Jimin caminaba detrás de él con su mismo cuidado. Tenía sus manitas hechas puño en la camisa de su mejor amigo, mientras inclinaba la cabeza hacia al lado buscando ver a la persona que entró en su casa.

Entraron a la cocina y YoonGi levantó el jarrón dispuesto a lanzarlo a la persona que podría ser un ladrón.

Pero antes de llegar a hacer una tontería, la señora que aparentaba la misma edad de su madre se dio la vuelta, mostrando así sus bellos ojos café y pequeños, algo rasgados, unos labios algo finos, mejillas regordetas, y un cabello castaño oscuro, largo. Una mujer sin duda tierna. La madre de Jimin.

—¿mamá?— preguntó el pequeño desconcertado.

—¿señora Park?—

—¡Jimin, YoonGi!. ¿Qué hacen los dos aquí?, ¿vienen a hacer cositas? ¿Les dejo solos?—

Oh, genial. Otra mas con la misma idea, ¿es que acaso la madre de Jimin y la de YoonGi se ponían de acuerdo?.

—no, mamá, YoonGi solo vino a dejarme... — habló con un sonrojo.

—¡oh, pero que caballero!, mi hijo tiene suerte de tenerte, querido— sonrió, haciendo sus ojos pequeños tal como le pasaba a Jimin.

—pues gracias... Supongo... —

—mamá, no quiero sonar grosero, pero ¿qué hace aquí?, su visita enserio me tomó por sorpresa, no avisó de ante mano...—

—¡quería darte una sorpresa, mi pequeño solecito!— sip, la madre de Jimin era igual de tierna que él.

Jimin se lanzó a sus brazos y se fundieron en un tierno abrazo. De pronto, YoonGi se sintió incómodo. Estaban en una reunión familiar y él no pintaba nada ahí.

El abrazo se deshizo por un segundo. La madre de Jimin miró a YoonGi con una sonrisa, tomó su mano y lo jaló hasta que llegara donde ellos, uniéndolo así en el cálido abrazo.

—los extrañé mucho, pequeños...—

—ay mamá, también te extrañamos. Debiste haber oído a YoonGi la última vez que te fuiste; estaba todo desesperado por saber cuando volverías.—

YoonGi bufó con un pequeño sonrojo en sus mejillas y negó.

—eso no es cierto, señora Park, digale a su hijo que no mienta, que está mal mentir.—

—¡yo no miento, Yoonie Hyung!— habló con un puchero para luego inflar las mejillas.

—oh, vamos pequeño, no te enfades— YoonGi pinchó una de sus mejillas y revolvió sus cabellos.— creo que debo irme ya; mi mamá está en casa y si tardo más pensará cosas absurdas...—