capitulo 28

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Una hora después llega el cuerpo, no me siento capas de verlo ahí, no puedo simplemente no puedo.
Las lágrimas corren por todo mi rostro, fluyen sin parar, mi corazón lo siento apretado, mi alma está destrozada, no tengo palabras para describir el dolor que siento, en un segundo mi mundo se desmoronó completamente, mis ojos están cansados tanto llorar, pero en estos momentos es lo único que puedo hacer, ¿Podré algún día poder volver a sonreír? ¿Este dolor pasará? Miles de preguntas a las cuales no logro hallar las respuestas.
Poncho toma mi mano y la aprieta.

-quieres ir?
Asumo que se refiere a ir a ver el cuerpo en el cajón.
Asiento, caminamos juntos.
-no, no puedo.
Poncho me mira y asiente.
Salgo de la casa y poncho me sigue.
El no dice nada, supongo que no hay palabras que puedan consolarme.

-no haz comido nada, ya son las 12 vamos a comer?

Ni siquiera me había dado cuenta de que aún no desayuno. Asiento y vamos a un local de comida, pedimos desayuno y al rato lo traen, como muy poco, no tengo nada de apetito en verdad.

Recibió una llamada, la veo y es Tomás.
No quiero hablar con nadie, así que le corto y apagó el celular.

-creo que deberíamos buscar un hotel.
Dice poncho.

-no te irás hoy?

-no, claro que no, no puedo dejarte sola.

Realmente necesito su compañía, pero no querío que termine por perder su trabajo ya a faltado mucho por mi culpa.

-no te preocupes por mí, estaré bien. Tú tienes que ir a trabajar.

-pero..

-pero nada, luego iremos al aeropuerto.

-estas segura? Yo puedo llamar a Marck para avisarle no hay problema.

-necesito estar un rato a solas si? Si te necesito yo te llamaré.

Salimos de local y vamos a buscar un hotel para mí, no me quedaré con mi mamá, no soporto la idea de verla.

Me quedaré en el Four Seasons Hotel, entramos al cuarto y es muy lindo.

Entramos y lo primero que hago es a tirarme a la cama, estoy realmente exhausta, física y mentalmente, poncho se recuesta al lado mío, el igual está mal, con mi papá se conocían hace mucho, y sé que no dice nada por mí. Agradezco su compañía, si él no estuviera conmigo no sé qué habría echo, sola, sin mi papá quizás ahora estaría tirándome por un acantilado.

Poncho llama al aeropuerto para pedir un vuelo de regreso a new York, me da pena que tenga que irse pero como dije, no quiero que pierda su trabajo por mi culpa.

-poncho, tu cuántos años tienes?
Creo que nunca me a dicho, o quizás si y no lo recuerdo.

-23

Yo cumplo la otra semana 16 entonces solo nos llevamos por 7 años, no es mucho o si?

-Por qué lo preguntas?
Dice mirando al techo.

-simple curiosidad.

-que harás ahora?

-no lo sé, no creo que mi mamá me quiera seguir pagando la escuela, tengo un par de ahorros, yo creo que me iré lejos.

-no, claro que no, tienes que terminar la escuela, si tú mamá no quiere pagarte la escuela, te consigo una beca, tus notas son exelentes, y si no te la pago yo, no hay problema.

-luego vemos si?

-bueno.

El se levanta y va al baño, ya tiene que irse al aeropuerto su vuelo sale en 4 horas, es sin escala así que llegará rápido.
Al rato sale del baño.

-segura que estarás bien sola?
Me dice preocupado.

No la verdad no me digo en mis adentros.

-si

El me abraza, y rompo en llanto.

-gracias por estar conmigo, no sé qué haría sin ti.
Le digo llorando el solo me abraza y acaricia mi espalda con delicadeza.
Mís lágrimas no paran.

-tranquila, cariño, yo siempre estaré contigo.

Al rededor de 10 minutos pasan y o sigo llorando abrazada a poncho. Pero ya se tiene que ir. Tengo miedo de que No esté conmigo pero no le quiero decir.

Te llevaré al aeropuerto.

-y luego como te vendrás?

-pediré un Uber.

Salímos y nos subimos a un taxi en 1 hora llegamos al aeropuerto.

El vuelo sale en 2 horas.

-Te pido un Uber?
Me dice poncho.

-no, esperaré a que te vayas.

-quieres asegurarme de que me vaya?

No, solo quiero estar un rato más contigo.
Quisiera decírselo pero no lo hago.

-sii tengo que asegurarme de que te vayas.

Nos sentamos en un café y pedimos un capuchino.

Hací pasamos el rato hasta que es hora de que se suba al vuelo.

-ya te tienes que ir.
Le digo.

-si. Me llamarás cualquier cosa ?

-si.

El me abraza, amo sus brazos me siento segura, cómoda.
quisiera parar el tiempo y quedarme hací por siempre.

-estarás bien?

-si.

-prometelo.

-lo prometo poncho, estaré bien.
Cambiaré de número para que nadie me esté llamando, si alguien pregunta por mí solo di que me fui de vacaciones por favor no quiero hablar con nadie.

-ni con Anahí?

-con nadie.

-esta bien.

Vuelven a avisar que el vuelo va a despegar. Así que nos despedimos de nuevo.
Y se vá.
El miedo recorre mi cuerpo.

Voy y compro un chip nuevo.

Pido un Uber y voy al hotel, llegó y me acuesto necesito dormir.

Despierto a las 12:pm me duele cañón la cabeza y el cuerpo.
Me levanto y voy al baño miro mi rostro y estoy irreconocible.
Mi cabello sigue liso pero está enmarañado, mis ojos rojos, irritados y mega inchados, mis mejillas están rojas por las lágrimas.
Me meto a la ducha y no puedo evitar recordar a mi papá, caigo en la tina y me quedo ahí mientras el agua se lleva las lágrimas que no paran de fluir por mis mejillas, pierdo la noción del tiempo me siento débil, como si mi corazón estuviera roto, pienso en mi mamá, que daría por que ella fuera distinta conmigo.
Me salgo de la ducha y me tiró en la cama, no sé qué hacer, si ir al velorio o ir solo al entierro, no quiero verlo en ese cajón, quiero recordarlo vivo.
Prendo el celular y llamo a poncho, el me contesta inmediatamente, me cuenta que llegó bien, pregunta cómo estoy, miento diciendo que todo está bien.
Qué debo hacer ahora? Como podré levantarme y seguir? Cómo le explicó a mi alma que ya no estará más el hombre que más amo?

Lo prohibido Donde viven las historias. Descúbrelo ahora